El aire fresco del pre-amanecer, a pesar de estar cargado con los contaminantes habituales de Neo-Veridia, fue como un bálsamo para los pulmones de Kaelen después de horas respirando el miasma de las alcantarillas. Se tomó un momento junto al pilón de hormigón, simplemente respirando, dejando que sus sentidos se reajustaran al mundo exterior. El hedor de las profundidades todavía se aferraba a su ropa y a su piel, un recordatorio fantasmal del infierno que acababa de atravesar.
Había recuperado los datos para Oráculo. Un archivo encriptado que supuestamente contenía registros de logística de una corporación muerta hacía mucho tiempo, extraídos de un mainframe moribundo en el corazón de la Zona Roja. Había costado caro: casi todos sus créditos iniciales, horas de tensión extrema, encuentros con criaturas de pesadilla y un riesgo constante de muerte. Pero lo había logrado. Ahora solo tenía que volver al Templo de Datos Caído en el Sector Gamma y cobrar su recompensa.
El viaje de regreso a través del Sector Delta no sería menos peligroso que la ida. Aunque ahora conocía un poco mejor el terreno, el amanecer traería consigo diferentes tipos de actividad: patrullas corporativas cambiando de turno, pandillas comenzando sus operaciones diurnas, carroñeros saliendo a buscar presas fáciles después de la noche. Y él apestaba a alcantarilla y desesperación, lo que probablemente lo convertiría en un objetivo aún más visible.
Comió la última mitad de su ración nutritiva, saboreando cada bocado insípido, y bebió otro sorbo de agua purificada. No era suficiente para reponer sus reservas, pero tendría que bastar. Con 7 PS, no podía permitirse comprar nada más, incluso si encontrara un vendedor dispuesto a tratar con alguien en su estado.
Comenzó a moverse, siguiendo una ruta ligeramente diferente a la de ida, manteniéndose aún más pegado a las sombras y a los niveles inferiores de las estructuras abandonadas. El cielo pasaba lentamente de un gris pálido a un rosa sucio a medida que la luz artificial que simulaba el día en Neo-Veridia comenzaba a intensificarse. Los sonidos de la ciudad cambiaban: menos disparos esporádicos, más ruido de tráfico pesado en las avenidas principales, el zumbido de sistemas de ventilación industriales arrancando.
Su Percepción P7/D2 estaba afinada al máximo. Detectó una patrulla de seguridad privada de OmniCorp –reconocible por sus uniformes negros y plateados y sus rifles de pulso estándar– acosando a un grupo de ocupas en un edificio cercano y se desvió rápidamente para evitar cualquier contacto. Más tarde, vio a miembros de los Perros de Cromo marcando un nuevo territorio con pintura en spray roja brillante en una pared, ignorándolos mientras pasaba sigilosamente por un callejón paralelo.
El cansancio comenzaba a ser un enemigo tan peligroso como cualquier pandillero o dron. Sus músculos protestaban, sus párpados pesaban, y la falta de sueño y la tensión constante embotaban ligeramente sus reflejos. Sabía que estaba cometiendo pequeños errores: un paso un poco más ruidoso de lo debido, una vacilación al elegir una ruta. Su Resistencia R9 lo mantenía en pie, pero la fatiga mental era insidiosa.
Mientras cruzaba una plaza abandonada llena de estatuas corporativas rotas, su Sistema le ofreció una Misión Diaria.
[Sistema: Misión Diaria Disponible - Travesía Discreta (D)]
[Objetivo: Cruzar la Plaza de los Titanes Caídos sin alertar a patrullas de carroñeros cercanos (detectados 2 grupos).]
[Recompensa: +3 PS]
[¿Aceptar? S/N]
Tres Puntos de Sistema. Era poco, pero elevaría su total a 10, un número ligeramente menos desesperado que 7. Y de todos modos, tenía que cruzar la plaza discretamente. Aceptó.
Usó las estatuas rotas y los vehículos quemados como cobertura, moviéndose lentamente, observando a los dos pequeños grupos de carroñeros que estaban registrando los escombros en los bordes opuestos de la plaza. Parecían más interesados en encontrar chatarra valiosa que en buscar problemas, pero Kaelen no se confió. Se deslizó de sombra en sombra, conteniendo la respiración cuando uno de los carroñeros levantó la vista en su dirección, pero el hombre simplemente escupió en el suelo y volvió a su tarea.
Logró cruzar la plaza sin incidentes y se deslizó en un callejón al otro lado.
[Sistema: Misión Diaria Completada - Travesía Discreta (D). Recompensa: +3 PS.]
[PS: 7 -> 10]
Diez PS. Un pequeño alivio. Quizás suficiente para un estimulante básico si las cosas se ponían realmente feas.
Finalmente, después de otras dos horas de viaje tenso y agotador, cruzó de nuevo la frontera invisible hacia el Sector Gamma. El aire se volvió más denso, más cargado de olores humanos y de comida callejera. El ruido ambiental aumentó. Estaba de vuelta en un territorio ligeramente más familiar, aunque no necesariamente más seguro.
Se dirigió directamente hacia el Laberinto Nocturno y el Templo de Datos Caído. El viaje a través de las calles atestadas de Gamma fue casi tan estresante como el paso por Delta, pero de una manera diferente; aquí el peligro era la multitud impredecible, los carteristas, las disputas repentinas que podían convertirse en violencia colectiva.
Llegó a la plaza oscura frente al Templo de Datos. Las mismas figuras sombrías merodeaban cerca de la entrada. Kaelen las ignoró y entró, dirigiéndose directamente hacia la escalera de caracol que descendía a la guarida de Oráculo.
Bajó las escaleras y llegó de nuevo a la puerta de acero reforzado con el símbolo del ojo en el triángulo. Presionó el botón del intercomunicador.
Silencio. Luego, la voz distorsionada.
[Voz Distorsionada: Has vuelto. Inusualmente rápido. O eres competente, o estúpidamente afortunado. O fallaste miserablemente. ¿Tienes los datos?]
"Los tengo", respondió Kaelen, su voz ronca por la fatiga y el aire tóxico. "Almacenados en mi interfaz neural, como solicitaste".
[Voz Distorsionada: Procedimiento estándar. Acércate al escáner. Inicia transferencia segura usando el protocolo de encriptación Oráculo-7 que te fue proporcionado. Cualquier intento de manipulación o copia será... desagradable.]
Kaelen se acercó al escáner óptico. Activó la función de transferencia de datos de su Sistema, seleccionó el archivo [ORACLE_REQ_774] y aplicó el protocolo de encriptación especificado. Enfocó su interfaz neural hacia el escáner y inició la transmisión.
La luz roja del escáner brilló intensamente mientras los datos se transferían. Duró apenas unos segundos.
[Voz Distorsionada: Transferencia recibida. Verificando integridad y contenido...] Hubo una pausa de varios segundos, durante la cual Kaelen pudo oír el leve zumbido de potentes procesadores trabajando detrás de la puerta. [...Datos verificados. Fragmentarios, como se esperaba, pero contienen los nodos logísticos clave. Aceptable.]
[Voz Distorsionada: Has cumplido tu parte del trato, viajero de Kratos. Sorprendente. La recompensa: 100 créditos estándar serán transferidos a tu cuenta neural vinculada (si tienes una) o disponibles para recogida física. Y un fragmento de información sobre las operaciones de Kaito, como se prometió. ¿Tu elección?]
Cien créditos. Era una suma decente en los niveles inferiores, suficiente para conseguir equipo básico, comida real, quizás incluso un lugar ligeramente mejor para esconderse. Pero la información era más importante. "¿Las ubicaciones?", preguntó Kaelen. "Dijiste que tenías información sobre dónde opera Kaito o la Subdivisión Siete".
[Voz Distorsionada: Correcto. Poseo tres fragmentos de información verificada sobre posibles ubicaciones o rutas de Kaito/Quimera. Solo obtienes uno. Elige sabiamente tu pregunta:]
Aparecieron tres opciones en su HUD interno, proyectadas desde el sistema de Oráculo:
Ubicación Sospechosa - Nivel Inferior: Coordenadas de un complejo médico abandonado en el Sector Épsilon (aún más profundo y peligroso que Gamma) donde se ha detectado actividad anómala de personal con equipo avanzado y transporte de contenedores criogénicos. (Probabilidad de conexión con Kaito: Media-Alta).Ruta de Transporte Seguro: Patrones y horarios de un transporte médico blindado sin marcar que realiza rutas nocturnas entre un hospital corporativo en los niveles medios y una instalación desconocida en los muelles industriales del sur. Se sospecha transporte de especímenes. (Probabilidad de conexión con Kaito: Media).Procesamiento de Datos - Sector Ómicron: Información sobre un nodo de procesamiento de datos supuestamente seguro en el Sector Ómicron (un distrito tecnológico de alto nivel) que ha mostrado tráfico encriptado anómalo vinculado a firmas energéticas asociadas con experimentos Quimera. (Probabilidad de conexión con Kaito: Media-Baja, pero potencialmente acceso a más datos).
Kaelen analizó las opciones rápidamente. El transporte blindado era una posibilidad, pero interceptarlo sería extremadamente difícil y peligroso. El nodo de datos en Ómicron era interesante, pero menos directo y en un sector de alta seguridad. El complejo médico abandonado en el Sector Épsilon sonaba como el lugar más probable para encontrar actividad relacionada con experimentos bio-genéticos, quizás incluso donde podrían retener a Lena. Era profundo, peligroso, pero parecía la pista más concreta.
"Elijo la opción uno", dijo Kaelen. "La ubicación en el Sector Épsilon".
[Voz Distorsionada: Sabia elección... o quizás no. Transferencia de datos de ubicación y análisis de actividad reciente en curso...] Recibió un paquete de datos encriptado con coordenadas, planos básicos del complejo médico (obtenidos de archivos públicos antiguos) y notas sobre la actividad sospechosa observada. [...Transferencia completa. Los 100 créditos han sido marcados para recogida física en el dispensador junto a la puerta. Nuestro negocio ha concluido. No vuelvas a menos que tengas algo de valor comparable... o una cantidad obscena de créditos. La puerta se cerrará en diez segundos.]
La puerta de acero comenzó a deslizarse para cerrarse. Kaelen se apresuró a un pequeño dispensador en la pared que no había notado antes, del cual salió una tarjeta de crédito anónima y desechable cargada con los 100 créditos. La agarró justo antes de que la puerta se cerrara con un golpe metálico final.
Estaba de vuelta en el pasillo subterráneo, solo, agotado, pero con recursos y una pista concreta. Cien créditos. Coordenadas en el Sector Épsilon. Era un comienzo. Un comienzo peligroso y desalentador, pero un comienzo al fin en su búsqueda de Lena.