—¿Has arreglado todo?
—Sí.
Regresando a la tesorería, miré el portal que se encontraba frente a Kevin. Al igual que la primera vez que lo vi, el portal negro frente a Kevin emitía finas adulaciones de magia, lo que resultaba en un remolino de diferentes colores girando alrededor del portal.
—Apresúrate, el portal está listo, volvamos a la tierra.
—Está bien, ya voy.
Habiendo logrado mi objetivo de venir aquí, y habiendo arreglado la situación de Silug, sabía que era momento de regresar a la tierra.
Mirando las paredes del castillo, podía escuchar los débiles sonidos de la lucha que provenían tanto del interior como del exterior del castillo. El interior venía de los orcos en la prisión, y el exterior provinía de la guerra que estaba sucediendo en Immorra.
Aunque me hubiera encantado ver la guerra que estaba sucediendo, sabía que no era el momento.
La guerra era simplemente un medio para lograr mis objetivos.