Ana Borracha

—¿Cómo lo planeaste? —Agustín arqueó una ceja, tanto intrigado como ligeramente divertido.

Había entrado apresuradamente, pensando que ella había caído directamente en la trampa de Denis, que había estado en verdadero peligro. Pero en realidad, ella había utilizado toda la situación con precisión para liberarse del control de Denis.

Una lenta sonrisa burlona tiró de la comisura de sus labios. «Es más capaz de lo que pensaba», reflexionó.

—Denis quería quebrarme —continuó Ana con una mezcla de triunfo y desafío—. Pero me aseguré de que lo pagara. —Una sonrisa traviesa se extendió por sus labios mientras inclinaba la cabeza hacia Agustín—. Al final, yo gané. Hice sufrir a quienes me hicieron daño.

Agustín fijó su mirada en ella, con su curiosidad despertada.

—¿Qué más hiciste?

Ella parpadeó, su visión ligeramente borrosa mientras el alcohol la hacía sentir ligera y sin cargas. Una amplia sonrisa se extendió por su rostro al recordar la caída de Becca.