Qin Sheng y Lu Ming tenían una considerable experiencia en infiltrarse en computadores, y hábilmente evadieron las alarmas establecidas por el Grupo Longfei.
Esta vez, el diseño del sistema protector era evidentemente superior al anterior, lo que lo hacía significativamente más difícil de penetrar.
Lu Ming había hecho realmente un progreso sustancial esta vez.
A pesar de la dificultad incrementada, la velocidad de Lu Ming superaba la de su intento anterior. Qin Sheng levantó una ceja, deliberadamente ralentizando su ritmo.
Recostada en su silla, sus dedos danzaban sobre el teclado, su expresión revelaba cierta despreocupación.
El logo de QS mantenía consistentemente una distancia paralela a la línea defensiva de Lu Ming.
Al ver a QS detrás, Lu Ming no pudo evitar sonreír con orgullo. —¿Cómo se atrevían a desafiar su destreza?
Estaba determinado a triunfar sobre QS esta vez. Sin embargo, Lu Ming permanecía vigilante.