166 Señor He Arrodillándose para Besarla, un Ataque Repentino (2da Actualización)

Hannah Johnson pensó que él la besaría, pero en lugar de eso, se inclinó, su aliento rozando su oreja con una voz clara y suave, la cual también esparcía un rastro de calor cerca de su oreja.

Extendió la mano, arreglándole el cabello despeinado detrás de la oreja,

—Tu cabello está desordenado —dijo él.

Hannah Johnson apretó los dientes,

—¿Por qué sentía que él la estaba provocando a propósito?

Cuando él dio un paso atrás, Hannah Johnson se movió, bajó del mueble de zapatos y, con la cabeza girando, tropezó y se sentó en el sofá, mientras el pequeño perro marrón miraba hacia la cocina.

—¿Necesitas que te prepare algo para despejarte?

—¿Puedes?

—Sí.

Con la cabeza todavía mareada, Hannah Johnson no se molestó con él y observó al pequeño perro marrón revolotear en la cocina un rato; Fanta luego se recostó en sus piernas, mirando fijamente al extraño hombre en la cocina.