Capítulo 36 — La Aberración Despierta.

🌑 El despertar de la oscuridad

El aire a su alrededor es pesado, denso, como si el mismo espacio estuviera **cargando** una presión invisible. Caelan y Naelrin avanzan cautelosamente entre las ruinas de lo que una vez fue la gloriosa ciudad de Vireldar. Todo está **cubierto por una capa de polvo negro**; las paredes están decoradas con **símbolos de fuego**, pero la **magia** que antes brillaba en sus centros de poder está apagada, **corrompida**.

> **Naelrin**: —Esto… no está bien. La ciudad **no debe existir**. No fue simplemente olvidada, fue **eliminada** de la realidad. ¿Por qué está aquí? ¿Por qué ahora?

De repente, un sonido sordo, **como una vibración profunda**, recorre el suelo bajo sus pies. **La aberración** se ha **despertado**. Una sombra malformada que se arrastra, moviéndose como si **no estuviera completamente en el plano material**, la cual avanza con una presencia espantosa. No tiene forma definida, pero el aire **se distorsiona** a su alrededor, como si el espacio mismo fuera alterado por su presencia.

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### ⚡ El primer encuentro

Caelan siente un estremecimiento en su interior. **Su poder crece**, pero algo **le quema** por dentro, como si estuviera siendo arrastrado por el **vacío** de donde la aberración proviene. El suelo se agrieta bajo él, **las llamas azules de su guantelete chisporrotean**, y un **grito de guerra** escapa de sus labios.

> **Caelan**: —¡Aguanta! ¡No voy a dejar que nos destruyan otra vez!

Con una **explosión de fuego**, Caelan lanza una llamarada hacia la sombra que se mueve hacia ellos. La criatura **se desintegra momentáneamente en humo**, pero rápidamente se recompone. Un siseo **espeluznante** llena el aire.

> **Aberración**: —No puedes escapar de lo que eres, Caelan. **El ciclo ya comenzó**.

Naelrin observa aterrada. **Su bestia guardiana** parece desaparecer a su alrededor, consumida por el **vacío** que está en expansión.

> **Naelrin**: —¡No es solo la ciudad! ¡Es todo lo que fuiste! ¡Todo lo que destruiste! ¡El ciclo comienza de nuevo!

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### 🕯️ La batalla de los recuerdos

La aberración no es simplemente una criatura; es **un fragmento** de lo que Caelan una vez fue, una parte de su alma, ahora **desfigurada** y atrapada en las ruinas. Mientras lucha, los **recuerdos del pasado** comienzan a invadir su mente.

> **Recuerdos de Caelan**: —Lideré Vireldar. Luché junto a mis hermanos en armas. Pero en la última batalla, la ciudad… se desintegró. **Yo los maté**. ¡Yo mismo los destruí!

Caelan cae de rodillas por un momento, casi **perdiéndose en su propio recuerdo**. La aberración, viendo su debilidad, se acerca rápidamente. La sombra se disuelve en vapor, rodeándolo con un susurro.

> **Aberración**: —¿De verdad crees que puedes escapar de lo que eres? ¡El Fénix **nunca se apaga**!

Naelrin no tiene tiempo de reaccionar antes de que **las cadenas de maná** que la aberración arrastra toquen el suelo, enviando un pulso de **oscuridad pura** que hace que todo a su alrededor **se distorsione**.

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### 🔥 La resistencia del Fénix

Caelan, de repente, se llena de **fuerza nueva**. Algo dentro de él despierta, algo **más grande que su culpa**. **El Fénix** dentro de él, su poder sellado, **despierta por completo**. El fuego y la luz lo envuelven, pero no es el mismo poder descontrolado que lo ha definido en el pasado. Es **más controlado**, más… **definitivo**.

> **Caelan**: —¡No soy lo que fuiste! ¡Soy lo que elegiré ser!

Con un grito **rompe las cadenas** que lo atan a su propia desesperación. Con un gesto de su mano, **el fuego explota** en todas direcciones, chocando contra la aberración y formando una barrera de **energía pura** que lo mantiene a raya. La aberración se disuelve, pero sigue **intentando reconectarse con su forma**.

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### 🌑 El sacrificio

Mientras la batalla continúa, Caelan se da cuenta de algo crucial: la **aberración no es solo un enemigo**, es una manifestación de **su propio ser**. Para derrotarla, debe aceptar lo que fue y usarlo para sellarla de nuevo.

> **Caelan**: —No te destruiré, pero te **contendré**.

Con un grito final, **Caelan cierra los ojos**, concentrando todo el poder del Fénix en su interior, y **la barrera de fuego** se **apaga completamente**, sumiendo el espacio en total oscuridad.

Pero entonces, una **luz cegadora** surge desde dentro de Caelan, una explosión de **luz blanca** que envuelve la aberración, **sellándola una vez más** en el tiempo. La ciudad parece **respirar**, y el **vacío se retira**, dejando solo ruinas a su alrededor.

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### 🖤 La última sombra

Antes de que la luz desaparezca, Caelan ve una **figura** en las sombras de las ruinas: una mujer, vestida con un **manto oscuro**, observando sin moverse.

> **Mujer desconocida**: —¿Te atreves a pelear contra lo que **fuiste**? El **vacío no termina** con tu sacrificio. Caelan… Tú **serás nuestra liberación**.

La mujer **desaparece en la oscuridad** mientras el aire vuelve a la calma.

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**FIN DEL CAPÍTULO 36 — La Aberración Despierta**