La curvilínea Elena que acababa de revelar numerosos secretos sobre figuras poderosas se sintió encantada con la fría sonrisa del Progenitor Vampiro, la sangre en su interior fluyendo aún más rápido al observar al ser que se encontraba en la cúspide de todos los Vampiros.
¡Este era solo uno de los enormes efectos para aquellos que conocían a su Progenitor, simplemente el saber que el ser que poseía el Linaje Vampyro más puro se encontraba frente a ellos les hacía sentir un extremo respeto y reverencia!
Elena se encontró con que sus labios rojos se movían inesperadamente por sí mismos mientras seguía perdida en pensamientos, desviándose de su historia después de encontrar el estado de su Progenitor reflexionando.
—Esta hija indigna se preguntaba si ha tenido la oportunidad de alimentarse aún, oh Progenitor. Sé que acabas de regresar de los Campos de Herencia ahora, y no quiero ser una sirvienta aún peor que no te ha ofrecido nada.
—¿Oh?