Capítulo 490: Pensamientos de los forasteros

En la Ciudad Céfiro Celestial, dos figuras jugaban un juego de mesa con piezas en movimiento continuo. Eran la joven y un anciano de más allá, sus aspectos y auras eran bastante ordinarios.

—¿Por qué crees que vendrá? —preguntó la joven mientras movía una pieza con sus delicados dedos, sus cejas fruncidas mientras contemplaba su siguiente movimiento. Cuando la pieza cayó, el anciano negó con la cabeza.

—Simplemente lo hago —respondió el anciano sin mostrar misericordia, moviendo su pieza y terminando el juego—. Jaque mate.

«...», la joven se quedó boquiabierta en silencio, inspeccionando el tablero durante un minuto sólido antes de suspirar para sí misma. Sus ojos brillaron con una luz amarga mientras miraba al anciano. Dijo con insatisfacción y un puchero:

—Si viene, es un idiota.