—El almuerzo en Brander's fue bien, donde Ariel fue la que más habló —comentó George
—George había estado enterrado en trabajo últimamente. No solo en trabajo, sino también en Anaya Jakes, apenas logrando hacer tiempo para su amiga de infancia, pero ahora, ella llenaba ese espacio hablando sobre sus amigos y la universidad —explicó el narrador.
—Su voz burbujeaba de emoción, cada vez que mencionaba a este específico y guapo profesor —añadió con un gesto observador.
—Eres bastante popular entre mis amigos. Piensan que te has vuelto más frío, más despiadado... Hablas menos... sonríes raramente —le contó, haciendo girar el último sorbo de vino en su copa antes de tomar un sorbo lento.
—Su alta estatura se reclinaba en su silla, todo relajado, mirándola perezosamente mientras sostenía una copa de vino en una mano. La estudiaba con una expresión divertida —describía la escena.