Gugal estaba sorprendido por todo lo sucedido, sin embargo, al ver la tranquilidad que tenía su amo no se cuestionó por más tiempo y tampoco expuso sus dudas.
La verdad era que Ying Xuan tampoco entendió todo lo que estaba sucediendo, aunque algunas respuestas le fueron contestadas, aun así tenía otras preguntas rondando en su mente. Para no dedicar mucho tiempo a preguntas sin respuesta decidió dejarlas a un lado y centrarse en aquello que tenía cerca, cultivar y leer la segunda parte del legado.
Durante otro largo tiempo habían visto aún más de los alrededores de la misteriosa estructura, luego de eso volvieron a regresar a la plataforma de piedra. Ying Xuan se sentó de piernas cruzadas y Gugal solo se quedó de pie, esperando escuchar las órdenes de su amo.
Ying Xuan cerró sus ojos pensando en las palabras con las que comenzaría la conversación. No mucho tiempo después habló. "Gugal, escucha con atención. He pensado que para fortalecer nuestro compañerismo debemos conocernos mejor, ¿Estás de acuerdo?".
Gugal no lo pensó por mucho tiempo, poco después respondió. "Estoy de acuerdo en todo lo que el amo ordene". La formalidad de Gugal al hablar con él lo dejaba un poco incómodo, pero también lo entendía, era similar a pedirle a un empleado que le hablara como si fueran amigos cercanos.
El empleado estaría un poco incómodo e incluso desconfiaría acerca de las razones por las que el jefe quisiera ese trato. Dado que esa era la forma de hablar que tenía, él no trataría de imponer sus gustos y simplemente dejaría que Gugal decidiese lo que tenía que hacer.
La lanza volcánica era un artefacto muy valioso, Ying Xuan no lo dejaría ir tan fácilmente, él sabía que era algo egoísta y podría ser hipócrita pedirle a Gugal que hable de manera informal para entrar en confianza el uno al otro, después de todo él lo había obligado a someterse. Por esa razón trataría de entablar buenas relaciones con él. Y de ser posible convencerlo de que se quede como su arma principal, de no ser así lo dejaría libre después de conseguir otra lanza del mismo o más alto nivel.
Ying Xuan dio un respiro. "Bien, entonces iniciaremos con lo principal. En esta vida mi nombre es Ying Xuan, puede sonar extraño, pero no soy originario de este mundo. Nací en un mundo donde todos eran mortales comunes sin ninguna posibilidad de practicar el cultivo.
Hablando solo de mi persona he vivido 2 vidas en total, hablando de forma general viví 3 vidas, un total de dos reencarnaciones. En la primera vida mi nombre fue Bai Yingzu, mi primera muerte fue cuando tenía 23 años en un accidente de avión debido a un ataque zombi, básicamente muertos que se levantaron y se comieron mi cerebro.
En la segunda vida nací en este continente, mi nombre también fue Bai Yingzu, morí después de regresar de un viaje cuando acababa de cumplir los 17 años.
Esta es mi tercera vida, transmigrado en el cuerpo del segundo Bai Yingzu, tiempo después recuperé algunos recuerdos extraviados y supe que mi nombre real era Ying Xuan... Como lo has escuchado, eres libre de creerlo o no, solo te cuento esto para que nos conozcamos mejor y así cultivar nuestro compañerismo".
Ying Xuan esperaba ver la reacción de Gugal ante su muestra de sinceridad. Pero contrario a lo que esperaba, no parecía confundido y tampoco mostraba alguna expresión de incredulidad, solo se veía pensativo, como si tratara de procesar cada dato y comprender palabra por palabra. No pasó mucho tiempo en silencio y entonces dijo. "Master, entiendo la situación".
Ahora el que no podía creerlo era Ying Xuan. "¿En serio? ¿No crees que son los delirios de alguien con altas probabilidades de enloquecer?".
Algunas veces, Ying Xuan se cuestionaba acerca de todo lo vivido en sus recuerdos, varias preguntas nacieron de esa duda persistente. ¿En verdad soy alguien transmigrado? ¿En verdad viví en otro mundo? ¿No era solo un sueño fantasioso de un joven desesperado?.
En verdad él no tenía pruebas, pero aun así no podía dejarlo como un sueño, él pudo sentirlo, para él era su realidad. Si no tuviera una mente persistente, así como su gran fuerza de voluntad, ya hubiese abandonado todas esas ideas y las hubiera tomado como un sueño, o incluso peor podría haberse vuelto loco.
Gugal respondió. "En verdad lo creo. Yo también soy de otro mundo".
Ying Xuan se sorprendió aún más. "¿Eres algún humano reencarnado?".
Gugal negó con su pequeña cabeza de toro. "No, no soy humano... La verdad es que cuando nací solo era un pequeño espíritu de flama que surgió de una espora de flor, fui nacido y criado en otro mundo.
Mi madre fue conocida como ‹Flor de Esencia Divina›, ella era una flor de hermosos multicolores, nosotros nacimos de sus esporas, un total de 13 esporas que dieron nacimiento a las bestias divinas del continente ‹Flor Divina›, en nuestro continente no existía el cultivo espiritual, pero sí existía la energía espiritual, esa energía del continente flor divina en comparación con el continente Ao era demasiado pobre.
Pero aun así gracias a esa energía pudimos desarrollarnos y crecer hasta que fuimos llamados ‹Bestias Divinas›. Cada uno de nosotros tomamos formas diferentes de nuestro entorno cercano, estas sirvieron para definir nuestras apariencias permanentes".
Gugal le había dado una gran sorpresa, de esa sorpresa nació aún más curiosidad por saber cómo había terminado en el continente Ao. "¿Cómo fue que terminaste aquí?". Preguntó Ying Xuan dando palabra a sus dudas.
Gugal pareció mirar algo lejano mientras hablaba. "Eso fue por algunos sucesos inesperados... Después de crecer, las 13 bestias divinas se reunieron con la madre flor de esencia divina, estuvimos a su lado para protegerla, esa fue su orden desde nuestro nacimiento.
«Crezcan hijos míos, vuélvanse fuertes, y cuando puedan secar ríos, destruir montañas y partir los cielos. En ese momento pueden encontrarme en medio de la fuente sagrada de la vida innata»
Así como dijo madre una vez que pudimos romper los cielos, iniciamos nuestro viaje para encontrarla, cada uno de nosotros fuimos nombrados por nuestra madre de acuerdo con el orden de llegada.
El primero en llegar fue nombrado ‹Serpiente de agua blanca›. Este era una larga serpiente de hermosas escamas de color blanco y ojos de jade verde. Poseía el poder del control total sobre el agua, era capaz de revertir el flujo de cascadas y detener las furiosas e indomables corrientes.
El segundo fue nombrado ‹Zorro de tormenta frígida›. En un principio era un pequeño zorro blanco nacido en las regiones montañosas glaciares del continente, cuyo poder solo era crear pequeñas ventiscas. Después de un largo tiempo este se volvió un gran zorro capaz de crear poderosas ráfagas y congelar océanos completos.
El tercer nombrado ‹Águila de viento nevado›. Nacido en la misma región que el zorro de tormenta frígida, su poder era similar al gran zorro, por esa misma razón ambos eran fervientes competidores que buscaban ser el mejor sobre el otro.
El cuarto nombrado ‹Armadillo acorazado›. Este era un armadillo con un largo de tres metros y una altura de dos metros, era poseedor de una coraza impenetrable y un control total sobre el elemento tierra, nacido en las regiones montañas del continente.
El quinto nombrado ‹Topo de tierra negra›. Este nació junto al armadillo acorazado y ambos obtuvieron el mismo poder, pero en comparación el topo de tierra negra era muy superior, capaz de sumergirse a varios miles de metros en el suelo con mucha facilidad y provocar grandes terremotos capaces de agitar a todo el continente.
El sexto nombrado ‹Larva de seda nevada›. Este también había nacido en la región montañosa glaciar, se crió junto al zorro y el águila, y poseía capacidades similares a los dos anteriores, a pesar de ser el de menor antigüedad, este superaba por mucho a sus hermanos del mismo elemento.
El séptimo nombrado ‹Tigre lunar›. Este era un tigre de color plateado, poseedor del poder la radiante luna llena, su poder se fortalecía durante la noche, pero igualmente se debilitaba durante el día.
El octavo nombrado ‹Dragón solar›. Nacido junto al tigre lunar, este era un dragón con largo cuerpo de color dorado, poseedor del poder del ardiente sol, su poder se fortalecía durante el día, pero igualmente se debilitaba durante la noche. Se decía que el dragón y el tigre eran opuestos, pero gracias a esto lograron complementarse para evitar peligros.
El noveno nombrado ‹Escorpión de arena desierta›. Nacido en la región más remota y desértica del continente, este era un escorpión gigante de más de 4 metros de altura, poseía un par de poderosas pinzas y una cola con un potente veneno letal. Su poder era una subdivisión del control tierra, el total control sobre la arena.
El décimo nombrado ‹Búho de luz nocturna›. Búho gigante de ojos plateados, poseía un gran poder durante la noche y se debilitaba ligeramente durante el día, era capaz de controlar la neblina y humedad de la región, se decía que este era el hermano más sabio entre todos.
El undécimo nombrado ‹Oso de cascada espiritual›. Gran oso de color negro con ojos dorados, poseía el control sobre los espíritus, fue conocido como el regente absoluto de los espíritus.
El duodécimo nombrado ‹Cuervo de llama azul›. Cuervo de tres patas cubierto con las llamas azules del inframundo, poseedor de un par de alas con poderoso corte, sus llamas azules no podían ser extinguidas a menos de que consumieran a su objetivo.
Y por último el decimotercero, nombrado como ‹Toro de llama naranja›. Este fue el más débil de entre todos, su poder era un nivel por debajo de los demás. Se crió en la región de los toros de la llama naranja, después de pasar un largo tiempo con ellos finalmente logró obtener su apariencia y habilidades".
...
El espacio comenzó a ondular y se agrietaba ligeramente, esto pudo ser visto en lo más alto del cielo, se expandió cada vez más hasta alcanzar el tamaño de una persona adulta, de aquella grieta dimensional salió un hombre vestido de blanco, bajó y se paró flotando encima de la fuente sagrada, lugar donde estaba la flor de esencia divina.
El hombre posó su mirada en la flor. "Así que en verdad había una flor de esencia divina. No solo eso, también tienes conciencia. ¿Tiene algo que decir joven dama?". El hombre dirigió su pregunta a la flor y esperó su respuesta, pero no hubo sonido alguno.
Tras no haber respuesta dijo. "Ya veo. Entonces no hay más que decir". Sin decir otra palabra caminó pisando el cielo directamente para tomar a la flor. Pero al dar su tercer paso, rápidamente dio un salto hacia atrás pisando tierra.
Mirando de donde se había movido, vio que el lugar se encontraba congelado con escarcha en medio del cielo, y a lo que podía ver ese frío no era para nada débil, él sabía que si era tocado por ese hielo se congelaría de inmediato. De quedar congelado confiaba en poder salir de una prisión de hielo, pero no sería tan rápido para hacerlo, dándole al enemigo el tiempo suficiente para hacer otro movimiento sobre él.
De los alrededores había sentido una sola presencia la cual correspondía a la flor de esencia divina. Pero ahora que su sentido espiritual había vuelto a escanear los alrededores había encontrado 13 nuevas presencias. A un lado del lugar en el que se encontraba pudo ver a un zorro blanco de ojos azules, mirándolo con ferocidad.
También pudo ver a otras 12 Bestias saliendo de entre los densos árboles del bosque. "Bestias míticas... Mirando esto ya no puedo dar vuelta, has logrado despertar mi curiosidad".
El hombre ahora sabía que la flor de esencia divina que tenía enfrente poseía un alto nivel. Y la razón de eso era que las flores de esencia divina podían dar vida a las llamadas bestias míticas, una flor de nivel 10 podía dar vida a un máximo de 18 bestias míticas, mirando la cantidad de estas bestias míticas presentes, calculó que la flor de esencia divina era de al menos el nivel 7.
El hombre sonrió. Su anillo en el dedo índice izquierdo se iluminó y en un parpadeo se encontraba sosteniendo un sable en su mano derecha y un cristal blanco en su mano izquierda. En cuestión de segundos liberó por completo el poder de la base de cultivo, ahora su aura podía rivalizar con el aura de las bestias míticas frente a él.
Él podía ver que estaba completamente rodeado, siendo encerrado en su lugar por 3 corrientes de energía frígida. De las que podía sentir se encontraba debajo de la tierra, sobre el suelo y en el cielo.
El zorro blanco de ojos azules era el que estaba congelando sobre la tierra y un águila de color blanco era el que había congelado el cielo imposibilitando el vuelo. Pero la tercera aura fría que había congelado debajo del suelo no fue reconocida, no podía ver qué tipo de bestia podía congelar el subsuelo.
La tierra tembló y de ella surgieron gruesos muros de piedra que lo encerraban en un área circular imposibilitando el escape. El hombre dio un resoplido. "Ni siquiera tenía pensado escapar".
Haciendo su primer movimiento en un parpadeo se encontraba frente a un gran oso negro, el oso al verlo lanzó una zarpa directamente a la cara. Antes de que fuera cortado por las garras, el hombre movió su sable cortando las garras del oso, dando un salto atrás, una esfera de energía se formó en la punta del sable, sin hacer nada más, empujó la punta de su sable con dirección a la cabeza.
*Estallido. Con el empuje de su sable la cabeza del oso negro explotó. Todo había sucedido tan rápido que en oso apenas y tuvo tiempo de moverse para dar un zarpazo.
Las otras Bestia se habían movido tan rápido como pudieron y dirigieron todos sus ataques, estallidos de luces multicolor surgieron disparados hacia su cuerpo, todo tipo de poderes lo golpearon directamente, de los únicos que le había hecho verdadero daño habían sido el atributo frígido de las tres bestias de hielo y el atributo ardiente de las dos bestias de fuego.
De las bestias míticas presentes había visto como un peligro a solo 6 de ellos, las 3 bestias de atributo frígido, las 2 Bestias de atributo fuego y una serpiente blanca de 20 metros de largo. En aquella serpiente blanca de la que podía sentir una densa sensación de peligro, la serpiente no había hecho un movimiento y solo se limitó a estar a un lado de la flor como su guardia.
Él sabía que no podía subestimar a esa serpiente, que no hubiera hecho un movimiento contra él no lo relajaba en absoluto, al contrario de eso levantaba una cierta sensación de incomodidad y sospecha. De las 12 bestias restantes que se encontraban presentes sabía que esa serpiente de 20 metros requería del mayor cuidado al hacerle frente.
Ya había acabado con el oso negro de 7 metros. Sabía que ese oso no estaba muerto. Las flores de esencia divina daban vida a bestias míticas, estas bestias no podían morir a menos que se desconectaran de la energía del mundo y rompieran vínculos con la flor de esencia divina, de no ser así esas Bestias serían seres inmortales que después de morir resucitarían un número infinito de veces.
Matarlos no era una opción, tal cosa no podía ser logrado con el nivel de su poder actual, lo único que podía hacer era buscar la manera de robar la flor e irse rápidamente de este mundo.
Lo único que podía hacer para cumplir con esa meta era haciendo colapsar el mundo, la energía de un mundo al borde del colapso era caótica e inestable, por tanto no podría suministrar la suficiente energía para alimentar a las Bestias míticas, y de esa forma tardarían más en resucitar. Este era el único plan que pudo pensar, haciéndolo precipitadamente por el poco tiempo que tuvo.
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