Preparándose para entrar en territorio enemigo

El resto del día en el territorio de los Vampiros de Sangre Pura en el Inframundo se pasó con el joven Príncipe Casio, quien presentó la cultura de los Vampiros y las delicias que disfrutaban.

En un momento dado, regresaron al amplio comedor donde se dispusieron numerosos alimentos chispeantes, esta vez las copas y cálices adornados contenían líquidos rojos viscosos que eran devueltos mientras Casio ofrecía a Noah una bebida.

—Esta será tu primera prueba de algo que solo entenderás las maravillas como Vampiro, adelante.

El Príncipe observaba de cerca ya que pensaba que estaba emprendiendo la tarea de alimentar a una nueva adición importante al clan por primera vez, sin saber que una belleza de plateados cabellos ya le había ofrecido sangre de incluso mayor calidad no hace mucho.

Noah sorbió la sangre que rodaba en el cáliz mientras comparaba el sabor, observando la mucha menor calidad mientras inconscientemente deseaba la primera que había tenido de nuevo.

—Hmm, ¡bueno! Sigamos.