Dolido II

El corazón de Athena latía con dolor mientras un torbellino de emociones giraba dentro de ella. La traición se aferraba a ella como una niebla densa, espesando el aire a su alrededor. Aiden, la única persona en la que pensaba que podía confiar más que en cualquier otra, había mantenido una verdad tan monumental oculta. Siempre había confiado en él, compartido sus miedos e inseguridades más profundos. Hasta cierto punto, se suponía que debía ser su confidente más cercano, incluso más que Gianna.

¿Cómo pudo haber guardado algo tan significativo para él? El pensamiento la corroía por dentro, haciendo que su estómago se revolviera, provocándole náuseas. Se sintió pequeña, incluso tonta, por pensar que su lazo era irrompible, sin importar qué. Porque los mismos cimientos de su amistad parecían estar desmoronándose bajo ella.