capitulo 3

LUNA – Capítulo 3: La Tercera Silla 

La llave del Hotel Ludlow pesaba como un pecado en el bolsillo de Nathaly. Mientras revisaba las notas de su próxima paciente —Valeria, una bailarina con tendencias autodestructivas—, el eco de las palabras de Emma seguía ahí: "Quería ver cuánto tardabas en romper".

El consultorio olía a jazmín hoy. Nathaly no había quemado incienso.

La Bailarina Rota (Un reflejo incómodo)

Valeria llegó tarde, moviéndose como si sus articulaciones estuvieran hechas de cristal.

—Me último cuando bailo —confesó, mostrando moretones en los tobillos—. Pero el dolor... me hace sentir real.

Nathaly observó las marcas. Algo en ellas le recordó a las fotos que Emma guardaba en su cajón secreto: imágenes de ella misma en la universidad, brazos vendados después de una crisis. ¿Por qué Emma las conservaba? ¿Como advertencia?

—Alguien más sabe que haces esto? —preguntó Nathaly, aunque ya sabía la respuesta.

Valeria sonriendo, sacando un teléfono. La pantalla mostró un mensaje de @EWatsonLegal:

"El dolor es solo un recordatorio de que elegimos mal. Busca a la doctora Narváez. Ella entiende."

Nathaly presionó la pluma hasta que la tinta manchó su dedo.

Suite 214: El Jardín de las Delicias Prohibidas

El Ludlow olía a cuero viejo y whisky. Diana la esperaba frente a la ventana, con un vestido que dejaba ver la cicatriz en su clavícula: una línea fina, como un hilo de sangre seca.

—Emma te describió exactamente —dijo Diana, sirviendo dos copas—. Adicta a los secretos, pero mala guardándolos.

—¿Por qué me mandaste llamar? —Nathaly no tocó el vino.

Diana deslizó una carpeta hacia ella. Dentro: fotos de Emma en la suite, con otra mujer. Pero no eran recientes. Eran de hace diez años. La otra mujer... era Valeria.

—Tu esposa tiene un tipo —susurró Diana—. Frágil, quebradizo, fácil de moldear. Como tú. Como yo.

Nathaly sintió que el piso se inclinaba.

El Juego de las Sesiones Perdidas

Esa noche, Nathaly hackeó el correo de Emma. Entre cientos de mails legales, encontró uno sin enviar, dirigido a Dr. Levin (su antiguo terapeuta):

"Nathaly está repitiendo a mis patrones. ¿Es esto transferencia o solo venganza?"

La pantalla brilló con una notificación: Clara había publicado una historia. Un video de Emma en un café, hablando con... Daniel, el esposo de Sofía.

La silla de Nathaly crujió al levantarse.

Cliffhanger: La Verdad en el Espejo

En el baño, Nathaly se lavó las manos hasta que la piel ardía. Al levantar la vista, el espejo mostraba a Luna tras ella, susurrando:

—¿Ahora entiendes? Nunca fuiste al terapeuta. Siempre fuiste la paciente.

Detrás de la puerta, oirá el sonido de unas llaves. Emma había regresado.