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¡Finalmente había llegado el día del concierto de Wei Moran!
Temprano en la mañana, todo el círculo mediático de Tiannan estaba bullicioso, comenzando a inundar las pantallas.
Noticias sobre Wei Moran, el concierto y la inauguración de la Plaza Xiangdong cubrían el cielo.
En las esquinas de las calles y callejones, los jóvenes que amaban dormir hasta tarde se levantaron inusualmente temprano para desayunar y discutir con entusiasmo.
Muchos incluso habían pedido el día libre; aunque no pudieran entrar al recinto, estaban dispuestos a escuchar desde fuera del área del proyecto.
Incluso los ancianos que hacían sus ejercicios matutinos se preguntaban entre sí sobre el evento.
Aunque todavía faltaban dos o tres horas para la apertura del proyecto, la entrada de la Plaza Xiangdong ya estaba repleta de gente, un mar de cabezas congregándose en gran número.