El viaje transcurrió sin problemas, y solo hicieron algunas paradas en el camino para permitir que Rayne reemplazara el SUV por uno que tuviera el tanque de gasolina lleno.
Las carreteras también eran mucho más fáciles de conducir ya que la mayor parte de la nieve ya se había derretido.
Para cuando llegaron al pueblo, ya era media tarde, y el sol brillaba con toda su fuerza.
Rayne frunció el ceño. —Me pregunto qué cambios veremos con el sol comportándose como lo está haciendo. Ha estado saliendo cada vez más temprano, sin mencionar lo caluroso que se pone por las tardes.
La nieve se había derretido recientemente, pero ya se sentía como el pico del verano durante el día.
Julian encendió el aire acondicionado. —Sí, definitivamente es extraño. Al menos es un buen momento para visitar la playa. Me pregunto si el agua seguirá estando muy fría.
Rayne estalló en carcajadas, haciendo que Julian la mirara confundido.