Noche Larga

—¿Crees que los regalos adicionales eran necesarios, Ewan? —preguntó Zane, su voz impregnada de curiosidad mientras observaba a Sandro vaciar el auto de los artículos que acababan de comprar en la tienda.

—Claro, los gemelos podrían, o mejor dicho, podrían estar emocionados al ver el nuevo set avanzado de LEGO que trajiste, junto con el set del castillo, pero los cómics y materiales de pintura…

Hizo una pausa, su mirada se desvió hacia Sandro, quien luchaba con un desbordante arreglo de bolsas. —No creo que eso haya sido un movimiento táctico de tu parte. Nunca he visto algo así en su casa. Creo que ya superaron esa etapa...

Ewan permaneció en silencio al principio, absorbiendo las palabras de Zane mientras comenzaba a recoger algunos de los artículos de Sandro.

El peso de la conversación colgaba en el aire, y luego Zane le dio un codazo en el hombro izquierdo, como instándolo a participar. A regañadientes, Ewan aceptó que esta no era una pregunta retórica.