A estas alturas, si el chico todavía no podía entenderlo, no tenía a nadie más a quien culpar que a sí mismo.
Toda la identidad de Rowan…
Logan entrecerró los ojos. No era que no pudiera decírselo, pero hacerlo abriría una caja de Pandora.
Una razón era evitar causarle problemas a Selina.
La otra... era que la investigación aún no estaba completa. Cuantas menos personas conocieran la verdadera identidad de Rowan, mejor.
Aun así, no faltaba mucho.
Una pista sutil no haría daño—mejor que dejarla completamente desprevenida después.
Selina parpadeó, y de repente jadeó cuando una revelación la golpeó.
—Tú...
Logan levantó una ceja. ¿Lo había descubierto?
Selina dijo con firmeza:
—¡Descubriste que el concurso de diseño estaba podrido por dentro y lo usaste a tu favor!
Cuanto más lo pensaba, más sentido tenía.