Horario de Clases

(POV de Leo, Dormitorio Estudiantil 22C)

Leo sintió un dolor agudo y desgarrador pulsando a través de su palma en el momento en que Su Yang se fue, pero se negó a reconocerlo hasta que estuvo a salvo detrás de la puerta cerrada de su dormitorio.

Clic.

En el segundo en que la puerta se cerró tras él, dejó escapar un suspiro cortante, sacudiendo violentamente su mano para restaurar el flujo sanguíneo.

—Hijo de puta —siseó en voz baja, flexionando sus dedos mientras punzadas de dolor los atravesaban.

—¡El cabrón hizo esto a propósito! —maldijo Leo, mientras su palma palpitaba con un dolor sordo y ardiente, los moretones ya formándose donde el agarre monstruoso de Su Yang había aplastado sus capilares.

Apretando la mandíbula, mordió el costado de su palma y sopló aire caliente sobre la piel para aliviar el dolor persistente.

«¿Qué demonios fue todo eso?»