La noche fue un desmadre total por la muerte del general, y si, soy responsable de aquello, no fue mi intención, le dije a Lay que no se preocupara por lo que sucedió y ella estaba de lo más tranquila por haber matado sin querer al general Fernard.
Buscaron por mar y tierra de manera figurativo claro está, quien habia sido el que mando el mensaje a su tienda, al principio pensaron que era un ataque enemigo, pero las flechas eran las mismas que utilizaban en nuestro ejercito así que sabían que habia sido alguien de por aqui.
Por una extraña razón el Ogro me miraba con rabia, como si supiera que yo habia mandado el mensaje, pero no me interesaba, si el quería atacarme ahora, me daría una escusa para matarlo, lo esperaba, lo deseaba, aun así no hizo nada.
Simplemente se calmo y mando a un grupo a buscar si encontraban a quien hubiera desparado la flecha.
Despues de ese revuelo no hubo más movimiento hasta que llego el otro día, estaba incluso más nervioso que la vez que me toco luchar en la pradera y eso era porque tenia a Hero a mi lado, tenia mucho miedo de perderla, además entendía porque no teníamos ni un avance en esta batalla, el rio que de ancho tenia unos 20 metros y facilmente en su parte más honda un metro y medio, y además que la fuerza del rio era lo suficientemente fuerte para dificultar el paso, así que la pregunta era, ¿Por qué mierda no buscábamos otra lado para invadir?
Aun así ¿no seria mucho mejor retar al Nórdico en un ataca singular?
-¿A todo esto como se llama el Nórdico que gobierna esta zona Will?
-Erik Magnusson, Gran, creo que así se llama.
-¡¡Puta madre, Gran!! - Exclamo Hero.
-¡¡Erik el rey, me estas diciendo que él es el rey de Noruega!!
Will me miro a los ojos como si no le sorprendiera que lo supiera.
-En efecto, pero es un ex rey, hace tiempo perdió el trono, luego fue exiliado hasta acá, mato al anterior "Nórdico" que gobernaba todo y quedo él como líder.
Nos miramos con Hero, creo que ninguno entendía muy bien como ese tipo estaba acá, enserio habíamos mandado la historia al carajo, y ya no debería sorprenderme, pero esto era irrisorio, un rey que debería estar gobernando noruega, si el no estaba ahí, ¿entonces quien gobernaba esa país?
-Gran, no hagas nada estúpido, es lo unico que te pido, despues averiguaremos lo que esta sucediendo.
-Entendido amor, pero va lo mismo para ti sin hacer tonteras, yo te protegeré de todo y tu me protegerás, esposa mía.
-Dios... si quieres llevarme a la cama este no es el lugar amorcito. - decía embobada Hero.
Esa estupidez me hizo reír, al menos logro que soltara el estrés que sentía que tenia encima.
-Escúchenme pedazos de mierda, crucen el rio, quiero que me traigan las cabezas de esos sucios paganos, vamos que esperan que Dios baje y les de permiso, muévanse putas. - gritaba el Ogro.
No nos movimos, prefiramos esperar un poco, ya que, el ogro tampoco cabalgo hacia el rio, pero mucho de los que fueron terminaron murieron. Estábamos en la peor posición posible, y el desgraciado disfrutaba ver como morían los nuestros.
No lograba comprender porque hacia esto... y en el momento que me di cuenta del porque, casi vomite, por lo horrendo que era.
-Amor, ¿Qué te sucede? ¿estas bien?
-Hero fíjate en el río, al ogro no le importa que mueran, lo que esta haciendo es rellenando el río con cadáveres, para poder cruzarlo.
Vi al grupo de Wick que iba directo a entrar al río.
-Señor Wick, deténganse. - Grite.
Ellos se detuvieron a mitad de camino, si no es porque les impedí que avanzaran hubieran muertos por flechas enemigas. Me dirigí hacia ellos en el acto.
-Señor Wick, no prosigan, desde ahora estarán a mis ordenes. Necesito que me digan cuanta profundidad tenia el rio, y ¿Cuántos días llevan así?
-Gracias por eso Sir Gran, y el rio tenia unos tres metros de profundidad, matamos a muchos y creo que se dio cuenta ya, pero levamos tres días teniendo más perdidas nosotros que ellos al intentar cruzar por acá.
Cabalgue hacia al Ogro, esto ya pasaba lo racional, tenia que impedir que esto siguiera así, esto era una maldita locura.
-¡¡Ogro!! - gritaba enfadado, pero Willfest junto con Lay me cortaron el paso.
-No es el momento Gran, no aqui, se que es horrible lo que esta haciendo, pero es el comandante, no podemos hacer nada, pero si todo sale bien, ese desgraciado ya no seguirá con vida para ver otro amanecer, así que aguántate hombre.
-Gran, padre tiene razón, estas apoco de perder el control, se que es horrendo esto, incluso para mi, pero por ahora sigamos sus ordenes.
No me quedo nada más que rechistar, porque no podía mas con ello, apenas estaba pudiendo aguantar todo esto, estaba molesto, por poco y dejo salir mi mayus, pero tenia que mesurarme.
Finalmente no entramos al río, y podía darme esa facultad por ser un Sir, al menos que el Ogro me lo ordenara directamente y solo se dedico a verme con una sonrisa en la boca. Las horas transcurrieron así por un largo rato, donde nuestros hombres morían mucho más que los de ellos.
Nuestros enemigo ocupaban largas lanzas, arcos y algunos poco esperaban en la orilla para matar a los que lograban cruzar. Haci fue como en el día perdimos más de 230 hombres.
Para todos ver esto fue macabro, algo inhumano, incluso logre reconocer algunos rostros de los compañeros con los que luche en la pradera, y ahora los veía morir aqui...
De repente de la nada vi como un torso enemigo salió volando, los gritos del lado enemigo se hicieron presente, y casi todos se giraron a ver que estaba sucediendo, hasta que el miedo se calo en mis huesos recordando aquel día donde pense que iba a morir.
Una guadaña estaba matando a diestra y siniestra una velocidad vertiginosa. Un mar de cuervos comenzaron a teñir el cielo, que atacaban a quien se cruzara su camino.
Todos quedamos atónitos ante la figura femenina que mataba hombres como si recogiera grano de maíz; y yo mirando con una especie de asco y regocijo por ver a mi Diosa ayudarnos.
-¿Gran es?
-Si Lay, es Morrigan.
-¿Tenemos que luchar contra ella?. - Pregunto Will nervioso
-No creo Will, o eso espero, porque aqui si que no podremos hacer nada contra ella. - dije sabiendo el resultado antes de intentarlo.
-Tenia que ser hermosa también, o mejor dicho diabólicamente bella, ¿Puedes dejar de rodearte de mujeres hermosas, Gran? - protesto Hero.
Yo la mire directamente a los ojos que me juzgaban de mi amada.
-La belleza de Morrigan siempre me hizo acordar a ti, Hero, no puedo explicarlo, pero es como si te viera a ti y a...
-Velaria, pero para mi es como verte a ti y a Velaria, Gran... y dejare pasar el comentario de que la encuentras bella, simplemente porque me comparas con una Diosa, chico con suerte.
Me extrañaba que me digiera que ve que se parece a mi, lo que encontraba curioso.
-¿Lay como ves a Morrigan, a quien se parece para ti?
-Para mi luce como Amelia con rasgos tuyos Gran.
La mitad de esa respuesta no me la espere para nada, pero creo que estaba comenzando a comprender.
-Will, Roy y Amelia, podrían decirme con que aspecto ven a Morrigan.
-Yo veo a alguien parecida a Babette y a mi ex esposa. - respondió a Will.
-Para mi se parece a Monic, pero es extraño, es como una versión más adulta de ella, con un semblante diabólico. - contesto Roy.
-De que hablan, si se parece mucho a Lay, solo que sin su bello pelo plateado, sus cicatrices, y con más cuerpo. - dijo finalmente Amelia.
Lay miro a Roja, como si le preguntara con su mirada a que se refería con más cuerpo, creo que no escogió las mejores palabras la pobre. Pero ya entendía, veíamos a Morrigan probablemente a lo que nosotros considerábamos bello, o tal vez de quienes nos gustaran.
Desde el otro lado del río mis ojos se cruzaron con la Diosa, que estaba perdida en un eufórico placer, casi como exitada sexualmente, ella no paraba de matar personas, sin que nadie pudiera hacer mucho, hasta que un hombre llego donde ella con un hacha la cual bloque facilmente con su guadaña.
Ella nuevamente se giro para verme a mi con un rostro complacida, y como por arte de magia desapareció frente a todos.
-Gran, el es Elric, el nórdico. - dijo Will.
-Si, por alguna razón me lo imagine Will, creo que ella desea que luche contra él...
Cabalgue hacia el río para quedarme en su borde y grite.
-Elric, detengamos esta locura, yo Sir Gran, te reto a un duelo singular por tu corona, ex rey de noruega, podemos evitar tener más perdidas sin sentido, ¿Qué dices?
-Por qué debería enfrentarme a alguien sin honor muchacho...
-Créeme Elric, ese joven, tiene bastante honor, no pierdes nada con enfrentarlo, además lo vi luchar, ese de ahí fue quien le gano a Sir Arthur el cruzado. - dijo apareciendo Bruce por el lado de ellos, de quien nos habíamos separados antes de llegar al campamento.
Eso era una real mentira por parte de Bruce, pero gracias a eso Elric tomo interés en mi.