— ¡Qué rico es esto! ¿Es del mundo de Nanahoshi? Preguntó la Roxy alterna.
— Sí. Es la segunda vez que invoca de estos. A los niños les encanta, y bueno, dan ganas de otras cosas al comerlo con Rudy o las chicas a solas , jejejeje.
— Qué raro es esto. Este despacho es muy parecido pero a la vez muy diferente al de mi Rudy, salvo por los muebles y Aquahartia. ¿Qué es eso? Dijo poniéndose de pie mientras, Roxy revisaba los documentos, que Rúdeus le encargo .
— Ese es el instrumento musical de Rudy. Se llama guitarra, o algo así. El lo mandó a construir cuando tenía 16 años. A veces se viene para acá a tocar eso, y Lara lo escucha tras la puerta mientras se ríe, en su otra vida tocaba esa cosa con sus amigos, el extraña la música de su mundo, siempre dice que si pudiera traer algo sería la música.
— Sí, me imagino, por cierto, mi Lara también tiene una personalidad parecida a la de acá — dijo la Roxy alterna.
Oye, Roxy, así que nuestra vida fue la misma hasta que nos topamos con Rudy.
— Sí, por lo que me dices, es así — dijo Roxy.
— ¿Cómo era tu Rudy de niño? — preguntó la alterna.
— Bueno, era muy educado y muy talentoso, pero si te soy sincera, el me asustaba al principio.
— ¿Por qué?
— En esa época, lo descubrí varias veces hablando en su lengua del otro mundo. Lo hacía cuando tenía pesadilla o cuando cantaba y pensaba que nadie lo veía, en esa época pensaba que era idioma de los Dragonfolk, jajaja era tan paranoica en esa época .
— ¿Lo espiabas?
— Lo vigilaba. Pensaba que era Laplace. Él me desconcertaba. A veces se comportaba como un adulto, y al rato estaba jugando con un palo, o pateando una pelota de trapo, o persiguiendo mariposas.
— ¿Era pervertido, O un niño normal? .
— ¿Rudy pervertido ? No. Era muy educado era un chico tierno , aunque una vez me vio desnuda. Pero él dice que fue un accidente.
— No lo creo. Mi Rudy me espiaba cuando me bañaba. Lo sorprendí varias veces, y se robó mi ropa interior era un niño pervertido. De seguro, el tuyo hacía lo mismo.
— No, él jamás me robó mis bragas. Y esa vez fue un accidente, y fue culpa mía. Le dije que si tenía una duda, no dudara en decírmelo. Y justo una tarde salía de la bañera cuando él entró a mi habitación con el libro de magia abierto preguntando por un hechizo, alcancé a taparme las tetas, pero dejé mi parte de abajo al descubierto. Rudy me miró, se puso muy rojo, pidió perdón y cerró la puerta. Durante tres días no me habló después de clases y me evitaba. Jejejeje, y ahora no sé cómo despegarlo de ahí abajo cuando estamos juntos, jejeje le encanta comeerla la con(..) .
— Uuum ¡no seas tan explícita! Oye ¿y él le tenía miedo al exterior?
— ¿Rudy? No. Siempre me acompañaba a mí o a su padre al pueblo. De hecho, así conoció a Silphy mientras el y Paul visitaba las Atalayas qué rodeaban el bosque .
Un día, Rudy salió conmigo a dar un paseo, y aproveche de ayudar a unos campesinos con la lluvia. Ahí, Rudy fue a dar una vuelta y encontró a Silphy siendo golpeada por unos niños . Rudy golpeó a los abusadores y rescató a Silphy . Y de ahí se hicieron amigos, y ahí también la conocí. Fueron meses muy lindos los que pasé con ellos , hasta que me tuve que ir.
— Ya veo, pero tú, ¿cómo supiste que era un reencarnado, dijiste algo que lo descubriste volando?
— Sí. Bueno, una noche yo estaba haciéndome una pa… eeeh, quiero decir deambulando por el pasillo, y sentí un ruido en la habitación de Rudy. Así que entré, y no había nadie. Cuando de pronto entró levitando por la ventana, casi me muero del susto. Le dije que me iría al otro día, y ahí se puso a llorar y me confesó la verdad. Al principio, pensé que me estaba tomando el pelo. Sin embargo, me empezó a enseñar cosas que era imposible que un niño como él supiera. Y ahí, nuestra relación pasó de maestra a alumno a amigos. Estuve un año más con él, y decidí irme cuando no tuve más que enseñarle. Después, cuando me escribió desde Roa, y me decía que estaba trabajando para pagarle la universidad a Silphy. Ahí yo ya había decidido que cuando cumpliera el doce años, iría con ellos a Ranoa y buscaría trabajo como profesora. Pero llegó la catástrofe de Fitoa y todo cambió.
— Ya veo. Yo tenía pensado visitar a Rudy también, pero no irme con él a la universidad. ¿No me digas que ya lo amabas en esa época? .
— ¡Qué, no! Era solo un niño. Pero a veces tenía la sensación de que hablaba con el hombre que estaba atrapado en ese cuerpo de niño y aún no se desarrollaba del todo. Pero esa ilusión se caía a pedazos cuando, después de hablar cosas tan profundas, como la vida y la muerte, el mundo y el espacio. Después veía a Rudy dibujando garabatos con Silphy y jugando y riendo como niñitos. Rudy tenía esas dos dualidades al mismo tiempo: era un hombre que hablaba de temas muy profundos, y a los segundos volvía a ser un niño. Él me dijo hace poco, cuando hablamos de ello, que si bien estaba consciente de su vida anterior, en esa época su cerebro le hacía sentir placer por cosas tan tontas como rayar un trozo de papel o jugar a las escondidas. Supongo que eso es verdad. Cuando somos niños, nuestro cerebro se comporta tan diferente.
— Tú lo amabas románticamente cuando era un niño, ¿cierto? — le dijo la Roxy alterna.
— ¡Qué! Claro que no. No soy una degenerada.
— No te voy a juzgar, somos la misma persona .
— Cuando me di cuenta de que mi corazón se aceleraba cuando hablaba con él, decidí irme y regresar cuando Rudy fuera mayor, confesó Roxy.
— Ya veo. Pero aún así, lo besaste cuando era un niño.
— ¡No fue así! . Nos encontramos en Windport, y solo estuvimos dos días juntos. Pero Eris no se despegaba de Rudy, y tuvimos una despedida algo distante. Yo estaba algo triste de verlo tan poco y tener que volver a separarnos . Él ya había crecido. Era más alto que yo y se estaba empezando a volver un hombre . Y esa noche cuando estaba por irme a dormir , él llegó a despedirse. Subimos a la azotea y miramos el puerto de Wind y las estrellas esa noche. Cuando bajábamos a mi habitación, y mientras nos dábamos un abrazo de despedida, él me tomó el rostro y me dio mi primer beso. Fue tan lindo. Fue romántico, y me sentí amada por primera vez en mi vida. Fue la mejor sensación del mundo. Esa noche, me prometió que cuando cumpliera quince años nos casaríamos, y me dijo que me amaba.
— Vaya, eso es muy lindo — dijo Roxy alterna con una mueca de sonrisa. — Lo mío fue diferente. Yo no conocía a Silphy y cuando me reencobtre con Rudy me enamore de él, pero yo no sabia que estaba casado, eso lo supe después de que su padre había muerto. Yo me metí a la cama de Rudy aun sabiendo que estaba con Silphy .
Rudy Estaba en depresión y se estaba muriendo de pena. Y Elinalise me dijo que solo el calor de una mujer podría sanarlo, pero que ella no podría hacer eso con el . Y como yo lo amaba, decidí hacerlo. Rudy estaba muy avergonzado por engañar a Silphy, aun así asumió su responsabilidad, él me tomó como esposa, y Silphy me aceptó. Ojalá mi historia de amor hubiera sido como la tuya. —Dijo la alterna algo triste recordando el pasado.
— No te pongas así. Silphy siempre ha tenido un gran corazón. Además, mi primera vez fue parecida. Rudy estaba deprimido por Zenith en Lapam. Su bien Rudy no estaba casado aún, Silphy ya estaba embarazada. Ella nos esperaba para casarnos los tres juntos , y esa noche también lo saqué de su estado depresivo haciéndolo con él. Fue una noche mágica, el fue tan tierno conmigo y tan cariñoso, fue muy lindo como siempre lo había soñado. Aunque al otro día Lilia nos descubrió desnudos en la cama mientras jugábamos. Fue la peor vergüenza de mi vida.
— Jajajajaja, a nosotros nos descubrió Elinalise, pero saliendo de la habitación ya vestidos .
— Sí, pero no te vio desnuda arriba de Rudy como nos vio Lilia a Rudy y a mí. Rudy y yo evitamos a Lilia por varios días después de eso.
— Jajajajajaja. Eso debió ser muy vergonzoso. Oye, debo preguntar esto, ¿por qué te besas con las otras chicas?
— ¿Tú no lo haces?
— Bueno, en la intimidad, pero siempre con Rudy. Ustedes lo hacen sin él en casa.
— Sí, bueno, Elinalise nos aconsejó eso. Dijo que si nos amamos entre nosotras, el matrimonio funcionará mejor y no nos pelearemos para acaparar al hombre, ya que entre mujeres también podemos darnos amor y placer , y es cierto nuestro matrimonio es muy feliz.
— Sí, a nosotros nos dijo lo mismo. Pero a Eris y a mí nos da vergüenza. Silphy insiste en hacerlo cuando estamos solas, pero me da mucha vergüenza. Además, mi Rudy pondría esas caras pervertidas.
— Bueno, mi Rudy también pone una cara pervertida, aunque no tanto como el tuyo. Pero disfruto estar con las chicas, me siento feliz así. Tal vez debería probar con Silphy cuando estén solas. Después de todo, llegará el momento en que Rudy se irá, Eris también, y Silphy y yo quedaremos solas.
— No quiero pensar en eso — dijo la alterna.
— Yo tampoco. Pero Rudy siempre nos dice eso. Sabes, tuve mucha suerte con él. Claro, tiene tres esposas más , y además está la reina, pero Rudy siempre tiene tiempo para mí, y para todas. Y no hablo solo de sexo. Es un gran compañero con quien hablar, dar un paseo o a quien contarle mis problemas o mis miedos, el siempre es mi pilar. A veces, nos consiente y nos hace la cena, o nos saca a misiones, aventuras o simplemente llega con flores o dulces. Siempre nos está demostrando cuánto nos ama.
— Sí, nuestro Rudy igual, dijo la alterna.
— Debes estar tranquila. Sé que Rudy, Nana y Perugius los enviarán de regreso a casa — dijo Roxy.
— Gracias. Bien, entonces, ¿qué debemos ver?
— Estos documentos. Pero Rudy los escribió en su lengua antigua, ¡diablos! Lucy, Lara, vengan aquí, hijas.
— Sí, mamá Azul — dijo Lucy.
— Mis niñas, ¿pueden traducir estos escritos de su padre por favor?
— Claro, mamá — dijo Lucy, sentándose en una silla, mientras Lara saltaba en los brazos de la Roxy alterna para leer y traducir los documentos.
—Mamá aquí dice, morir así es morir de amor, por amor tengo el alma herida, creo que es una canción, porque aquí dice —autor Camilo Sesto—. Le dijo Lucy.
—No hija, busca todo lo que diga sobre universos paralelos, viajes en el tiempo y esas cosas de que habla tu papá, cuando habla con Orsted o Perugius, le dijo Roxy.
— Jejejeje, aquí dice: "Roxy está embarazada. Se ve muy linda con barriga". ¿Quién diría que la chica que me sostenía en brazos cuando tenía tres años ahora está esperando a mi hija? Jejeje, mami, ¿es verdad que sostenías a papá en brazos?, dijo Lara que en vez de ver los papeles había sacado el diario de Rúdeus.
— Lara Greyrat , no debes leer ese diario. Te dije que leyeras esos documentos — La regañó Roxy, roja de vergüenza. — ¡Dame, eso, niña! Eso es privado de tu papá — dijo, quitándole el diario y guardándolo en un cajón.
— Ella siempre hace eso, mami Azul — dijo Lucy.
— Chismosa, dijo Lara entredientes.
— Ya dejen de pelear y por favor traduzcan los documentos que les di. Nada de diarios, le dijo Roxy.
— Bien, mamá — dijo Lucy. — Aquí habla de teorías de universos paralelos, y hay unas ecuaciones matemáticas con números del mundo de papá. Habla de agujeros negros, agujeros de gusano, y que tal vez el maná pueda abrir dichos fenómenos, y que tal vez mami Nana y él llegaron así, por la invocación de alguien en el futuro.
— Vaya, tu Rudy sí que ha investigado sobre eso — dijo la alterna.
— Sí, siempre ha sido así. Bien puedes anotar, por favor — dijo Roxy a su contraparte.
Mientras, en ese momento, Rúdeus y los demás llegaban a las ruinas para llamar a Almanfi.
— Bien, me imagino que ya saben las reglas con Perugius, ¿cierto? — les dije.
— Sí, ya la sabemos. Deja de fastidiar — me dijo la Eris alterna.
— No le hables así a mi esposo, idiota — le dijo mi Eris.
— Ya no peleen — las regañó Silphy.
— Bien, llamaré a Almanfi y le diré la situación. Y espero que Perugius nos reciba. Tú, Alek, por favor, compórtate allá arriba. Nada de idioteces.
— ¿A qué te refieres Reidar ?
— Cuando te diga algo, no le contestes. No seas irrespetuoso. ¿Entendiste?
— Sí, sí, sí. Ya lo conozco. Tranquilo, dijo Alek
— Bien, aquí vamos — dije tocando el silbato. Rápidamente llegó Almanfi.
— Rúdeus Greyrat, es una gran comitiva. Y veo que va el Dios del Norte. Espero que no planee atacar a mi señor.
— Claro que no, Su majestad es un amigo, le dije.
— ¿Por qué hay tres personas que se parecen a ustedes? Preguntó Almanfi.
— De eso quería hablarle. Son de un universo alterno, y quieren regresar. Necesitamos que su majestad nos ayude, por favor. No queremos provocar un accidente, le dije.
— ¿Son confiables?
— Sí, lo juro.
— Más te vale, Dios del Cause. Si intentan algo, tú y el Dios del Norte pagarán por ello, nos dijo el enmascarado .
— Hey, yo no he hecho nada — dijo Alek, en el momento en que Almanfi desaparecía.
—Y ahora qué?, dijo Alek.
—Nada, esperar a ver que dice Perugius. Si nos va bien después debemos hablar con Orsted. Que ellos estén aquí me da miedo; que sea obra del hombre-dios… no llegaron por accidente. Yo, en cambio, llegué haciendo un experimento, le dije .
—Pero él dice que el círculo emitía una luz amarilla y aparecieron acá, me dijo Silphy.
—Oye, Rudy, Perugius dijo que el agua de la pila bautismal no se pone amarilla… ¿y si fue Laplace quien los envío aquí ?
—No, sería era roja. Con Siegh se puso amarilla, le Recordé .
—Ya veo. Bien, Siegh, vas a ver a tu padrino —le dijo Silphy sonriendo.
—Él es mi padrino… ¿padrino padrino o como lo es papá de Edward? —preguntó Siegh.
—Muy gracioso, hijo. Solo compórtate —le dije—. Y con él hazte llamar Saladin, que fue el nombre que te dio —le dije.
Cuando miré al otro Rúdeus, se reía.
Mientras las Eris hablaban entre ellas …
—¿Y Rinia y Purcena? —preguntó la alterna.
—Están en Ars; deberían llegar hoy. De seguro salieron con Gabriel y David. Lo más probable es que esos idiotas las invitaron a comer carne y al teatro.
—¿Y quiénes son esos idiotas? —dijo la alterna.
—¿Qué, no lo sabías? Son mis hermanos.
—¿Qué? Yo no tengo hermanos. ¿De dónde sacaste eso? Es imposible —dijo Eris alterna, confundida—. Rúdeus, ¿por qué ella dice que tengo hermanos?
Así, el Rúdeus japonés le contó a Eris de la tradición Boreas y por qué nunca se lo dijo. Sin embargo, la alterna no le dio mayor importancia y se cruzó de brazos. Aún así , la duda la empezó a consumir.
—¿Y cómo son? —preguntó la alterna.
—Bueno, Gabriel es igual a papá, pero pelirrojo como yo, y David se parece un poco a mí, aunque son unos débiles.
—¿Y ellos saben que son tus hermanos?
—David, no lo sé. Pero cuando enterramos a mis papás con el abuelo, Gabriel me llamó hermana; él lo sabe. Cuando nació Ars, me regalaron una daga y un collar que el abuelo les dio, y ahora mandé a decirles que nació Christina.
—Ya veo —dijo Eris alterna, quien recordó de pronto a su madre—.
Oye ¿Tú también te enamoraste de Rúdeus cuando te rescató de los secuestradores? —preguntó la alterna.
—Sí, él los derrotó usando la técnica de gravedad como los dioses del Norte. Me tomó en sus brazos mientras usaba esa magia de gravedad ; en ese momento supe que él sería el padre de mis hijos.
—Sí, yo igual, aunque fue cuando lanzó los fuegos artificiales.
—Sí, eso fue increíble —dijo Eris—. Aunque Rúdeus me enseñaba, no se me acercaba muchos los primeros meses . Yo era una niña estúpida y lo golpeaba cuando no entendía algo y el se acercaba a explicarme , o cuando quería demostrarle mi amor, terminaba golpeándolo, y por eso él me evitaba. Eso me dolía y me ponía triste . Recuerdo que la señora Edna me dijo que para que el fuera más cercano a mí, debía un poco más cariñosa y femenina con él, y poco a poco nos hicimos amigos. Odiaba cuando me recordaba que somos primos o me hablaba de Silphy, jajaja .
Sabes recuerdo que una noche unos meses antes del desastre de maná, entré a su habitación con la intención de besarlo en la boca, ¡y el desgraciado dijo "Roxy" mientras dormía!, me enoje tanto que le di un puñetazo y salí huyendo.
—Oye, por eso tenía el ojo morado. Pensé que un libro se me había caído en el ojo —le dijo Rúdeus.
—No escuches las conversaciones, Rúdeus, es de mala educación —lo regañó Eris.
—Pero entonces ¿tu Rúdeus te quería o no? —preguntó la alterna.
—Sí, me quería; lo notaba mirándome, pero cuando lo descubría él desviaba la mirada, y siempre hacía gestos para mí, como contarme historias y me regalaba una figurita del héroe de esa historia . A veces dejaba un dulce entre mis libros cuando aprobaba un examen, o yo intencionalmente hacía un hechizo mal para que él me corrigiera mi postura y me tocara las manos. Pero no fue hasta el incidente de teletransportación en que empezamos a estar más juntos, a dormir abrazados más seguido , y dejé de golpearlo por mis arrebatos idiotas. Él siempre me cuidó esos años, hasta la pelea con Orsted. Rúdeus peleó con todo, pero ese maldito lo mató . Después de que Nana le salvó la vida, y Rudy despertó, yo le di mi primer beso.
—Ya veo, se parece mucho a mi historia con mi Rúdeus, pero sin embargo debo preguntarte algo .¿ Él te trató de bajar las bragas mientras estabas dormida? ,¿ o te toqueteó las tetas mientras dormías? , ¿o te espió mientras te bañabas desnuda? ¿O te pellizco los pezones? —preguntó la alterna.
—¿Qué, Rudy? ¡Claro que no! Él jamás me tocó cuando era niña. De hecho, Yo era la que lo manoseaba cuando él dormía cuando ya éramos novios. Él me vino a tocar el cuerpo cuando hicimos el amor por primera vez. Aunque después de regresar del santuario de la espada y casarnos, ya se puso tonto y me agarraba el culo y las tetas cuando nadie nos veía y lo golpeaba por eso, pero ahora me pide permiso , pero Jamás antes de ser novios.
—¿Pero de niña no te hizo nada?
—No, solo me abrazaba cuando estaba triste , me besaba en la frente o me acariciaba el cabello, solo eso. ¿Por qué preguntas?
Eris alterna miró al japonés, quien le sonrió y le dio un puñetazo en el estómago.
—Auch… ¿Ahora qué hice, Eris? —preguntó el japonés.
—Eso fue por ser un maldito pervertido cuando era niña, imbécil. ¿Por qué no fuiste tierno conmigo?
—Ya, ya, ya, cálmense ustedes dos. No quiero este espectáculo con Perugius —les dijo Rúdeus preocupado por el comportamiento de los alternos .
—Jaja, déjalos, Reidar; esto es entretenido —me dijo Alek, que estaba ahí sentado mientras Siegh le preguntaba cosas.
—Así que tú también te fuiste al santuario de la espada?— le dijo la eterna.
—Sí, cuando iba a regresar, él me envió la carta de que estaba casado, Casi me puse a llorar por eso, y me quedé en blanco, hasta que supe que pelearía con Orsted .
—Ya veo, me pasó lo mismo.
—Sí, jaja. Cuando llegué a Sharia, solo quería abrazarlo y besarlo no veía a Rúdeus en años y cuando iba a su casa me encontré con su padre, al que vi de espaldas , el era que era caballero de la ciudad en esa época. Pensé que era Rúdeus y corrí hacia él y casi se arma una pelea cuando sacó su espada y me dijo, "que te pasa loca de mierda" jajaja.
—Como se llevaba tu Rúdeus con su padre cuando era niño, ¿alguna vez pelearon?
—No siempre se llevaron bien, ¿por qué preguntas?
—Uuf, yo odiaba a su padre. Cuando Rúdeus llegó a Milis, el se peleó con Paul, y Rúdeus quedo muy deprimido después de eso, cuando regresé, supe que había muerto salvandolo.
—Ya veo. A mí, mi suegro me agrada, es bueno con los niños, y siempre ha sido un apoyo para Rúdeus. En ese laberinto casi mueren ambos, ademas es un buen contrincante en los entrenamientos .
—Sí, sabes, ver a Paul vivo, le dolió mucho a mi Rúdeus, el se siente culpable por su muerte —dijo la Eris alterna que miraba a su esposo que conversaba con Silphy alterna.
—Ya veo, oye ¿Conoces a Sara?— preguntó Eris.
—Sí, es una idiota, dijo la alterna.
—Jajaja, sí, a mí tampoco me agrada. ¿Sabías que las chicas la propusieron como esposa a Rúdeus?
—Sí, Silphy me contó algo.
—Jaja, de seguro si fuera la esposa de Rúdeus, Silphy ya la habría llevado a la cama y yo ya le habría dado un puñetazo .
—Oye, no digas eso de Silphy , es vergonzoso.
—¿Nunca lo has hecho con una chica?
—No, y no quiero hablar de eso, me da vergüenza (...) ¿Tú sí?.
—Sí, la primera vez fue en un trío con Silphy y Rúdeus en Donati, después hice varios con Silphy y Rúdeus, mientras Roxy estaba embarazada, poco después cuando Roxy ya había dado a luz, hicimos uno con Roxy y de ahí experimenté solo con las chicas cuando Rúdeus no estaba. También me he acostado con Nanahoshi, y en un trío también estuve con la reina Ariel y Rúdeus ella se hace la caliente, pero es muy débil en la cama, muerde el polvo rápido .
—Santo Dios, eres una degenerada.
—¿Cómo me llamaste?
—Degenerada.
—Puf, mojigata, eres igual que Nanahoshi hasta hace un tiempo.
—Mmm, bueno, sí lo he hecho en tríos, pero pocas veces. Silphy insiste en hacer eso conmigo y Roxy solo entre mujeres, y Rudy dijo que no le molesta , pero me da vergüenza.
—Tonterías, se pasa bien. Además, Elinalise nos dijo que eso es mejor, así, afianza nuestro matrimonio polígamo, ya que nos amamos todos y no hay peleas. Bueno si hay peleas pero no llegamos a los golpes, y después nos reconciliamos en la cama, jaja, aveces saco de quisio a propósito a Silphy o Roxy para tener sexo de reconciliación en la noche jejejeje.
—Sí, esa elfa degenerada de Elinalise nos dice lo mismo en las noches de chicas, dijo la alterna .
—Tal vez deberías hacerle caso, tu esposo, el depravado, estaría feliz, dijo Eris .
—Sí, me imagino —dijo la alterna mirando a su Rúdeus que le dio una fea sonrisa, pero que para La Eris , la alterna, era maravillosa.
—Él está aquí —dijo de pronto Rúdeus. Mientras aparecía Almanfi.
—Bien, mi señor Perugius dice que pueden ir, pero nada de estupideces, ¿está claro?, Dios del Norte.
—Pero yo no he hecho nada, dijo Alek .
—Y eso va para ti también, Reidar Reí.
—Ya lo sé, le dije .
—Bien, tomen —dijo pasándole las varitas a los nuevos.
—Y así llegamos al Caos Breaker donde, como siempre, Silvaryl nos recibió.
—Su majestad los espera —dijo con su acostumbrada amabilidad, excepto a mi y al otro Rúdeus.
—Mi joven señor Saladin, mi señor lo espera —dijo Silvaryl, quien tomó a Siegh en brazos y se fue con él delante, guiando el camino, mientras le respondía de manera muy amable cada pregunta que Siegh le hacía a la pájara.
—Cuando llegamos donde Perugius. Este estaba, como siempre, sentado en su trono con su cara de culo tan habitual.
—¿Así que es verdad? seis de ustedes. ¿Dónde están las demonios Migurd y la otra Nanahoshi? Preguntó.
—Ella se quedó con mi esposa, señor, y Nanahoshi de ese mundo no es esposa de ese Rúdeus, le expliqué .
—Ya veo. Tú, el Rúdeus de la mirada asustada, ven aquí —dijo Perugius y el japonés se puso a mi lado.
—Tú tampoco te arrodillas, eh. Puf, ya veo. ¿Cómo rayos llegaste aquí?, ¿viniste a matarme?, porque si es así, morirás.
—No, majestad, jamás haría eso. Usted es un querido amigo de donde vengo, solo que no sé cómo llegamos aquí, le dijo el alterno.
—Uuum, cuéntame qué fue lo último que recuerdas antes de aparecer en esta realidad .
—Pues nos transportábamos de Asúra a casa, pero la luz del círculo era amarilla y cuando llegamos aparecimos en el círculo de las ruinas, señor.
—Silvaryl, ve a la sala de los círculos y busca alguna alteración en los círculos de teletransportación de las ruinas de Asura y la que trae a este castillo.
—Sí, mi señor.
—Entonces me imagino que quieren volver, dijo Perugius .
—Así es, señor, le dijo el alterno .
—Ya veo. Rúdeus Dios del cauce ¿Orsted sabe de ellos?
—Él llegará en dos días, majestad no puedo comunicarme, el nunca lleva dispositivos a sus viajes. —le dije.
—¿Cómo sabes que no son enemigos? Preguntó Perugius.
—La bestia sagrada no les hizo nada y los lame cuando los ve y les mueve la cola.
—Aaaggh, ya veo. Si esa cosa no les hizo nada, entonces está bien. Saladin, ven acá, muchacho, le dijo a mi hijo con una sonrisa .
—Es un gusto, majestad —dijo mi hijo arrodillandose ante el.
—Jaja, más educado que su padre, obviamente. Soy el Rey Dragón Acorazado Perugius Dola , tu padrino y no necesitas arrodillarte ante mi . Veo que has crecido, ¿ya tienes tres años, cierto?
—Sí, majestad.
—¿Quieres comer algo? Winona puede traerte lo que quieras.
—Eeh, no lo sé.
—Pamplinas, Winona , lleva a mi ahijado a conocer el castillo y dale lo que quiera.
—Sí, majestad dijo la automata que le habíamos regalado que llevo a Siegh a pasear por el castillo.
—¿Y tú qué rayos haces aquí, tonto? —le dijo a Alek.
—Gusto en verlo, majestad.
—Sí, supe que eres novio de Aisha, ¿es eso cierto?
—Sí, majestad hace 2 años .
—Qué bien, esa chica es lista. Ojalá se te pegue un poco de su inteligencia a ti, cabeza hueca. Por tu culpa casi nos quedamos sin activos para la guerra de Laplace en el futuro, maldito soquete eres igual que tu padre cuando era joven.
—Yo me siento arrepentido, alteza.
—Más te vale, idiota (...) ¿Dónde está tu abuela?
—Fue destruida por el tío Badi, le tomará décadas regenerarse, por lo menos no e tenido noticias de ella cuando viaje al continente demoniaco .
—Jajajajaja, se lo merece jajajajaja. Tienes cierto parecido a Carl, pero sacaste lo cabeza hueca de tu abuela. Permitiré que te quedes, pero una estupidez que hagas y te sello para siempre, idiota. ¿Está claro?
—Sí, majestad (viejo amargado, pensó Alek).
— Bien, en cuanto a ese incidente, jamás escuché de algo así, salvo por tu caso, Nanahoshi.
— Si me permite, majestad — dije acercándome —, hace cuatro años, yo tuve un grave accidente creando un arma nueva, y creí haber tenido un raro sueño donde viajaba a un mundo paralelo. Ahí, Nanahoshi me ayudaba a volver, recreando el círculo y cambiando el circuito. Lo tomé como un mero sueño, ya que desperté herido en los brazos de Eris, pero en ese sueño, pasé cinco días en ese mundo.
— ¿Y eso qué? Dijo Perugius como si mi relato le valiera 25 años luz de verga.
— Pues, esta es la misma gente, señor.
— Haber, haber, dejame tratar de entenderte ¿estás diciendo que invocaste gente de tu mente, Rúdeus?
— No, hablo de que de alguna manera creé un agujero negro y me transportó a un universo paralelo en la misma realidad, señor.
— Los agujeros negros solo tragan materia, no te llevan a otro universo, bien según lo que decía ese libro que invoco Nanahoshi y tú me tradujiste, ese del tipo paraplejico de gafas.
— Sí, lo sé. Pero, de alguna manera, sin quererlo, encontré una manera de viajar entre realidades alternas.
— ¿Y esa realidad está conectada como el mundo de Nanahoshi y este mundo?
— Creo que no, señor. Esto es diferente. Estamos hablando de otra realidad, como el multiverso, donde las posibilidades son infinitas y (...).
— Sí, sí, Dios, me duele la cabeza de pensar en eso. La raza dragón vive por el conocimiento, pero esto me tomaría siglos comprenderlo.
— Perdón por no saber más de física, señor. Solo sabía algo de teoría, le dije.
— Sí, no te preocupes. Cambiar el pasado y los viajes en el tiempo puede haber afectado de alguna manera esto. Sin embargo, tal vez esto sea producto de los cambios que hizo esa persona que invocó a Nanahoshi desde el futuro, según tu teoría — le dijo a mi esposa.
— Bien, manos a la obra. Una vez enviemos a esta gente a su mundo, debemos ver la forma de eliminar los caminos creados entre estas realidades. Creo que puedo hacerlo. ¿Me imagino que trajiste ese plano del arma con que casi te matas? , ¿cierto?
— Sí, señor — dije, pasándoselo. Él lo miró y luego me dio una mirada furiosa.
— ¿Qué demonios estabas pensando al hacer esta combinación de círculos mágicos y gemas? ¿Estás demente?
— Quería un sable de luz, señor.
— ¡Estúpido! Tuviste suerte de no matarte. Esto es muy parecido a como Urupen selló a Laplace. Se parece mucho al remanente Draconico, idiota. ¿Orsted no te dijo nada? .
— No, porque le pedí ayuda al otro Orsted, el del mundo de ellos, para , volver, solo se que algo debió hacer para borrarle la memoria porque no me recuerdan .
— Uuuf, ya veo. Ese tipo no es bueno en estas cosas. De seguro cometió un error y dejó alguna vía de conneccion entre mundo . No se preocupen, yo haré bien esto y esa anomalía va a desaparecer.
— Gracias, señor — dijo el otro Rúdeus.
— ¿Y tú, por casualidad también eres el padrino de Edward? — le dijo al alterno con una sonrisa de burla.
— No señor.
— Ya veo. Y ese Edward, ¿es rubio también, y Sariel el cabello castaño claro?
— No, tiene el pelo castaño oscuro y es un bebé aun . Y Sariel no existe, hasta ahora .
— Jajajajaja, escuchaste, Rúdeus. Edward en ese mundo se ve diferente. ¿Me pregunto por qué será? . Y Sariel no existe. Jajaja, qué raras son las cosas ahí, ¿no crees? — me dijo el viejo con una burlesca sonrisa.
Yo solo me hice el tonto.
— Tu Silphiette alterna, ¿por qué miras tan feo a Nanahoshi? ¿Tienes algo en su contra? Dijo el viejo disfrutando de esto.
— No, majestad.
— Tú, Rúdeus de la sonrisa terrorífica, ¿estás casado con Nanahoshi?
— No, señor. Ella es como mi hermana.
— Aaah, ya veo, jajajajaja. Te molesta que en este mundo Nanahoshi sea esposa de Rúdeus — le dijo a la otra elfa.
— No me agrada verlos juntos.
— Sí, pero no puedes hacer nada. La Silphiette de este mundo la aprecia, jajajaja jajajajaja. Bien, será mejor que veamos esto. Vengan conmigo, veamos qué averiguo Silvaryl y veamos que podemos hacer — dijo Perugius, invitándonos a otra sala donde nos pusimos a ver los planos.
— Mi señor, hay una leve alteración en el círculo que conecta la ruina de la Sharia, en el antiguo castillo de Scots, sin embargo, esa alteración parece que desapareció. Fue una fuerza parecida a lo que provocó el desastre de maná de Fitoa — informó Silvaryl cuando llegamos a la sala de círculos.
— Ya veo, gracias... amo... — digo Silvaryl, Sí, Sylvaril — dijo Perugius, haciéndose el tonto.
— Por cierto, Rúdeus, Zanoba, los felicito por la autómata. Es increíble la calidad y su entendimiento de las órdenes. De hecho, sin él ser un espíritu, tiene niveles de autonomía superiores a los espíritus. No sé cómo rayos lograste algo así. La verdad, si les soy sincero, siento hasta envidia de lo que lograron.
— Oh, eso se debe a los conocimientos de robótica de Nanahoshi del otro mundo y a los conocimientos de mi maestro — dijo Zanoba, cuidando de no revelar mi reencarnación, ya que Alek observaba desde un rincón.
— ¿Y quién fue la modelo de cara?
— Oh, una actriz del mundo de Nanahoshi — le dije. — No quise ponerle la cara de nadie conocido, sería un problema y eso podría ofender a alguien.
— Ya veo, Caos estaría fascinado con esto, fue su sueño de toda la vida, aunque estaría todo el día metido en el laboratorio, ese tipo era peor que tu Zanoba dijo Perugius riendo. —Sabes, deberías hacer una con la cara de Atofe para poder destruirla, ya que no puedo matar a esa loca por la promesa que le hice a Carl, sin ánimos de ofender — dijo Mirado a Alek, quien solo le dio una incomoda sonrisa.
— Bien, creo que deberemos ver esto con calma. Si quieren, los demás pueden salir a recorrer el Caos Breaker.
Las chicas salieron y dejaron solo a los Rúdeus y Nana con Perugius y Alek, que se quedó mirando. Si bien el Dios del Norte no sabe mucho de magia, salvo algunos hechizos, la magia siempre le causó curiosidad, desde que entrenó con Atofe en Gaslow.
Aunque la Silphy alterna no quería despegarse de los Rúdeus ni dejarlos solos con Nanahoshi, así que la Eris alterna casi la sacó a la fuerza.
— Dios, ¿qué pasa contigo Silphy? Nuestro Rúdeus no siente nada por ella, además, está el Rúdeus de este mundo.
— Sí, ¿qué te pasa? Ya lo tuyo es enfermizo — dijo Silphy sentándose en una mesa, donde Winona les servía el té.
— No entiendo por qué eres tan loca — le dijo Silphy a su contraparte.
— No me llames loca, tú eres la loca que permites a esa mujer meterse en la cama de Rudy.
— Uuuf, Silphy, no es el mismo Rudy. Deja de fastidiar, pareces esas fanáticas de Milis, le dijo la Eris alterna .
Silphy alterna se sentó e infló las mejillas.
— Uuuf, yo mejor iré a buscar a Siegh, ¿dónde está?, preguntó Eris.
— Él está durmiendo en la habitación donde siempre se quedan — dijo la autómata.
— Bien, iré por él — dijo Eris, mientras la alterna se puso de pie y decidió acompañarla, así que se quedaron solas las dos Silphys.
— Ya es la quinta vez que te lo digo, deja de fastidiar a Nana — dijo Silphy.
— ¿Qué le ves a ella?
— Oh, ella es un encanto. Es hermosa, exótica, trae cosas deliciosas de su mundo, besa increíble y es genial en la cama, además ama a Rudy y a nuestros hijos. Ella se enfrentó al Dios Ogro Malta sin tener maná para defender a nuestra familia, y decidió quedarse con nosotros. ¿Cómo no voy amarla?
— ¿Se enfrentó a Malta?
— Sí, ella se quedó en casa al cuidado de nuestros hijos. Cuando Malta atacó, coincidió que nuestro suegro estaba aquí. Él se enfrentó a Malta, pero lo golpeó. Y cuando el Dios ogro estaba por matarlo, Nanahoshi y Leo lo atacaron y salvaron al señor Paul.
— ¿Y cómo? ¿Si no tiene maná?
— Rudy hizo armas de su mundo y entrenó a Nana para usarlas, le dijo Silphy mientras bebía el té .
— Ya veo.
— Así es. Ella estaba dispuesta a dar su vida por sus hijos y nuestra familia, así que agradecería que dejes de mirarla con odio, porque ya me estás molestando, Silphiette de otro mundo, y no quieres verme enojada .
— Uuum, Rudy es lo único que me queda que me hace recordar mi niñez feliz . Siempre he pensado que si él me dejara por alguien, sería por Nanahoshi. Dijo la alterna.
— No estás viendo que nosotros somos felices. Ya deja de temer (...) Además, tu esposo ni siquiera ama a tu Nanahoshi.
— Uuuuf, eso espero.
Mmmmm, Oye, ¿así que tu Rúdeus nunca te desnudó cuando eras niña y no te confundió con un niño? Pregunto la alterna.
— No, como te dije, él me miraba como a su hermanita pequeña y de hecho me lo decía siempre. El muy desgraciado, jajaja. Rudy de niño estaba enamorado de Roxy. Él decía que No, que solo la admiraba, pero se le notaba mucho, y cuando dormía siempre la llamaba en sus sueños.
— ¿Él la ama más a ella que a ti? Preguntó la alterna.
— En esa época sí, ahora no. Nos ama a todas por igual, no hace diferencia entre nosotras. Además, yo también quería a Roxy cuando era una niña. Por lo mismo, soñaba que nos casarariamos los tres y viviríamos felices, dijo Silphy.
— Ya veo. En mi caso, no la conocí hasta que llegó con Rudy de Lapam. Fue un shock para mí saber que me había engañado con ella, pero siempre me imaginé cuando supe que ella estaría en Lapam, que él la traería y se casaría con Roxy. Él siempre me hablaba de ella y de hecho yo lo había autorizado pero el me había dicho que no traería a nadie. Jajaja pero sabes, ahora a Roxy yo la quiero mucho.
— Ya veo. Bueno, lo mío fue diferente. De hecho, Rudy le había propuesto matrimonio a Roxy en Windport, y después se había comprometido con Eris para evitar que la mandaran con Philemon. Pero cuando llegó a la universidad, estaba muy deprimido por el abandono de Eris, y solo pensaba en Roxy y volver a verla, siempre me decía eso cuando me hablaba ebrio , pensando que yo era Fitz.
Además , a Rudy le gustaba su majestad en ese tiempo. De hecho, me preguntó varias veces si estaba soltera. Y como yo le ponía mala cara cuando preguntaba eso, él pensó que yo estaba enamorada de ella, jajajajaja.
— Uuum, eso no me causa mucha gracia, dijo la alterna.
— ¿Por qué eres así? Yo no recuerdo tener ese carácter cuando era niña o adolescente. Bueno, sí, me enojaba y lloraba, pero hablando me daba cuenta de que era demasiado extrema , pero nunca fui tan celopata como tú.
— No sé. Rudy de pequeño me decía cosas como que estaríamos para siempre juntos, que debería ser una esposa ideal, y cosas así. Y entrené y crecí entrenando para ser su esposa.
— Ooooh, ya veo. Él te lavó el cerebro, dijo Silphy.
— No lo hizo, dijo la alterna inflando las mejillas.
— Rudy jamás me decía esas cosas. Me enseñaba magia, jugábamos, corriamos por el campo y me contaba historias. Jamás me dijo cosas así, aunque siempre me afirmaba que yo era su hermanita. Odiaba cuando decía eso, e inflaba mis mejillas porque yo de pequeña quería ser su esposa, no su hermana . Cada vez que me iba a quedar en la casa de mis suegros, esperaba que todos se durmieran y entraba a la habitación de Rudy. Él me quería solo como a su pequeña amiguita, pero yo siempre lo amé.
Sabes Te diré un secreto.
— ¿Cuál?
— El beso con Roxy no fue el primer beso de Rudy. Una noche, poco antes de que se fuera a Roa, como siempre, me colé en su habitación y lo abracé. Él estaba dormido y lo besé en la boca, jejejeje. Pero no le digas, es un secreto.
— Eres una pervertida.
— Somos la misma persona. La diferencia es que tu Rudy te lavó el cerebro, y el mío ponía distancia cuando éramos niños, aunque dándome cuenta de que él recordaba su otra vida, ahora puedo entender por qué ponía esa distancia entre nosotros — dijo Silphy.
— Cuando él se fue, ¿cómo reaccionaste? Preguntó la alterna.
— Casi mato a Paul cuando lo vi tirandolo al carruaje y lloré mucho. Pensé que no lo vería nunca más hasta que me explicaron que había ido a trabajar.
Después del accidente, supe que era tutor de Eris y pensé que lo había perdido. Y peor aún cuando supe por una carta de Roxy que estaba con ella en Windport.
Hasta que un día lo volví a ver, Dios se veía tan guapo y Rudo cuando llego, de solo verlo moke mis bragas jajajaja , y bueno, ahí pasamos por muchas confusiones. Y peor aún cuando lo vi besándose con Nanahoshi en el patio.
— Eso debió ser terrible, dijo la otra Silphy.
— Jaja, sí, lo fue. La odiaba con mi alma, hasta que Rudy me confesó la verdad y por qué seguían siendo amigos aun después de haberse separado. Cuando Rudy se fue a Begarit, Nanahoshi fue muy buena conmigo en mi embarazo, y creo que ahí empecé a quererla mucho. Y míranos ahora, a veces compartimos la cama, ella es tan linda y sensual, y dice cosas tan pervertidas.
— Ya cállate, Perugius escucha todo en este lugar — le recordó la alterna.
— Lo siento, lo olvidé. Jaja, pero como te contaba, cuando llegó la carta de Lapam ya estaba embarazada, así que le escribí a Roxy que la esperaba para que nos casáramos los tres. Así que cuando regresaron no fue un impacto para mí, de hecho, estaba muy feliz de tener la familia que siempre soñé. Y después llegó Eris, Nana, y Ariel hace poco, aunque con ella es complicado ya que es más algo secreto .
— No puedo creer que la perdonaras y la dejaras entrar a la familia, después de saber que violo a tu esposo.
— Sí, sí, estaba molesta por eso. ¿Pero sabes que? Yo habría hecho lo mismo si Rudy hubiera estado casado con ella o con Eris. De alguna manera me habría metido en su cama, incluso si debían recurrir a métodos así.
— Eres una loca — le dijo la alterna.
— Cállate, sé que tú también hubieras hecho lo mismo.
— Uuum, por cierto, es solo curiosidad, pero, ¿cómo es que ustedes están juntas? Ya sabes a qué me refiero.
— Oh eso, simplemente le hago caso a los consejos de mi abuela y hemos sido felices, le explico Silphy.
— Sí, ella nos da los mismos consejos, pero las chicas no se atreven. ¿Tú cómo lo lograste?
— Aaah, pues verás, fue en Dobati con Eris, después de la pelea de Rudy cuando golpeó a Luke.
— Sí, le he propuesto eso a Eris un par de veces, pero ella no acepta a menos que esté Rudy. Solo Roxy a veces acepta, y cuando no hay nadie.
— Ummm, ya veo. Pues simple, dile a Eris que tienes sangre Ferál. Cuando le conté eso a mi Eris, empezó a mirarme de manera diferente y con curiosidad hasta que un día cayó. Ahora ella me lleva en brazos a su habitación jejeje.
— Oooh, ya veo, entiendo, jejeje gracia spor la información, creo que seré más agresiva con esto, dijo la alterna .
Justo en ese momento, llegaron las Eris con Siegh.
— ¿De qué hablabas, mami Blanca?
— Oh, de nada, mi niño. ¿Dónde estabas?
— Con mami Roja y su hermana paseamos por el palacio del padrino Perugius. Es muy lindo aquí.
— Claro que lo es, mi niño — le dijo Silphy mientras su Eris se sentaba a su lado.
— ¿De qué hablaban? — dijo la Eris alterna a su Silphy.
— De nada. Solo hablábamos de mi madre. No sé si sabías, Eris, pero yo tengo sangre Adoldia. Mi bisabuela era Ferál.
— ¿En serio? — dijo la Eris alterna con una sonrisa.
— ¿Qué rayos le dijiste a esa mujer , Silphy? — le preguntó Eris con Siegh en brazos.
— Oh, de nada, solo comparando nuestras vidas — dijo Silphy sonriendo y cerrandole un ojo .
Esa tarde, una vez terminaron de ver las posibilidades, Perugius ya tenía una idea de qué hacer y cómo enviarlos de regreso. Sin embargo, necesitaría unos días y la ayuda de Orsted para ver bien si es que el Hombre Dios no estaba tras de esto.
Y así decidimos regresar a casa.
Mientras caminábamos de regreso, Alex habló.
— El viejo aún está molesto conmigo.
— No lo está. Si lo estuviera, no te habría dejado ir al Caos Breaker, le dije.
— ¿Y por qué me trata así?
— Porque eres un loco, y casi haces ganar la guerra futura a Laplace cuando te pusiste esa armadura, idiota.
— Uuum ya veo , en fin, el lugar es increíble. Dicen que esa fortaleza puede liberar un poder aterrador.
— Sí, imagino que sí — le dije.
Mientras íbamos viajando, Rúdeus hablaba con sus esposas, y Eris y Silphy iban hablando algo con Siegh. Nana iba pensativa.
— ¿Qué pasa, mi amor ?, le dije.
— Nada, solo pensaba en lo que dijo Perugius, que tal vez esa miko tuvo que ver con esto. ¿Habrá hecho algo más en ese futuro que afecte nuevamente esta época?
— No sé. Tal vez se encontró con Akito y trató de enviarlo a tu mundo, amor.
— No lo creo. Akito y yo debemos regresar juntos por el círculo que dejó Perugius. Aunque tal vez deba regresar sola.
— ¿Por qué dices eso? Le pregunté.
— Porque si Akito le pasó lo mismo que a mí y se enamoró en ese futuro, dudo que quiera separarse de esa chica.
— Ya veo. Aunque tal vez esto es solo un problema aleatorio — le dije.
— Sí, puede ser dijo Nana tomándome de la mano.
— Oye, Reidar, ¿y si esto es obra del elfo oscuro de las montañas al norte de Millishion? — dijo Alek. — ¿Y si esto tiene que ver con magia negra o algún tipo de magia que no conoces?
— ¿Por qué ese elfo querría hacer algo así? Pregunté.
— No lo sé. Nunca he sabido por qué hace lo que hace, pero ese tipo maneja magia que está prohibida, dijo Alek .
— ¿De qué hablan? — dijo el otro Rúdeus, que nos escuchó y se acercó con sus esposas. Así que Alex le habló de su teoría, eso dejó a sus chicas algo asustadas.
— Es que eso no tiene sentido. Ese elfo no sale del continente Milis, y no es un apóstol. ¿Por qué haría algo así? dije.
— No lo sé. Es como si buscara algo — dijo Alek.
— ¿Y si busca a alguien? — dijo Nana.
— ¿A qué te refieres, amor?
— No sé. Así como yo buscaba a Akito para regresar, él está buscando a alguien como el Dios de las Técnicas o alguna persona.
— Quién sabe. Pero dudo que esto tenga que ver con el elfo oscuro. Solo debe ser una perturbación del espacio-tiempo — dije.
— Debemos ir a Milis, Reidar, e investigar a ese tipo — dijo Alek.
— Claro que no. No quiero tener que ver con nadie que no sea un apóstol.
— Ufff, qué aburrido. Tal vez le diga a Aisha e iré con ella.
— No llevarás a mi hermana a buscar a ese tipo, Alek.
— Bien, bien. Uuf, ya llegamos — dijo, mientras aparecía la Sharia tras una curva.
Mientras los chicos se ponían sus máscaras, entramos a la ciudad donde nos despedimos de Zanoba y de Alek, que partió a la cabaña. Una vez llegamos a casa, decidimos bañarnos antes de cenar.
Sin embargo, las Eris fueron a entrenar entre ellas un rato.
Después de eso, Eris se bañó y le dijo a la Eris alterna que el baño estaba listo. Sin embargo, se demoró hablando con su Roxy en la habitación mientras se soltaba el cabello, y cuando fue al baño, estaba ocupado.
— Oye, ya sal, es mi turno dijo la alterna .
— Lo siento, Eris, salgo de inmediato — le contestó Rúdeus.
— Ya déjame entrar — dijo Eris, entrando pero apenas podía ver por el vapor.
— Ya voy saliendo, Eris. Tranquila, puedes darte un baño le cambie el agua y puse agua caliente. — le dijo Rúdeus, al que apenas se veía.
— Sí, espera — dijo Eris, parándolo y dándole un furioso beso, además de darle un agarrón al muñeco. — Esta noche me perteneces, ¿oíste?
— Sí, ya lo sé. Déjame ir a vestirme, no quiero que las otras mujeres me vean así — dijo Rúdeus.
Eris se dio un baño, y cuando iba saliendo, se topó con su marido fuera, esperando el baño.
— ¿Qué haces, Rúdeus? ¿No te habias bañado? — preguntó Eris alterna.
— No, amor. Estaba hablando con Silphy. Me iré a darme un buen baño, esta noche serás mía — dijo el japonés dándole un beso , entrando y dejando a Eris alterna muy confundida.
— Pero si ya se había bañado, ¿pero si Rúdeus no era quién? ¡Demonios! AAAAAAAAGH — dijo Eris, agarrándose la cabeza, dándose cuenta de lo que había pasado.