Bella y la Bestia

—Rowena quería decir que sí, pero entonces su mirada y oídos se fijaron en algo en la distancia. Era un edificio precioso y elegante, un número de personas se había reunido allí, todas alineadas.

Un gran número de las personas que estaban alineadas parecían pertenecer a la clase más rica y noble. Hombres y mujeres con atuendos más finos de lo habitual esperaban a pesar del sol de la mañana, algunos con parasoles protegiéndolos y otros simplemente abanicándose.

Había algunos carteles pegados en el exterior, con colores de buen gusto y vibrantes que atraían las miradas. Mientras que la mayoría de la gente celebraba el festival pasando un día bajo el calor del sol exterior, estas personas intentaban entrar en algún lugar alejado del resto.

—Atrápalo solo por un día: ¡el mejor espectáculo que jamás presenciarás en tu vida! —un joven chico iba alrededor del resto de la multitud, mostrando un cartel similar, pero entonces el chico se detuvo frente a Rowena y Rafael asombrado.