La recuperación postoperatoria de Lincoln Green fue aceptable. Sin embargo, aún necesitaría medicación a largo plazo para su enfermedad coronaria. Lo mismo ocurría con su trombosis cerebral, ambas siendo condiciones crónicas.
Cuando Abigail Green llegó al hospital, Lincoln acababa de terminar un chequeo. Al verla, se llenó de sorpresa. —¿Abigail, estás aquí?
—Sí. —Abigail miró al mucho más envejecido Lincoln, asintiendo ligeramente—. He hablado con el médico sobre tu condición. No hay mucha necesidad de que te quedes en el hospital. Haré que alguien se ocupe de los trámites de tu alta en un rato. Puedes recuperarte en casa o ir a una instalación de convalecencia más tranquila. ¿Qué planeas hacer?
—Yo... —Lincoln estaba momentáneamente perdido, sin saber qué hacer. Tras una larga pausa, preguntó ronco—, ¿y tú? ¿Te vas de Ciudad Gills?