Salgo de mi cuarto con la intención de encontrar a alguien vestido de conejo en un margen de búsqueda bastante amplio, necesito ayuda. Normalmente en cualquier caso le pediría ayuda a Liam pero por obvias razones no puede ser; le pediría ayuda a mis otras hermanas, pero todo lo que les digo les entra por un oído y les sale por el otro e incluso llegué a pensar en pedirle ayuda a Padre pero está ocupado con el papeleo que normalmente se encarga Liam; así que sí, estoy solo.
Salgo de casa con la excusa de "despejarme" y me dirijo al parque viejo para ver si me llega la inspiración divina para saber dónde se esconde el conejo cuándo escucho una voz familiar
— ¿Dónde vas cabezón? — dijo mi viejo amigo Jeremy, que no veía desde el incendio de 2017 (sí, por desgracia tenemos que mencionar los años de incendios y accidentes, nos va genial) —Debes de estar muy afectado, ¿te apetece una copa?— mencionó con dos botellas de cerveza "pirata" y con unos snacks.
—Cómo me conoces— exclamé — ¿Podemos ir a tu casa mejor?— no me apetece estar dos personas en el parquecito, yo soy el raro pero no me apetece arrastrar a Jeremy con mis rarezas. — ¿Dónde creías que nos las íbamos a tomar, en Fredbear's?— dijo mientras me daba unas palmaditas en la espalda.
Jeremy es un exmilitar, hombre medianamente alto, musculado, con algunos tatuajes, ojos azules y un pelo rubio que indica sus años pasados ya que él era pelirrojo. lleva sus gafas cuadradas rotas de la patilla izquierda, una camiseta azul cubierta por una chaqueta vaquera marrón a juego con sus vaqueros y sus preciadas botas de la mili. Él es un viejo amigo de la familia, amigo mío desde que tengo memoria, a pesar de ser por cartas, ya que vivía en otro pueblo en ese entonces. Jeremy ha ayudado a nuestra familia siempre, ya que me tiene cariño por algún motivo, no recuerdo cuándo nos hicimos amigos pero mi madre me ha dicho que desde pequeños.
Ya, en su casa, me empieza a hablar de los viejos tiempos y de su mejor amigo actualmente desaparecido, al que nunca conocí. Ya entonces me pregunta, cuando el ambiente está mas calmado —¿Cómo está Liam?, ¿está viva?—, —Sí— respondí con velocidad, no quería hablar de Liam, no le gusta que hable por ella.
Entonces enuncio —Creo saber quien ha provocado el incendio— a lo que Jeremy me mira intrigado y entonces prosigo —había alguien vestido de conejo cerca del crimen— a lo que Jeremy suelta del impacto la cerveza y me pregunta —¿tenía los ojos grises?—