Capítulo 124

Alfa Derrick estaba sentado junto a la cama del hospital, su mirada fija en la figura inmóvil de Alfa Darwin.

El ritmo constante del monitor cardíaco llenaba el aire, estable e inalterable, como la condición del hombre.

Alfa Darwin había sido una figura poderosa, y verlo en un estado tan vulnerable casi hacía sentir su existencia inútil para Derrick. Pero sus pensamientos estaban lejos de ser sentimentales.

—Necesito asegurarme de que Mona esté controlada —murmuró Derrick en voz baja, su tono bajo y calculador.

—No puede permitirse distraerse con su constante búsqueda sobre quién es Kimberly. Esta es mi oportunidad de manejar las cosas como deben ser manejadas.

Se levantó bruscamente, sus botas resonando con fuerza contra el suelo de baldosas mientras caminaba hacia la ventana.

El sol de la ciudad brilla vívidamente en la distancia y en todas partes, proyectando una luz más brillante a través de la habitación.