Audacity

—Silencio.

—Un silencio intenso y ensordecedor tomó control del bosque mientras las palabras de Atticus resonaban en el aire.

—Atticus no había dicho nada nuevo. De hecho, excepto por unos pocos cambios de palabras, esencialmente había repetido la misma amenaza que el Gran Anciano Yorowin había pronunciado hace apenas unos momentos.

—Pero para todos los presentes, el contenido de las palabras no era lo que provocó una ola de incredulidad entre sus filas.

—No.

—Era la audacia.

—La arrogancia.

—La pura y firme negación irradiando del chico de 17 años.

—Ninguno de ellos podía concebir cuán abrumadoras debían ser esas cualidades para que alguien tan joven lanzara tales palabras a Yorowin.

—Un Gran Anciano de la raza Vampyros.

—Los Vampyros tenían muchos paragones, pero se podían dividir en dos categorías: los fuertes y los verdaderamente fuertes.