Chapter 35 ¡Finalmente, ella aceptó!

"Zephaniah, deja de llorar porque de lo contrario, nos iremos ya para la casa", le advirtió Vivianna.

Entonces, el pequeño empezó a llorar aún con más sentimiento. "Boohoo... No, mami. yo nunca he dormido con mis padres. Sólo quiero que nos vayamos a la cama los tres juntos".

Al ver lo que sucedía, Augustine lo convenció de inmediato diciéndole: "Está bien, esta noche voy a dormir con ustedes, pero deja ya de llorar".

"Oye... Augustine....¿Qué estás diciendo?", afirmó Vivianna con los ojos desorbitados. Luego se preguntó a sí misma en qué momento ella había llegado a ese acuerdo con él.

Augustine le respondió mirándola fríamente: "Tu hijo está hecho un mar de lágrimas y aun así, ¡te niegas a complacerlo! ¿Entonces, con qué derecho vas a criarlo?"

Vivianna estaba a punto de explotar y terminar de enloquecer. ¿Cómo se atrevía este sujeto a amenazarla con quitarle la custodia de su hijo?

"Por supuesto que quiero mucho a mi niño", replicó ella.