Después del desastre en el puerto principal de Valaquia, en la ciudad conocida como Brăila, Honoria se había confinado en su habitación. Después de ser tocada inapropiadamente por uno de los Boyardos locales que amenazó con quitarle la vida por resistirse, la joven e ingenua muchacha tenía mucho en qué pensar. Así, estaba encerrada en su habitación sin compañía alguna excepto por Heraclio, quien hasta hace poco la había estado ignorando como castigo por sus acciones.
La galera viajaba a una velocidad de crucero de aproximadamente 3 nudos, en otras palabras, alrededor de 3.5 millas por hora. Como tal, era un viaje largo y lento hacia Austria. La distancia entre Brăila y Kufstein era de aproximadamente 1,008 millas. Asumiendo que la tripulación remara durante 12 horas al día, les tomaría aproximadamente 24 días llegar a Kufstein.