Colton acababa de llegar a su puesto cuando recibió un mensaje de texto de su hermana. Inmediatamente marcó su número.
—Tess, ¿qué te pasa? ¿Estás loca? —Ambos querían las mismas cosas, pero se dio cuenta de que su hermana estaba perdiendo la razón.
—Dion me dijo que Alex iba a divorciarse de Joan y casarse conmigo, pero ahora, la perra está embarazada y no lleva su anillo. Alex debe haberla divorciado, pero ¿por qué no se puso en contacto como prometió? ¿Crees que todavía se casaría conmigo si descubre que está embarazada? —Tess lloraba al teléfono desde donde se escondió para contestar la llamada. ¿Cómo podía ser Joanna tan descuidada? Por lo que a ella respectaba, Joanna haría cualquier cosa para mantenerse en el matrimonio ya que fue ella quien le propuso a Alex.
—Mira, no sabes exactamente qué pasó, así que no hagas ninguna tontería —advirtió Colton, pero Tess estaba lejos de escuchar.