Capítulo 277 - Semana de Batalla del Domador - 15

—¡Garra Fantasma! —alguien gritó desde las gradas.

El impacto desencadenó una reacción en cadena. Las grietas se expandieron, y el veneno, ahora más ampliamente distribuido por el interior del Merodeador de Piedra, intensificó su efecto.

Fragmentos de roca comenzaron a desprenderse ya que la integridad estructural del monstruo se comprometió irreversiblemente. La superficie de piedra se oscureció donde el veneno hizo contacto, extendiéndose como una red de venas negras a través de las grietas.

Sin permitir que el ímpetu se perdiera, el equipo ejecutó una segunda oleada de ataques. El rinoceronte cargó de nuevo, esta vez desde un ángulo diferente, su cuerno-taladro penetrando aún más profundo. La cobra disparó una nueva carga de veneno, apuntando precisamente a las zonas debilitadas.

Y Klein, sin romper la parálisis que mantenía indefenso al Merodeador de Piedra, lanzó más Garras Fantasma, cada una golpeando puntos críticos en la estructura del monstruo.