Palas y secretos

"Quiero vivir 100,000 años"

Capítulo 2: Palas y secretos

—Tranquilos, los llevaré a la secta, allí... podrán vivir bien —murmuró mientras levantaba a los bebés del suelo.

Ahora que lo pienso, no es como los otros huérfanos que hemos acogido. Una persona normal no podría subir esta montaña, menos en este clima.

—¿Q-qué es eso?

Estaba tan concentrado en los bebés que no me di cuenta. Justo cerca yacían 2 cuerpos sin vida y sangre por todos lados.

—¿E-eso es una cabeza?

Es muy extraño que hayan muerto cerca de aquí... ¿tendrá algo que ver con los bebés? En fin, no es momento de pensar en esas cosas.

¿Dónde estoy? ¿me están levantando?

—Qué adorable eres, Han Yun.

¿Mi nombre es Han Yun? Bueno, luego de estar atrapado por este oso no puedo protestar.

—Tú también, Hyeon.

Compañero, ¿estabas aquí? Así que te llamas Hyeon.

Pero, ¿qué es este lugar?

Han Yun se volteó de lado a lado mientras miraba la habitación y pensó.

Espadas, habitación antigua, por el estilo de construcción diría que es china, y creo que el hombre extraño que me abandonó me llamaba "señor".

¿Estaré en una de esas novelas murim que leía?

La puerta crujió al abrirse.

—¿Quién es?

Se reveló la figura de un anciano con cabello blanco.

—Baek Ho, ¿estás ahí?

—L-líder de secta, perdóneme. Baek Ho saluda al líder de secta —dijo mientras bajaba a los bebés.

¿Ese anciano es el líder de secta?

—Más importante aún, ¿y los bebés?

Baek Ho respondió con expresión sonriente.

—Había algo escrito en el lugar en el que los dejaron, ¡el de cabello oscuro es Han Yun y el del cabello dorado es Hyeon!

—….

—Me refería a su salud.

—Ah, lo siento, líder de secta. Están bien, aunque habrá que alimentarlos.

El anciano soltó un suspiro de alivio.

—Sobre su situación, dijiste que viste algo extraño, ¿cierto?

—S-sí, 2 cuerpos muertos yacían cerca de allí.

El anciano de pelo blanco se agarró la barba mientras murmuraba.

—Ya veo… Podría ser. Cabello dorado, aunque eso no explica al otro niño.

—Wah, wah, wah.

—Se despertó.

Estos bebés, de todos modos ya están aquí, solo espero estar haciendo lo correcto…

—Ya me voy, Baek Ho trae a alguien para que los alimente.

Baek Ho se arrodilló y exclamó.

—Baek Ho se despide del líder de secta.

Suspiró Baek Ho mientras se levantaba.

—Saldré a buscar una criada que los alimente. Ustedes dos, quédense aquí un momento.

Al fin un momento a solas.

Ahora me pregunto, ¿qué car*jos fue eso?

¿Qué tienen que ver nuestros cabellos? ¿El hombre extraño y la mujer misteriosa murieron? ¿Qué pasará con nosotros?

Al menos puedo confiar en mi fiel compañero.

—Aioiu.

¿Cierto?...

—¿Aioiu?

Mientras tanto en otro lugar ese mismo día.

****

—¿Aquí está el lugar?

—Sí, líder de secta, aquí es dónde encontré los cuerpos.

Se escuchó el rugido del viento en aquella noche silenciosa.

—Esto es malo.

La expresión de Baek Ho se volvió sombría y preguntó.

—¿Tanto?...

Respondió el líder de secta mientras lentamente ponía su mano en la empuñadura fría de la espada.

—Lo mejor para la secta sería matarte justo ahora y culparte de todo.

….

En ese momento, todo se detuvo para Baek Ho, el sonido del viento, animales y hasta su propia respiración.

Sus ojos, me dan escalofríos, nunca pensé que su actitud tranquila y serena pudieran volverse tan aterradoras.

Baek Ho tragó saliva en seco.

—Líder de secta, no entiendo mucho, p-pero sí es lo mejor para la secta estoy dispuesto a…

Interrumpió el líder de secta.

—Era una broma, jajaja.

Los hombros temblorosos de Baek Ho cayeron mientras gritaba internamente.

¡Líder de secta, no me hagas esas bromas!

—Sí esto se sabe, probablemente no bastaría con tú muerte, sería el fin de toda la secta.

Baek Ho sintió un escalofrío recorrer su espalda.

—¿De quiénes son estos cuerpos que son capaces de provocar tal cos…?

—¡Aaargh!

—No preguntes cosas que no deberías saber y trae una, no, dos palas.

Murmuraba Baek Ho mientras se agarraba la cabeza.

—Entiendo que no me quiera decir, pero ya no soy un niño pequeño al que deban pegar…

—¿Dijiste algo, Baek Ho?

—N-no…