Song Ning estaba sospechosa y preguntó:
—¿Qué quieres con mi abuelo?
Yin Laojiu declaró con franqueza:
—En este Mundo Marcial de Yuncheng, el Señor Song es Yama, el juez de la vida y la muerte. Es su palabra la que sella el destino de uno. Necesito escuchar si su familia quiere que muera o viva. Pediría la indulgencia de la Abuela y el Abuelo en este asunto.
Zhou Yang discernió la intención de Yin Laojiu.
Estaba planeando usar las antigüedades como amenaza, decidiendo que si no se aceptaba su petición, preferiría morir antes que revelar la respuesta.
Habiendo estado inmerso en el Mundo Marcial de Yuncheng durante décadas, este anciano se había convertido en un viejo zorro profundamente perspicaz. Los poderosos habían ido y venido, pero él se mantenía firme como un sauce, y no sin razón.
—Déjalo hacer la llamada —sugirió Zhou Yang.