Decisiones

El dolor era insoportable.

Leonel sentía como si innumerables pequeñas cuchillas estuvieran desgarrando su piel y sus huesos. Nunca había experimentado algo así en su vida.

Se podría decir que la peor lesión que había sufrido eran algunas fracturas en su caja torácica. Incluso la herida en la carne de sus manos había sido ligeramente menos dolorosa que eso. Pero, comparado con esto, esas lesiones eran como un irritante corte de papel.

En ese momento, Leonel tenía toda la intención de rendirse. Era demasiado doloroso. Si simplemente dejara que estas puertas se cerraran, todo estaría bien. Entonces, podría descansar e intentarlo de nuevo más tarde. Eso estaría bien, ¿verdad?

Leonel no era alguien que se engañara a sí mismo. Sabía que no era el trabajador más arduo. También sabía que no tenía la voluntad más resuelta.