Mackenzie Memore, Isabel Castilla, Juliana Severo, Bedivere y Gawein vs los dos de otro mundo-6

Mackenzie Memore 70% de su capacidad hechicera.

Porta "armadura de lancero antigua"

Su armadura le brinda gran agilidad, flexibilidad y resistencia mágica.

Su conjunto se compone por: camiseta enmallada azulada recubierta por una armadura escamada plateada, una capa de doble faz negra y roja por atrás, botas negras altas, pantalón de cuero negro protegido por una falda enmallada oscura flexible, guanteletes de cuero rojo y un casco que desprende una malla la cual recubre el rostro de su portadora.

Cada parte posee un color particular debido a que estas le permiten a su creadora y portadora hacer ciertas hazañas con ella.

La armadura de Mackenzie no es así porque sí.

- ¿Qué esperas perra? ¡ataca! - le grito a la del otro mundo, mientras extiendo mi brazo hacia adelante y abro la palma de mi mano, extiendo mi otro brazo un poco hacia atrás y con mi mano muevo mi lanza oscura. Hago que la punta de esta golpee el suelo haciendo un poco de ruido.

- Que maldita mocosa tan exasperante ¿enserio crees que puedes contra mí en un uno a uno? - dice en voz baja su rival, quien lanza una ráfaga de flechas mágicas.

- Aquí viene- creo un portal.

- ¡JA! Maldita mocosa no aprendes- dice en burla la del otro mundo al ver que hago lo mismo nuevamente, solo que esta vez.

Se crea un portal, tras otro portal, seguido otro y otro y otro y así sucesivamente haciendo que sus flechas mágicas no lleguen a ningún lugar, nadie puede seguir su trayectoria excepto yo. Mi cerebro debe calcular trayectorias continuamente para que no fallen mis portales, usar mis conjuros requiere mucha jodida matemática y física y es molesto pensar que tía Velvet tiene razón cuando dijo que debía meterle lógica a lo que hago, la del otro mundo no puede ni adivinar qué pasa, hago que su magia se le regrese creando portales sobre ella y su invocación, por reflejo la del otro mundo desaparece sus flechas antes de que la golpeen.

- Imbéciles, siempre son mejores que nosotros solo porque si- reniego sobre eso. Todos esos putos tienen mejores reflejos, mayor magia, mejor control elemental y tantas cosas que le toman años a alguien normal.

La del otro mundo intenta algo nuevo.

Esta vez deshace su montura y se deja caer, o eso se supone ya que empieza a levitar.

Ahora hace algo que no debería ser posible….

- Muy bien perrita, ya me cansé- una gran cantidad de círculos mágicos se crean en el aire- dijeron que solo necesitaban a una viva y por lo visto eres un maldito grano en el trasero, así que te voy a matar de una vez.

Mackenzie había aprendido algo mientras vivía con su tía y es que debe aprender a combatir a todo tipo de magos y aprender de sus artes.

Dejo de golpear el suelo con la punta de mi lanza, me coloco en postura defensiva mientras empiezo a girar mi lanza. Me preparo para lo peor, pero lo que no sabe esa bastarda es que…

Los círculos mágicos empiezan a disparar ráfaga tras ráfaga de magia ígnea, su lanzadora sonríe pensando en que la hechicera es carbonizada por sus ataques.

Lo que en verdad ocurre es…

- N…no…nooo… mee..me dijeron que era débil, pero lo que está haciendo es ridículo..-comenta la del otro mundo incrédula.

Como se decía, la armadura de Mackenzie posee cualidades que le dan ventaja dependiendo de su estancia, en su estancia de defensa mientras tenga uno de sus brazos extendidos hacia adelante y la palma abierta, ella puede predecir hasta cierto punto la trayectoria de la magia debido a las partículas de éter que estas sueltan, su guantelete crea un pequeño escudo invisible al ojo humano el cual le permite desviar ataques mágicos hasta cierto punto, pero para eso utiliza su lanza. Al golpear el suelo con la punta de su arma, distorsiona el campo de éter, lo que le permite romper conjuros mágicos. Es una gran ventaja para luchar contra alguien que ataque a distancia, pero esto no es eterno y también tiene restricciones, mientras ella este en su estancia defensiva, no se puede mover o atacar, solo puede desviar y devolver magia, tampoco puede regresar magia de campo o magia máxima.

Con cada ataque mágico que intenta golpearme, el cual es desviado por mi escudo y mi arma, mientras intento regresarle sus propios ataques a la del otro mundo la cual los esquiva a medias.