La verdadera historia de fondo

—¿Puedo hacerte una pregunta? Puedes decirme si no te sientes cómoda hablando de ello —preguntó Audrey mientras se acomodó en la cama.

—No, estoy lista para hablar de todo, querida. Te lo contaré todo —respondió Isabella.

—No tienes que forzarte, Isa... esperaremos a que estés lista —dijo Miranda.

—No, ella merece saberlo; tú también mereces saberlo —replicó Isabella.

Audrey suspiró, colocando su mano sobre la mano de su madre.

—Malachi es tu padre, Audrey. Pero nunca quise que fuera así —habló Isabella en voz baja.

—Lo sé, madre —dijo Audrey soltando una risa amarga.

—No sé si lo has oído, pero la noticia de cómo maté a mi pareja circulaba por la Manada hace años, y es la razón por la que fui desterrada de la manada —les contó Isabella, recostándose en la cama elevada.