Capítulo 48 - Nunca supe que la chica Panadero era tan deslumbrante

Hace unos minutos, Joanna despertó aturdida en el asiento trasero de un coche conocido que sabía que no era el suyo, preguntándose cómo había sido trasladada allí. Lo último que recordaba era sentir sueño después de comer pizza.

—Jack, ¿dónde estoy? —preguntó, y se encontró con el sonido de una voz inesperada.

—Señora, estamos en una de las mansiones de la familia King —respondió Ike, contento de verla despierta. Todas sus preocupaciones sobre esos ancianos haciendo las cosas difíciles para su jefe se disipaban lentamente.

—¿Qué pasó? —preguntó Joanna, aún inspeccionando su entorno, mientras la confusión rondaba en su mente.

—El señor te encontró dormida en la oficina y te trajo aquí. Jack está con el médico.

Joanna entró en pánico con la explicación. —¿Por qué? Recordó haber comido pizza, y eso era todo, ¿qué exactamente le pasó a Jack? Estaba preocupada.