«4 balas restantes... 4 muertes.» Isaac se colocó en posición de disparo y puso su dedo en el gatillo.
—Krah, kruh, kah! —el líder Orco dio un paso adelante y golpeó la armadura púrpura del Ciempiés con su gran maza de madera.
El Orco detrás también dio un paso adelante, mostrando que no tenían miedo, pero la realidad era muy diferente.
—Kor! —el líder Orco señaló a Isaac con su enorme maza y estaba señalando al resto de los Orcos para atacar.
Los Orcos apretaron los dientes y comenzaron a correr al mismo tiempo. Sus grandes cuerpos y mazas de madera estaban listos para aplastar a Isaac como a un insecto.
—Uno —dijo Isaac y apretó el gatillo.
*BANG!*
La primera bala salió del cañón, y los Orcos ni siquiera pudieron reaccionar antes de que uno de ellos ya fuera alcanzado.
*SPURT!*
Uno de los Orcos parecía que tropezó, pero había un agujero abierto en la frente que goteaba sangre verdosa.
El gran cuerpo del Orco se estrelló contra el suelo sin señales de vida.