Capítulo 36: ¿Por qué no te escondes?

Abigail levantó al pequeño para calmarlo. El bebé estaba obviamente hambriento, y ella puso su manita en su boca para consolarlo. Empezó a succionar ruidosamente.

Solo entonces Abigail se volvió para mirar a Brandon Piers. —¿Por qué no te escondes? —preguntó.

Brandon le lanzó una mirada gélida, abrió la puerta y salió.

Kelly, que estaba tocando a la puerta, tartamudeó:

—S-Señor?

Ella pensó que estaba viendo cosas.

Brandon asintió ligeramente, caminando hacia su habitación con un rostro inexpresivo.

Kelly miró hacia atrás a su figura que se alejaba, luego a Abigail sosteniendo al bebé. —¿Por qué está aquí?

—Para ver al bebé, supongo —respondió Abigail.

—Pero ¿la puerta? ¿Por qué estaba cerrada con llave? —se preguntó Kelly.

Abigail parecía confundida. —¿Está rota?

—No creo —Kelly intentó con una llave. Porque el bebé estaba dentro, Kelly había mantenido una llave consigo para evitar tocar fuerte en la noche.

—Alimenta al bebé primero —instó Abigail.