Dyon silenciosamente sostuvo a Ri y Madeleine en sus brazos. Sabía bien que había un instante de tiempo hace solo unas horas en el que había caído en un pozo de oscuridad tan profundo que nunca tuvo intenciones de salir. Si no fuera por su maestro, no sabía si alguna vez podría estar aquí con ellas de nuevo. Había tenido la intención de renunciar a todo para vengarse...
Pero afortunadamente, logró desafiar las probabilidades. Algo en Dyon le estaba diciendo que esto estaba lejos de terminar. El día no sería hoy, pero en algún momento en el futuro, estos eventos volverían a aparecer. Dyon nunca olvidaría el hecho de que su maestro había dicho que la entidad se permitió ser atrapada... Nunca podría olvidar.