Capítulo 237 - Domesticando el Desencanto - (Final 2 / 2)

Fragmentos de tejido abisal esparcidos por toda la cámara. Tres segmentos completos fueron completamente destruidos. Los otros 15 restantes, ahora sin cabeza, colapsaron con un ruido sordo. Pero la monstruosidad estaba lejos de ser derrotada. Ante los ojos horrorizados de Han, la bestia comenzó a reorganizarse una vez más. Lo que quedaba de sus veinte segmentos originales, tras perder cinco en la batalla, comenzó a reestructurarse. El último segmento al frente empezó a hincharse y transformarse, membranas translúcidas se estiraban mientras se formaba una nueva estructura: una boca grotesca con filas de dientes triangulares dispuestos en anillos concéntricos. Todos los segmentos restantes comenzaron a funcionar en coordinación nuevamente, como centros de control independientes formando un organismo colectivo, cada uno capaz de dirigir el todo. La abominación no era una criatura con múltiples órganos vitales; eran múltiples criaturas fusionadas en una sola conciencia modular.