El punto de vista de Hazel
La extraña tensión por la reacción de Evelyn flotaba en el aire. No podía quitarme la sensación de que estaba ocultando algo. Estaba sentada perfectamente quieta, su elegante postura no revelaba nada, pero sus ojos... parecían preocupados.
—¿Evelyn? ¿Está todo bien? —pregunté con cautela.
Dejó su copa de vino con un pequeño tintineo.
—Creo que es hora de que te cuente más sobre Liam Sterling.
Chloe se animó al instante, inclinándose hacia adelante.
—Oh, soy toda oídos para esto.
Evelyn sonrió con tristeza.
—La mayoría de las personas solo ven al poderoso CEO, al jefe exigente. Pero el hombre que he conocido desde que era un niño es mucho más complejo.
—¿Cuánto tiempo has trabajado para la familia Sterling? —pregunté.
—Casi treinta años. Comencé a trabajar para el padre de Liam cuando Liam tenía solo cinco años. —Sus ojos se suavizaron con el recuerdo—. Un niño tan serio, siempre siguiendo a su padre con un maletín de juguete.