Después de aquel suceso existencial o como gustes llamarle me levanté y camine bajo la lluvia con algo de hambre.
— Rayos debí haber comido en la escuela ahora tengo mucha hambre espero encontrar un lugar para comer cerca ahora que lo pienso hay un buen lugar de hamburguesas cerca iré a ver.
Me dirigí alegremente al lugar de cuál había visto buenas opiniones en mi teléfono y ahí estaba un restaurante de hamburguesas tenía una buena apariencia así que entre a comer me senté en una mesa vacía en la esquina del lugar y llegó una mesera a atenderme tenía el típico atuendo de mesera y el cabello castaño amarrado a forma de trenza.
— Buenas noches aquí tiene el menú que desea ordenar joven.
La mire suavemente y luego al menú.
— Me gustaría una hamburguesa doble con papas unas alitas de pollo y una Coca-Cola grande por favor.
— En seguida está su pedido.
La mesera se dirigió a dejar la orden en ese momento vi mi teléfono y me di cuenta que venía una tormenta siempre se recomienda estar bien resguardados en los hogares por la tormenta ya que según hay cosas y pasan cosas pero es por qué son muy fuertes en fin al cabo de 15 minutos llegó mi pedido.
— Muchas gracias señorita.
— Que lo disfrute cualquier cosa que guste me avisa.
— Si claro muchas gracias.
Comencé a comer con mucha energía como si no hubiera comido en días.
— ¡Mmmhhh está hamburguesa es incluso mejor que como lo dicen en internet!
Comencé a comer con más intensidad y energía al terminar pague la cuenta y salí del lugar para ir a casa pero algo llamo mi atención la tormenta se acercaba no me daría tiempo llegar a casa así que me escondí en un callejón.
— Rayos la tormenta es muy fuerte pero me preguntó que hacer si llega a inundarse este lugar.
Suspiré y saqué mi libreta y celular para hacer mi tarea pero algo no estaba bien escuché un fuerte estruendo a tres calles de dónde estaba guarde mis cosas y salí corriendo a ver pensando que hubo un choque pero me encontré con algo diferente.
— Que mierda es eso y ¿Quién está con esa cosa?
Delante de mi había una ser amorfo extremadamente grande era deforme y con apéndices saliendo de todos su cuerpo tenía alrededor de 16 manos y en ellas tenía ojos y bocas, tentáculos salían de su espalda y estómago pero aquella persona con un traje negro y una capucha que solo dejaba ver su boca solo lo miraba y solo pude ver como la criatura atacaba con sus tentáculos mientras hablaba en un idioma de estrellas en agonía y susurraba oraciones prohibidas.
— No recuerdo que fueras tan débil pero todo termina aquí ya no me diviertes.
En ese momento aquella persona se rodeo en llamas violetas su cabello flotaba y sus ojos lanzaban un brillo similar al de las estrellas solo levantó la mano y su ojo izquierdo se ilumino no se miraba su rostro a pesar de que su capucha cayó por el viento.
— Þanir’is älithir
Esas palabras salieron de la boca de la persona que a juzgar por su cabello era una mujer, un destello ilumino el lugar y aquella criatura explotó en mil pedazos llenando el lugar de un olor a pescado podrido y quemado ella lanzo una llamarada de fuego desintegrando todo, se colocó la capucha me miró y sonrió.
— Nos veremos más pronto de lo que crees.
Se llevó un dedo ala boca en señal de que guardada silencio y desapareció en la niebla, me quedé helado sin poder moverme mi cuerpo no respondía y mi mente no procesaba lo que pasaba solo me quedé ahí bañado en sangre de aquella criatura y caí al suelo.
— Que está pasando dónde estoy.
Una voz que parecía provenir de todos lados me respondió.
— Estás en dónde deberías estar ella ya está comenzando a mostrarse.
Aquella voz era nítida como proveniente de otra dimensión.
— Quien es ella.
Pregunté mientras buscaba aquella voz y su origen o al menos saber si era real.
— Tu debes descubrir su secreto, todo gira alrededor de ella, su existencia causo todo, es una obscuridad más profunda que la noche, ella encabeza todos los misterios de este mundo y todos sus secretos debes detenerla o el mundo se terminará de su obscuridad.
Suspire suavemente y luego respondí.
— Y como voy a detenerla si no la conozco además elige a alguien más yo estoy muy ocupado no quiere tener nada que ver con esto.
La voz me respondió mientras sentía un fuerte dolor en la cabeza.
— No, solo el pecado original podrá hacerla solo otra obscuridad igual a ella podría acabar con ella solo el hijo de obscuridad y noche lo hará ella lo debería matar pero no podrá y el crecerá y su vida arrancará o toda la vida sufrirá por la eternidad.
Desperté gritando y me pegue ala pared gritando y llorando.
— Por favor pará no quiero más ya detengan las, esas voces que salen de mi cabeza.
En mi mente oía voces repitiendo una y otra vez la mis frase.
«Hijo del pecado condenado a nacer y sufrir eternamente, ella te dará una muerte cruel hijo de la luna y la noche»
Me golpeé la cabeza contra la pared hasta hacerme sangrar y fue cuando oí una voz familiar.
— Dark ¿Que te paso? ¿Estás bien? Dime qué tienes ¿Por qué estás bañado en este moco que huele tan mal? Y ¿Por qué te golpeas así?
Sin duda alguna era Kimberly simplemente la abrace llorando hasta que perdí la consciencia por los golpes en la cabeza.
«Ella nació del costado de la bruja antigua la sin nombre que hacía pactos con los habitantes de hace eones y de su pacto nació aquella que evitará el nacimiento de quien cerrará el puente entre este mundo y ellos»
Aquellas voces no decían visiones o profecías hablaban del pasado de alguien que ya está aquí desde hace mucho tiempo alguien de quien nadie sabía su existencia y hasta ahora se hace presente y quizás yo era el único que lo sabía pero quería negar con toda mi alma esto.
— ¡Ahhhhh!
Desperté gritando y llorando sin saber en dónde estaba cuando mire entro Kimberly preocupada al parecer estaba en su habitación.
— ¿Estás bien Dark? ¿Paso algo?
La mire suavemente y suspire simplemente tome un vaso de agua que estaba a mi lado.
— Disculpa solo fue un mal sueño.
Ella me miró suavemente.
— ¿Que hacías en la tormenta ayer? Sabes que está prohibido salir durante las tormentas ten suerte que te encontré estabas fuera del edificio donde trabaja mi hermana.
Solo la mire y escondí la verdad de lo que había presenciado.
— Ya sabes tuve un ataque de pánico mientras me dirigía a casa y me quedé ahí a que se me pasará.
Ella me miró con sospecha pero luego suspiro y me miró con preocupación.
— Hay idiota ala próxima no me iré con nadie que no seas tú voy a cuidarte mejor además tienes medicamentos para eso ¿no?
— Emmm bueno se me terminaron el domingo y bueno como sabes no tengo dinero para comprarlas de nuevo.
— Y por qué no me dijiste sabes que yo siempre te ayudo con eso.
— No me gustaría depender solo de ti Kim además no quiero causar problemas.
— Para nada además mi madre ya te hizo el desayuno.
Ella se lanzo a abrazarme y sonrió.
— Creí que te había perdido.
Correspondí al abrazo y la mire.
— No te preocupes sabes que hierva mala nunca muere además yo no moriré por algo como una tormenta.
Y luego susurre:
— Quizás por mi propia mano pero bueno ya veremos.
En eso entro la hermana mayor de Kimberly, Alya a diferencia de Kimberly los ojos llenos de ojeras de ella eran como el café de las mañanas y su cabello lacio desordenado color cereza con mechones moka le daba el aspecto de recién despertada, le dio un fuerte zape a Kimberly.
— Deja de hostigar a los invitados además Dark es mi invitado no tuyo así que si alguien lo abraza soy yo.
Ella lanzo a Kimberly y me abrazo con mucho cariño solo suspire y me deje llevar por el momento.
— Hay Dark cómo quisiera que tú fueras mi hermano menor y no esa niña tonta o quien sabe ¿no te interesa casarte conmigo?
Kimberly la miro con furia y comenzó a jalarla para alejarla de mi.
— ¡Oye no deberías hacerle esas propuestas a mi amigo y mucho menos si es menor de edad llamaré ala policía!
— ¡Niñas dejen de molestar a la visita y bajen a desayunar!
Esa voz tan suave era inconfundible la madre de Kimberly estaba alas escaleras, ambas se lanzaron corriendo para ganar más comida yo solo me levanté y fui caminando.
— Buenos días Dark disculpa las molestias que te causan mis gotas hijas.
Sonrió cálidamente y ambas hermanas la miraron.
— ¡Oye no somos tontas!
Me reí suavemente y le sonreí.
— No sé preocupe estoy acostumbrado a la molesta de Kimberly.
Ella sonrío y me invitó a sentarme me senté y me sirvió panqueques y café.
— Muchas gracias en verdad no debería molestarse.
Ella sonrío suavemente y me acaricio la cabeza.
— No te preocupes desayuna y Alya los llevará a la escuela además hoy entra temprano al trabajo.
Comencé a comer y la mire.
— Muchas gracias.
Al terminar el desayuno ayude recogiendo las cosas además de limpiar la mesa y lavar los trastes.
— Ya vez mamá por eso digo que es mejor cambiar a Dark por Kimberly.
La madre de Kim miró a Alya.
— Ya te dije que dejes de molestar a tu hermana ya eres muy grande para eso.
Alya volteo los ojos.
— Está bien mamá después de todo Dark será mi esposo ¿Verdad Dark?
La mire suavemente y luego Kimberly le lanzó agua.
— ¡Que dejes de acosar a Dark!
La madre le dio un golpe a ambas uñas mando a alistarse ambas terminaron yo agradecí la comida y me despedí.
— Espera Dark toma.
La madre de Kim me dio una bolsa con comida y fruta para la escuela.
— En verdad le agradezco mucho señorita Eliza no debería molestarse.
Ella sonrío y me abrazó.
— No te preocupes debes comer bien en la escuela.
— Muchas gracias y espero poder visitarla de nuevo.
Subí al auto de Alya y nos dirigimos a la escuela pero se detuvo en una farmacia y se bajo luego regreso con una bolsa y me la dio.
— Toma escuche que ya no tenías medicamentos para tu condición y te compre más.
La mire y simplemente me quedé sin palabras.
— En verdad no es necesario estos medicamentos son muy caros y yo podría trabajar más y comprarlas no deberías molestarte Aly.
Ella arranco el auto y siguió.
— Lo hago por qué en verdad quiero ayudarte y eres alguien muy especial para nosotros no solo para Kim y yo también para nuestros padres eres como un hijo para ellos un hermano para Kim y yo simplemente quiero lo mejor para ti.
Algunas lágrimas cayeron de mis ojos y la abracé.
— En verdad no sé cómo pagarte esto.
Ella me acaricio la mejilla.
— Que te parece si tenemos una cita el miércoles que seria mañana.
Kimberly grito desde atrás del auto.
— ¡Que ya dejes de acosar a Dark!
Yo suspire y la mire.
— Claro aceptó es lo menos que puedo hacer por ti al ayudarme de está forma.
Kim solo gruño enfurecida desde atrás y Alya solo sonrió y nos dejó en la entrada de la escuela se despido de Kimberly y luego de mi.
— Nos vemos mañana Dark que te vaya bien en tus clases.
La mire suavemente.
— Nos veremos mañana Alya.
Entre ala escuela junto a Kim listos para otro día de estrés y frustración en la cárcel para adolecentes.