Un Guiño y Una Sonrisa

Condujeron los últimos tres kilómetros en silencio. Pero Peter no dejaba de pensar en su pasado.

Peter estaba seguro de que moriría esa noche, y después de mirar los ojos muertos de León, lo anhelaba.

Pero no lo hizo.

Porque fue la misma noche en que Luna Corrine llevó a sus Valquirias a una redada para acabar con La Rebelión de Torgen. Lo encontró herido pero vivo en la jaula. Lo llevó consigo de vuelta a Invierno.

Después de despertar, Peter le contó quién era, sus padres y lo que había presenciado durante su tiempo con los pícaros. Fue entonces cuando ella le explicó sobre Torgen, la política de manadas y alfas. Le dio la opción de quedarse con ella y su familia o estar en el hospital mientras se recuperaba.

Habiendo pasado la mayor parte de su vida solo en compañía de sus padres, escogió el hospital. Los días que pasó recuperándose despertaron su interés en la medicina y en sanar a los demás.