Los últimos meses habían sido muy transformadores, reveladores y satisfactores de deseos para muchos que vinieron del Campo Estelar de Everlore al Campo Estelar del Cielo Eterno. El entorno más rico, la civilización desarrollada y las oportunidades dadas fueron aprovechadas con ímpetu por aquellos con ambición. El nuevo mundo estaba lleno de nueva vida.
Pero para una sola figura entre esos habitantes no era desconocido este nuevo mundo. De hecho, pasaron la mayor parte de sus vidas aquí, e incluso más tarde murieron en el caos que siguió.
La historia de esta persona fue una de tragedia, pero también de felicidad. Su origen comenzó en el pasado de dos líneas temporales. Aún por divergir, empezaron de la misma manera.