Para cuando su baile llegó a su fin, Melanie estaba sin aliento, su pecho subiendo y bajando con cada inhalación entrecortada. Su piel estaba resbaladiza por el sudor, su cuerpo aún vibrando por la intensidad del momento. No tenía idea de cuánto tiempo habían estado bailando, pero era demasiado... Aunque todo había sido decente y los movimientos solo habían sido sugestivos, se había sentido como una voyeur y una exhibicionista... Se sentía exaltada y eufórica.