Mi corazón se aceleró mientras miraba el mensaje en el teléfono de Marion. No podía descifrarlo.
Era como si las palabras bailaran ante mis ojos, burlándose de mí con su significado oculto. Releí el mensaje de nuevo, como si hacerlo mágicamente le diera sentido a todo. Pero el mensaje seguía siendo difícil de entender.
No podía quitarme la sensación de temor que me recorría la espalda. Durante el tiempo que he estado aquí, Marion siempre ha sido tan abierto y honesto conmigo.
¿Por qué me ocultaría algo así? ¿Era algo malo? ¿Estaba en peligro? Las preguntas daban vueltas en mi mente mientras luchaba por entender esto.
Cuando Marion finalmente atravesó la puerta del baño, no perdí tiempo en hacer preguntas.
—Marion, necesito que me expliques algo —comencé con voz firme, aunque mis manos temblaban—. Encontré un mensaje extraño en tu teléfono, y quiero saber qué significa.
No sabía de dónde venía esta confianza, pero estaba tan segura de que él no me dejaría fuera.