encerrada

Punto de vista de Olivia

—¿Qué es todo esto? —pregunté, con la voz temblando de confusión y dolor—. Esta noche era nuestra noche de bodas. No esperaba que me tocaran —ni siquiera lo deseaba— pero tampoco esperaba que ella estuviera aquí.

Desvié la mirada entre los trillizos, esperando una respuesta, algún tipo de explicación, pero ninguno me dirigió la mirada. En cambio, todos centraron su atención en Anita como si yo no existiera.

Lennox selló sus labios sobre los de ella en un beso profundo y apasionado. Levi alcanzó el cierre de su vestido, quitándoselo lentamente. Louis trazaba besos por su cuello, bajando hasta su clavícula, sus manos vagando libremente.

Mi loba aulló de dolor pero también de ira.

Mis labios se separaron, pero no salieron palabras. Me quedé congelada, aturdida, herida y con el corazón roto mientras veía a Anita gemir suavemente en el beso que compartía con Lennox. Levi ya la había desnudado, y Louis se había posicionado entre sus muslos.