Silencio

Reynred dio un paso al frente, la multitud de Reyes se abrió para él.

Vestía las mismas túnicas negras acentuadas con una suave armadura azul oscuro. Era un joven de rasgos encantadores y una mirada algo sombría. Y, a diferencia del pasado, no iba acompañado ni por Jilniya ni por Wilas de las Cataratas del Fin del Mundo y el Pabellón Espejismo, respectivamente. Dicho esto, tampoco había venido solo.

Lo seguía otra pareja de mujer y hombre. Aunque, a diferencia de Wilas y Jilniya, quienes no podían ser más diferentes el uno del otro, esta pareja se veía sorprendentemente similar. A simple vista, era fácil darse cuenta de que eran hermanos, gemelos fraternales, de hecho.

Este par de gemelos caminaba lado a lado, sus hombros prácticamente rozándose entre sí. Y, juzgando por su comportamiento, definitivamente no estaban subordinados a Reynred tampoco.

Al final de la primera fase, había un total de siete Emperadores. Leonel, Anred, Reynred, Jilniya, Wilas y… estos gemelos.