CAPÍTULO 461
~La perspectiva de Vera~
Kent no me besó. No lo necesitaba. En el momento en que su mano se deslizó de mi cintura y cayó a su lado nuevamente, supe que lo que venía después no se trataba de seducción. Aún no.
Este no era el momento para la lujuria. Era el momento para la guerra.
Se giró y caminó hacia la estantería de pared a pared donde los documentos y carpetas estaban organizados como armas. Estratégico. Preciso. Cada detalle de los negocios del mercado negro de Luna Creciente Espinada, los movimientos de Clave Sombra, los enclaves de lobos rebeldes—todos estaban aquí.
—Entonces —dijo, recogiendo un archivo y lanzándolo sobre la mesa de vidrio—, ¿vas a decirme cuál es tu próximo movimiento brillante, o debo adivinarlo?
Me acerqué a la mesa, con los ojos escaneando el mapa fijado bajo el archivo abierto.