Thane miraba con asombro la escena sangrienta frente a él, incapaz de hablar o moverse, solo observaba.
—Hmm, vamos, envuelve su cuerpo, lo necesitaremos —ordenó su líder, ignorando su presencia.
—¿Qué has hecho? —jadeó, sintiendo un ardor en los ojos ante la vista.
—Eso no es asunto tuyo, y no te concierne —dijo él, rodando los ojos.
Thane estaba debilitado, ni siquiera había pasado unas cuantas noches con Carmilla, y ya había sido asesinado.
—Te perdiste el drama —se rió uno de los pícaros.
Thane estaba más que enojado, estaba furioso, amargado e impotente en ese momento. ¿Significaba esto que Archi era mejor que él en todo? Aún no había encontrado a la madre de su mejor amigo, y ahora no podía salvar a su amigo de su propia especie.
Tomaron el cuerpo de Thane y lo colgaron sobre su hombro, —Adiós, nos vemos —sonrió y trató de pasar por su lado.
Thane lo atrajo hacia atrás y con una fuerza que no pudo explicar, lo empujó haciéndolo chocar contra la pared.