No quería levantarme, ni me habría despertado en primer lugar, de no ser por la alarma, decidí posponerla 5 minutos, los cuales no acabé notando, ya que, en un instante, otra vez estaba sonando. Aunque suena un poco raro, es como si me estuviera llamando alguie-
“Quieres levantarte por el amor de dios?!”
Después de escuchar eso es cuando noto que me falta la manta, la almohada que estaba abrazando, y que mi hermana me esta clavando la uñas en los hombros.
“Es-espera! Y para ya, Amaya!”
Por lo menos, al pedir clemencia, mis palabras son escuchadas, y por fin el dolor cesa… O eso diría si no me las hubiera clavado tanto tiempo…
“Te he dicho que dejaras de hacer eso, imbécil de mierda”
“Siento mucho que a Blancanieves no le de la gana despertar.”
Todavía estoy demasiado dormido como para reprocharle eso, por ahora lo dejaré pasar…
De ahí me levanté de la cama, y empecé a sacar la ropa para vestirme.
En verdad, no tengo mucha variedad, son todo camisetas, sudaderas, y pantalones normales.
No es mi culpa tener tan mal sentido de la moda, aunque sí lo sea.
“Ah, y ha dicho papá que como no desayunes te va a quitar el ordenador. Así dejas de ver animes porno...” dijo mi hermana, que todavía estaba en mi habitación después de tal violación a mis derechos.
“Y porqué lo dices como si tu no lo vieras?”
“Buen punto…”
Tampoco hace falta ser tan honesta, hay MUCHAS cosas que no quiero saber de ti, amiga mía.
De paso, ignoré completamente lo otro que me había dicho, aparte de ignorarla a ella también.
Mientras pasaba de su cara, abrí mi armario, cogí una sudadera color beige y unos pantalones al azar.
Ahora ya puedo empezar a vestirme. Empecé a quitarme los pan-.
Qué hace Amaya que no se va?
“Te ha dado por ser norteña ahora?”
“Solo estaba pensando otro insulto que decirte, pero me rindo” Suelta Amaya, con un todo de decepción.
Ah, pero no se va sin decir un comentario innecesario, ahora hasta sonriendo. “Tampoco es como si mereciese la pena ver la “pena” de bicho que tienes ahí abajo”
Lo dijo con un tono burlón, cómo no, para ya después irse de la habitación y cerrar la puerta.
Antes de que se fuera, lo único que me da tiempo a hacer es suspirar.
Y que conste que ya sé que la tengo pequeña.
No me llevo mal con mi hermana, es más, sin duda alguna es la relación más valiosa que tengo.
Amaya es la mayor por 3 años, así que estamos más o menos en el mismo nivel, además de que compartimos bastantes gustos y humor.
Ella dice que yo se lo pegué, aunque seguramente ella habría sido como es ahora si no estuviera yo, solo que no podría enseñarlo.
La única desventaja de su existencia es que abusa físicamente de mí, aparte de que mis amigos se pueden meter con ella o decir que mi hermana nos hará familia.
Tampoco es como si Amaya y el resto se llevarán mal, hay veces que hasta le da por salir con el grupo también, pero mayormente se vicia en su cuarto.
Yo hago prácticamente lo mismo, solo que salgo más que ella, eso creo.
Salí de casa junto a Amaya y cogimos el tren juntos.
Por suerte, esto es lo único que yo tengo que hacer para ir a clases, ya que hay una parada cerca de mi instituto. Pero Amaya tiene que hacer piruetas para ir a la preparatoria, según ella, claro.
Llevaba solo una semana del segundo trimestre, pero ya estaba cansado, mi cara lo decía a gritos.
Bueno, mentira, siempre tengo una cara cansada y un tono de voz calmado/débil, todo el que me ve por primera vez me pregunta si estoy bien, mi madre me lo preguntaba a diario.
Ya me he puesto de mala hostia solo con pensar en eso…
En cuanto llegué a la entrada, pude ver a un grupo familiar haciendo el tonto.
“Hermano, me debes una cena desde hace casi un mes! Como no lo traigas mañana, te voy a cobrar impuestos!”
“Estas tú, jajaja. Los 3 sabemos que yo fui el que ganó esa partida”
“No te lo crees ni tú!”
“…”
Ya está otra vez =@º\’ diciéndole a &$%”! que le devuelva el dinero?
Llevan así una semana, pero me sigue haciendo gracia.
Aunque me hace más gracia que _¨*^?¿· esté simplemente mirando al suelo como si su vida dependiera de ello.
No es como si yo no hiciera lo mismo, pero bueno.
“Hey”
“Ah, halo halo!”
“Hola”
“H-hola”
Como de costumbre, el resto del día pasa como cualquier otro.
Si no fuera porque en 4 días vamos a ir a una convención de anime.
No voy a decir mucho por ahora, pero estoy muy emocionado por ir. Es la segunda vez que voy algo así, y tengo ganas de ir desde que empezó el verano, aunque solo va a ir &$%”! , al resto no le gustó la otra vez que fuimos.
La verdad, sería 10 veces mejor que mi hermana viniera, pero dice que no quiere, y aunque le de la lata con ir, al final siempre decía que no. Dejé de preguntar después del cuarto intento.
Quedan 4 días de clase todavía…
Las clases suelen ser aburridas. Lo único interesante es una discusión sacada de un manga sobre que un pringado le debe 1000 yenes a un chaval.
Que situación tan familiar. Estará de moda deber dinero a otros.
Cualquiera podría pensar en tener un típico día que podría ser sacado de un manga o anime de comedia o romance, pero la vida no suele ser tan entretenida.
En mi caso, es todavía más difícil tener algo así, ya que =@º\’ suele jugar basketball en el recreo. Aunque la culpa es igualmente mía, al ir siempre a la biblioteca.
Literalmente solo la usa una chica, creo que se llamaba Tsukiyomi. Nunca he hablado con ella, y nunca lo voy a hacer.
Ambos sabemos que el otro existe, pero nunca hacemos nada al respecto.
Y esa fue la única parte interesante del día.
Leí cualquier cosa, y cuando toca el timbre, vuelvo a clases. Los cambios de profesor entre clases son cortos, por lo que casi ni podemos hablar.
Es un desperdicio, ya que este año estamos los 4 en la misma clase.
Después de otro día tan productivo y entretenido de clases, cogí el tren para volver a casa.
Desde hace tiempo, tengo la costumbre de escuchar música. Siempre lo hago a la vuelta. A =@º\’ y a &$%”! les recogen sus padres, y _¨*^?¿· no necesita coger el tren, por lo que no tengo a nadie con quien hablar.
Hablando de hablar, me sorprende como solo soy capaz de sacar tema de conversación con Amaya.
Incluso teniendo gustos similares, uno se queda sin tema al cabo de un rato. Ahh, que bonita es la magia de la hermandad!
Hablamos sobre todo de videojuegos, anime, y series, aunque de vez en cuando ella habla sobre cosas más “serias” como las noticias o cosas menos raras, por así decirlo.
Parezco un Siscon diciendo esto…
Uno solo puede suspirar después de oír un monologo así en mi cabeza.
El resto del día fue aún más normal.
Comí, me encerré en mi habitación, hablé con mi hermana un rato, leo, juego a algo, y luego a dormir.
Siempre que lo pienso, tengo una vida un tanto aburrida si uno lo mira desde fuera.
Al final, que tendría de interesante leer como un chaval se mata a pajas y desperdicia su tiempo?
Yo no le veo la gracia, aunque tampoco puedo decir mucho. Hay cosas mucho más raras ahí afuera.
Seguramente Amaya sea una de ellas.
Después de la cena, mientras leía una novela, Amaya entró a mi habitación, y por alguna razón se me quedo mirando sin decir nada.
“Soy más feo de lo normal, o menos guapo de lo usual?”
“Probablemente ambas”
Me da pena tanto que tenga razón como que no le pueda decir lo mismo.
Lo digo en serio, si algún día consigo novia, que sea igual de guapa que ella, pero sin compartir mi sangre, por favor.
“Y vienes a algo más a parte de eso?”
A partir de ahí pongo un marca páginas en el libro, esperando a ver si en verdad quiere algo o no.
“… N-no, solo quería ver si estabas bien…”, lo dijo con una voz un poco tenue y tímida, aunque no estaba roja ni mirando a un lado, “Es una tontería, de verdad...”
“Y cuál es esa tontería?”
“… Em.”
“Si?”
“Puedo dormir contigo?”
“Y la cámara oculta donde está?”
“En ningún lado!”Dijo, ligeramente irritada, “Solo que… Llevo sin dormir bien un tiempo, y he estado probando cosas para dormir mejor, y…”
“No hace falta que pongas excusas. Solo dí que estás enamorada de mi, y-”
“Sabía que no debería de haber preguntado…”, y ahí se fue su vergüenza, ahora solo suena irritada y asqueada. “En verdad sentaría bien que de vez en cuando hablaras como una persona normal”
“Vale, si, perdón.”
“…”
“…”
“En-entonces, que dices?”
“Mh?
Ya me había olvidado de eso.
“Ah, bueno… no es que no me importe, pero a la vez no me importa.” Dejé a un lado las bromas, y en el momento en el que consideré lo que dijo, me sentí un poco confundido.
Continué hablando,“Es algo raro. No el que me lo pidas en general, pero el que me lo pidas con la edad que tienes ahora.”
No me importa que duerma conmigo, no le tengo asco ni nada. Lo único que me puede molestar es pues eso, que es mi hermana, y ya tiene 18.
Y no lo digo porque sea un cerdo que la va a manosear por la noche! Es simplemente raro. Aunque, puede que sea una broma.
“Pero lo estoy diciendo en serio! En verdad quiero probar si funciona o no.” Vaya manera más rápida de resolver mi duda.
“Si, si. Puedo creerte. Ya me has despertado por las noches lo suficiente como para creerte, sobre todo de pequeña.” Más de una vez me ha jodido la noche entera. “Pero si funciona, planeas dormir conmigo todos los días??”
“Ehh… bueno, no. Pero puedo simplemente copiarte…”
“Copiarme?… Ahhh, vale.” Se me sale la sonrisa sola al saber a lo que se refiere. “Y luego te burlabas de mi”
“N-no hace falta que me lo eches en cara…”
Después de eso ella se fue a su habitación, dijo que tenía deberes sin hacer, y que no estaba segura de si en verdad iba a venir o no.
Al caer la noche, y después de haber cenado, ella se presentó en mi habitación de nuevo.
Yo estaba tumbado encima de la cama, mirando el techo. Estaba haciendo el arte secreto de aburrirme. No es la primera vez que me pasa.
Instintivamente, mi hermana miró hacia arriba, al ver mi gran interés por los cimientos superiores de mi hogar.
“Wow, el techo está hecho de techo.” Comentó, con un tono de sarcasmo en su voz.
“Y tus pechos de plástico.”
“Por lo menos yo sí que tengo algo que hacer, en vez de mirar al techo!”
“Ah, entonces sí son de plástico?”
“No! No lo son!”
“Ya veo. Pues por algo son tan pequeñas.”
“Te voy a meter una patada en algo que es mucho más pequeño.”
No creo que haga falta decir que Amaya ya se estaba arrepintiendo de abrir a puerta.
“Bueno, entonces que vas a hacer?”
“… Siquiera puedo?”
“Si. No te preocupes.”
“Como me hagas algo por la noche te voy a matar, y luego me voy a chivar a papá.”
“Tan mala imagen tienes de mí?!”
“Mala se queda corto. Igualmente, no tienes tú una mala impresión de ti mismo en primer lugar?”
“He dicho muchas veces que usar ese tipo de cosas que te cuento no valen!”
“En la guerra todo vale!”
Amaya ya llevaba puesto el pijama, y yo lo tenía puesto desde que comí, al llegar de clase.
“Pues también valdrá el echarte de mi habitación.”
“No, eso no.”
“Ok, pero duermes en el suelo.”
“No ibas a hacer eso tú?”
Mientras nos tirábamos bombas el uno al otro, ella se acercó a mí y se sentó en mi cama. Yo todavía estaba tumbado.
“Vas a irte a dormir pronto?”
“Estaba pensando en hacerlo ahora.”
“Dormir por no tener nada mejor que hacer?”
“Si… De verdad que odio haberte contado tanto sobre mí.”
“Pero ahora no lo he usado con mala intención!”
Desde que ella entró, el cuarto se sintió mucho más cálido que antes. Hablar de manera tan casual es tan divertido…
“…”
“…”
“… Entonces, podemos dormir ya?”
“Si quieres.”
“Ok. Ahora quítate, que no quiero estar en el borde.”
“Encima que te dejo…”
Ante la petición de la señorita, me levanté de la cama para que ella se metiera en ella.
“Verás como me levanto tirado en el suelo…”
“Confía en mí, esta vez no lo voy a hacer!”, dijo mientras se arropaba.
“Oye, que me tengo que meter yo también.”
“Pues metete rápido, que si no entra el frío.”
“De qué frío hablas, si te acabas de meter!”
Tal y como hizo ella antes, me metí dentro de la cama. En el momento en el que lo hice, ella se dio la vuelta, para darme la espalda.
“No has tardado nada!”, dije sorprendido.
“N-no quiero verte tumbado en la cama!”
“Si, eso no lo niego.”
“Tú te morirías por poder ver a alguien como yo tumbada contigo en la cama, no mientas!”
“...Eso tampoco lo niego, pero eres mi hermana, así que no cuenta!”
“Eso espero.”
Ahora no tengo nada de lo que preocuparme, ya que nos estamos dando la espalda, aunque casi ni teníamos espacio.
Mi cama era un poco pequeña, así que nuestras espaldas obligatoriamente se estaban tocando.
Que conste que yo estoy abrazando un cojín, y que en ningún momento voy a soltarlo, o me voy a dar la vuelta.
Lo que me preocupa es como vamos a despertarnos.
No porque alguien le meta mano al otro, o por despertar en el suelo, pero ambos nos movemos mucho por la noche.
A lo tonto podemos acabar uno encima del otro, o una haciendo el pino mientras el otro se pone de soporte.
Nos pasaba de pequeños, aunque, eso mismo. Éramos muy pequeños para pensar en estas cosas.
Aunque ella sí se molestaba si me despertaba tirado encima suya.
De todas formas, ambos nos dormimos relativamente rápido.
1.
No podía quitarle ojo a lo que tenía en frente. Tenía que llamar a alguien, pedir ayuda.
Tenía miedo, estaba desesperado.
Estaba rodeado de oscuridad.
Pero en esa oscuridad, una luz se acercó a mi, una luz en forma de mano me acarició la cara.
Podía sentir lo cálida que era.
Gracias a ella, la oscuridad se disipó, y solo quedaba yo.
Pero, antes de poder darle las gracias…
Mi alarma estaba sonando. Como siempre, a la misma hora.
Me duele la espalda…
Lo que no es como siempre es que me han cambiado mi glorioso, pero a la vez traicionero colchón con un liso, duro y frío.
“…”
Me levanté poco a poco del suelo, ya que si lo hiciera del tirón me arruinaría más la espalda.
Cuando me puse de pie, apagué la alarma, y miré fijamente a la razón por la que mi despertar a sido tan poco agradable.
Esta ocupando toda la cama, con la sábana enrollada en sus piernas, abrazando la almohada, con media camiseta levantada, y con el sujetador quitado sobresaliendo de debajo suya…
En fin, como la despierto?
Puedo hacer literalmente lo que me salga de la polla, así que como una persona con una decencia mínima, simplemente la agito.
Ahora que lo pienso, como coño se ha quitado el sujetador?
No quiero saberlo...
“Vamos, Amaya…”
Empecé a agitarla un poco más fuerte, hasta que se despertó.
“Mhhhh…” después de un tenue gruñido, ella bosteza para luego darse cuenta de que soy yo el que la está despertando.
“… Porque me estás despertando?”
“Porque te has quedado dormida, quizá?”
“Joder, ya no me voy a poder duchar…”
Al parecer se ha dejado el móvil en su habitación, y por eso no se ha despertado antes.
De todas formas, no creo que su alarma la habría despertado.
Amaya se sentó en la cama de manera un poco perezosa, y al apoyar sus manos detrás de ella, en al cama, tocó directamente su sujetador.
Ella se quedó en blanco un momento, y luego empecé a temer por mi vida a pesar de que no he hecho nada.
“...”
“Bueno, pero y este regalito de aquí? Dime, por qué no tengo esto puesto?”
Ese tono no me hace gracia, hermana.
“Como voy a haberte quitado eso si probablemente habré dormido más que tú! Además de que he dormido en el suelo.”
“… No fe fio, pero aún así, tienes razón”. Por lo menos se ha calmado.
Después de eso, me dijo que al final dormió bien, solo que se encuentra con el ánimo bajo.
Le estará bajando la regla o algo. Mejor no me meto con ella hoy.
Y así hice, hasta llegar al instituto.
No es que no hablemos de nada, pero, como siempre, son cosas irrelevantes, y solemos hablar poco.
Esto no es una novela en la que una chica nueva viene a clase, o una comedia romántica entre enemigos.
Igualmente, sería un rollo estár aquí sin amigos.
...Me sabe muy mal lo que he dicho…
Seguramente así sea como se sienta ella.
Siempre me ha preocupado que Amaya no tenga amigos, y lo pienso de vez en cuando.
Ella al final es alguien tímida, pero a su vez no muestra mucho interés por intentar conocer a gente nueva, igual que yo. Espero que le esté yendo bien en la preparatoria.
También me gustaría ayudarla, pero al final solo le doy más problemas.
Siempre acabo desahogándome yo, y siempre es ella la que me consuela.
Por algo me conoce tan bien. Soy como un libro abierto cuanto estoy con ella.
Es una mejor persona de lo que yo siempre seré.
No se merece estar sola. Aunque tampoco veo que le afecte mucho, pero también está un poco más cerrada que de costumbre.
No confiará en mi lo suficiente? O será porque no quiere hacerme daño o molestarme?
Seguramente sea por la segunda. Y, si no me ha dicho nada, será porque está bien. Yo confío en ella.
“…”
Sin previo aviso, alguien puso su brazo encima de mi hombro.
“Hey”
“Ah, hola”
Es &$%”! , y detrás de el están =@º\’ y _¨*^?¿· .
“Qué pasa? Estás más embobado que _¨*^?¿· , acaso no has dormido, o todavía estas pensado en la pregunta de ayer?” Dijo &$%”! con un tono de burla.
“Ah, no, solo estaba embobado”
“Ya podrías decir algo más divertido…”
“Como qué? Que el otro día te vi en el patio escondido leyendo un manga ecchi?”
En cuanto dije eso, =@º\’ empezó a reírse, _¨*^?¿· solo sonrió un poco.
“Sabes que no tengo nada así”
“Entonces que es lo que hay escondido en tu cajonera?”
&$%”! se quedó callado un momento, no estaba avergonzado, pero si molesto.
“Debajo de tu colchón, en la esquina superior.”, &$%”! respondió con una amenaza aún más grande.
Ahora, hasta _¨*^?¿· se estaba riendo, aunque, en mi defensa, solo un poco!
Con una cara seria, extendí mi mano, ofreciéndole un estrecho de manos a &$%”!.
“Dejemos esto en empate”
Él lo aceptó, y respondió también con un tono serio.
“No, gano yo.”
“Tercer cajón, debajo de toda la basura que tienes ahí dentro”
Al decir eso, empecé a sentir como me aplastaban la mano. Qué descortés de su parte.
Solo por ser yo, ya me dolía el doble de lo que debería. No me gusta ser débil, pero no me voy a esforzar en cambiarlo.
“Creo que me parece buena opción lo de dejarlo en empate”, dijo con una voz serena y amigable.
“Vale, vale, perdón. Pero para ya!”
A pesar de que fuese verbal, no sé porqué me meto en este tipo de peleas.
Al final siempre acabo perdiendo. Que con el cuerpo que tengo normal. No está bien abusar de la gente físicamente!
A cuarta hora, antes del descanso, teníamos una “clase general”, que de clase poco tiene, ya que era como un recreo extra.
La gente no podía levantarse, pero si hablar. Todo esto gracias al profesor, que no hacía nada. Se agradece su arduo trabajo.
De mis amigos solo tengo cerca a &$%”! , que está detrás mía. Al menos =@º\’ y _¨*^?¿·están juntos también.
Estaba leyendo, en vez de hablar con &$%”! , ya que él estaba haciendo los deberes de ayer, y de paso los de hoy.
Obviamente, estaba leyendo una novela ligera. En ese punto, daba por hecho que todos tenían una mala imagen de mi, y no me importaba.
En medio del ruido, de manera inesperada, el profesor alzó la voz.
“Todos silencio un momento!”
La clase se calló casi al instante, no sonaba enfadado, pero sí intimidaba un poco.
“Sabéis que os dejo esta clase para relajaros un poco, pero de vez en cuando hay que trabajar. He sacado una ficha para que-”
Toda la clase cortó al profe con un abucheo en coro, y el profe mandó callar de nuevo.
“Ejem. La ficha trata sobre que queréis hacer en vuestro futuro. Ser honestos, porque esto luego se lo daré a vuestro tutor.”
Y así fue repartiendo las hojas una a una. La verdad yo estaba dudando entre dejarla en blanca.
“Qué vas a poner tú, Riku?” dijo la voz detrás mía.
“Ah, pues probablemente ponga que no sé, o algo por el estilo”
“En serio no sabes que hacer todavía?”
“Tampoco es que vaya tarde, o sea muy urgente. Además, seguro que no soy el único”
“Si no fueras el único habría más gente que no estaría escribiendo en la clase”
Después de que &$%”! dijera eso, eché un vistazo a la clase.
Me dí cuenta de que literalmente todos están escribiendo excepto nosotros dos.
“Y tú sabes de lo que vas a trabajar entonces, &$%”! ?”
“Puede que me vaya a algo de cine o fotografía. Ya te lo he comentado varias veces, no?”
“Es verdad…”
Más de una vez me he puesto a buscar algún trabajo al que pudiera ir que me gustara, porque no voy a ir a algo que haya que estudiar mucho, o que se me haga pesado.
No porque me vaya mal en los estudios, pero porque para hacer eso, mejor me pego un tiro.
Al final acabé mintiendo en la hoja, puse que iría a algo sobre economía, que sinceramente es lo que creo que más me podría gustar. Dentro de lo que cabe, claro.
Esto puede parecer irrelevante por fuera, pero es de lo que más me preocupa.
Últimamente, noto que no estoy llegando a nada. Qué será lo que tengo que hacer para dar con eso que tanto me gusta?
Más tarde, al acabar la clase, los 4 fuimos al comedor.
Normalmente, cuando nos juntamos los 4, salimos al patio, pero hoy, ni &$%”!, ni _¨*^?¿· habían traído comida.
_¨*^?¿· normalmente no come en el recreo, pero hoy tenía más hambre de lo normal. A &$%”!, se le había olvidado y ya.
Decidimos en quedarnos aquí, ya que estábamos. Afuera hacía mucho calor.
“Oye, &$%”!. Te has comprado el ‘Super Smash Bros’, o todavía no?”
“No. Tantas ganas tienes de jugarlo?”
“Si!”, Dije entusiasmado, “Quiero daros palizas a todos, como en la entrega anterior!”
“Claro, como no puedes ni con _¨*^?¿· en persona, prefieres humillarnos jugando.”
“Ehh, no, yo creo que sí que me gana en una pelea, =@º\’ “
Siempre que quedamos, lo hacíamos en casa de &$%”!.
Sus padres son muy amables, y era el que tenía todos los juegos multijugador.
A veces solo quedamos para estar un rato allí. Nunca voy a rechazar un lugar en el que sentarme, y en el que estar cómodo.
“Me sabe mal pedirle a mis padres otro juego más. Ya van como 3 este mes”
“Pero lo hemos pagado entre todos! Y además, tu parte la has sacado de tu ahorros.”
“Bueno, si me animo, les preguntaré ho-”
De repente, alguien le dio un golpe a una mesa mientras gritaba.
“No me hace ni puta gracia!”
La cafetería parecía un funeral. Todos estaban mirando a la dirección de donde venía el grito
El que pegó la voz era un chaval. Seguramente uno de los que han repetido una o dos veces el año, y estaba con un amigo suyo.
En la mesa, estaba sentado a la izquierda de él otro chaval, que tenía la apariencia de un nerd.
Este no tenía nada en la mesa, y parecía que se iba a ir.
Esto me huele a lío. Ignoralos, Riku.
“Y-ya te he dicho que no lo tengo”
“Te dije ayer que lo trajeras! Te lo llevo diciendo desde hace 2 días!”
El chico mayor sonaba enfadado, aunque parecía como si estuviera exagerando un poco. El ‘nerd’, en cambio, estaba asustado y nervioso.
“Eso! Nos tienes que dar el dinero, niñato de mierda!”
“Esto no lo voy a dejar pasar!” Al decir eso, el chico cogió al ‘nerd’ del brazo, intentando llevárselo.
Ehhh? Qué es esto, Disney Channel? Desde cuando estoy en los 80´s?
El mayor justo había aprovechado el momento en el que las ‘camareras’ se van dentro, a la cocina.
El resto de alumnos había dejado de mirar la escena. Supongo que no querían meterse en un lío, o que no estaban interesados en lo que pasaba.
Me sorprende, ya que a la gente le gusta meter las narices en todo.
Bueno, sí que había alguien que quería meter sus narices en el asunto.
=@º\’ , creyéndose un héroe, se levantó de su sitio.
“Que cojones haces???” Le reproché, en voz baja.
“Si quieres quedarte aquí, adelante, pero dejame ir”
Intenté detenerle, pero fue como hablarle a una pared.
“No tienes por qué meterte en cosas así. No vas a salir bien parado!”
“Mira, lo único que quiero es desahogarme por lo del último partido. No va a ser para tanto.”
=@º\ se dirigió hacia el bully. Después de pensarlo dos veces, &$%”! fue detrás suya.
“Como no vaya contigo seguro que la lías.”
Y ahora quieren buscar pelea los 2?! Puede que tengan buen físico, sobre todo =@º\, pero me sigue pareciendo una tontería.
Ni que fuéramos críos! Ya se levantará alguien a buscar a un profesor!
Tanto _¨*^?¿· como yo nos quedamos sentados. Yo no quería involucrarme, y, aunque _¨*^?¿· quisiera, no creo que su vergüenza le dejara.
Aunque ellos estén yendo, no los voy a acompañar solo porque sean mis amigos. También me da un poco de vergüenza, y solo haré más mal que bien.
“Tendremos que llamar a un profesor…” dijo _¨*^?¿·. Supongo que querrá que vaya yo a por uno.
“Puedes esperarte. Ya vendrá alguien con uno.
“De todas formas, ellos sabrán lo que hacen. Además, esto no lo arregla un profe ni de lejos. Puede que lo pare, pero seguramente vuelva a ocurrir en el futuro.” se lo dejé bien claro, que conste.
“Quién te crees que eres, aparte de un payaso, para levantarte así como así?” Al ver como =@º\ y &$%”! se le acercaban, el bully pasó a fijarse en ellos.
“Alguien que no tiene dos dedos de frente, a diferencia de la rata que tengo en frente”
“Si lo que quieres es calentarme aún más, entonces vamos al puto patio.” Joder, ahora suena hasta más cabreado. Por lo menos tiene cabeza suficiente para no empezar a pegarse aquí.
Tanto &$%”! como el amigo del bully se quedaron detrás de cada uno, aunque no se quedaban cubiertos con sus espaldas. Era como si fueran el support del tanque.
No tardaron en salir de la cafetería, directos al patio.
Podría haberles apoyado, o haber intentado parar la situación, pero no quise pasar por esa molestia y los dejé de lado.
Ya me disculpare luego. O, siquiera debo hacerlo? Está mal no querer pegarse con otros?
Y, no es ya demasiado tarde como para actuar? Digo, ya han pasado 6 minutos desde que salieron.
Aunque yo no estaba dispuesto a hacer nada, alguien decidió levantarse.
“Voy a buscar a un profesor” me dijo _¨*^?¿·, antes de salir de la cafetería.
Wow, supongo que entonces esto si es en serio. Más razón para no involucrarme.
Al final, la mitad de la clase se quedó mirando al niño con el que se estaban metiendo, y la otra mitad mirándome a mi…
Qué miráis? Acaso soy yo el que ha hecho algo raro?…
Aunque, me gustaría que dejarais de hacerlo.
Creo que me voy a ir.
Aunque tampoco duró tanto, si sentí más culpa de la que debería después de eso último. Además, ya habían pasado 8 minutos desde que ellos salieron, y 2 desde que _¨*^?¿ salió.
“… Agh, Joder…” susurré antes de levantarme también.
2.
El bully ya estaba preparado para empezar la pelea.
Todos estaban en un rincón apartado del colegio.
Era el lugar perfecto para estar, si no querías que te pillaran haciendo algo que no deberías.
Justo antes de que el chico mayor hiciera algo, =@º\’ habló.
“Por qué le estabais pidiendo dinero a ese chico?”
“Ahh?! Y a ti que más te da?”
“Dímelo.”
“Te estás echando para atrás ahora o qué?!”
“Voy a darte el dinero.”
“Eh?”
El chico dejó su postura agresiva, y relajó su cuerpo. Él y su amigo estaban sorprendidos de su respuesta. No se lo esperaba ni &$%”!.
“Pero primero dime, por qué se lo pedías?”
“Bueno, verás. Hace 2 días le pedí amablemente a ese chaval 1600 yenes, y me dijo que me los daría. Pero, como sabrás, todavía sigo esperándolos.”
“Y solo por eso le hablas así? Ni siquiera te los debe.”
“Pero me lo ha prometido! Una promesa es una promesa, no?”
=@º\’ suspiró. “Mira, te voy a dar esos 480 yenes ahora, pero deja en paz a ese chaval, vale?”
“Que sean 3200!”, dijo el amigo del bully.
“No. Te voy a dar los 1600. O coges eso, o te quedas sin nada”
“Creo que me gusta más la oferta que ha dicho mi amigo. O nos das los 3200, o no hay trato.”
“Dos mil. Eso es el máximo que os voy a dar.”
“Ya has oído lo que he dicho. Si no nos dais el dinero, o si os quejáis más, no nos vamos a aguantar más.”
&$%”!, un poco harto de la situación, dio un paso al frente e intervino.
“No es mejor que os demos dos mil y ya?! Vais a salir con más dinero que antes. Aunque no sea mucho, es algo.”
“Bueno…”
“Y una mierda!”
Aprovechando que &$%”! no estaba detrás de =@º\’, el amigo del bully se acercó a él y le pegó un puñetazo en toda la cara.
&$%”! no se lo esperaba, por lo que cayo de culo al suelo.
El golpe hizo que le sangrara la nariz, lo cual era sorprendente, teniendo en cuenta lo flaco que era el chico.
=@º\’, cabreado, intentó acercarse al canijo, pero el bully se puso en medio.
“Supongo que no me vas a dar nada, no?”
“Te voy a dar lo que querías. Algo para calentarte.”, dijo =@º\’, mientras se preparaba.
Cuando llegué, todo había acabado hace rato.
Sabía cual era el sitio al que iban, porque es el más escondido del instituto.
Con tan solo mirar unos segundos el panorama podía entender lo que pasaba.
Solo se pegaron el bully y =@º\’ , aunque a &$%”! le estaba sangrando la nariz, así que no sé quien habrá empezado antes.
&$%”! está sujetando a =@º\’ , el cual, al igual que el otro, quiere seguir la pelea.
Por suerte el amigo del subnormal no es tan imbécil y también le está reteniendo.
Los dos envueltos en la pelea estaban un poco mal, aunque no era para nada algo de lo que proecuparse.
“Ya es suficiente, Soeyu!”
“No has tenido suficiente ya?! Y yo estoy bien! Que me sangre la nariz no es para tanto!”
Justo cuando intenté acercarme a ellos, se escuchó una voz detrás mía, es un profesor.
“Qué ha pasado?”
Venía junto a _¨*^?¿ , y al parecer me estaban preguntando a mi.
Me giré para verle, y le contesté. “No, acabo de llegar, pero…”
Ahí, volví a girarme, mirando ahora al problema.
En cuanto el profesor los vio, fue directamente a pararlos.
El profesor nos dio una buena charla a todos. Sé que no iba dirigida a nosotros, pero nos la dio a _¨*^?¿· y a mí también.
Al acabar, se llevó a los 4 problemáticos. Supongo que primero a la enfermería, para luego ir a dirección.
Lo único que me jode de todo esto es lo que escuché mientras pasaban al lado mía.
Antes de que se fueran, alguien dijo algo.
“Gracias por la ayuda, Riku.”
Nadie del grupo me estaba mirando, pero sé que iba dirigido a mi. Fue =@º\’ quien lo dijo, con un claro tono sarcástico.
Entiendo que esté enfadado, pero me molesta que sea él quien lo diga, sobre todo después de decir que podía no hacer nada si quería.
No he hecho nada malo. Han sido ellos los que querían pelea, y pelea han tenido para rato.
Solo tienen derecho de culparme por ser un cobarde. El único que ha hecho algo bien es _¨*^?¿·. Eso es lo único de lo que se pueden quejar.
No me lo voy a tomar enserio. Me sienta mal que me vea de esa forma, pero, que le voy a hacer. Uno no puede pensar bien si está así de enfadado.
Además, somos amigos, no?
Por el resto de el día, =@º\’ y &$%”!estuvieron en el despacho del director, junto con los otros 2.
Al final de la última hora, &$%”!entró a clase. En cuanto lo hizo, fui hacia él.
_¨*^?¿ me dijo que tenía que irse pronto, para poder echarle un ojo a su hermano menor, por lo que solo estábamos nosotros 2 del grupo.
“Qué os han dicho al final?”
“Pues, a mi y al chaval que seguía a Soeyu nos han dicho que van a hablar con nuestros padres, y nos vamos a quedar a séptima hora al final de clases, a mi por 1 semanas y al otro por 2.
“A =@º\’ y a Soeyu los han expulsado 1 semana . Hasta han llamado a sus padres en medio de la charla” &$%”! suena claramente molesto.
“Entiendo lo mío, pero me jode que a =@º\’ le hayan expulsado lo mismo que a ese retrasado.”
“Qué esperabais que pasara? No podrías resolver algo así hablando, menos con gente como ellos.”
“Igualmente, no habría pasado nada si _¨*^?¿ no hubiera ido por un profesor.”
“Sé que estás enfadado, pero tampoco es como para echarle la culpa a él”
“Pero sabía que nos íbamos a apañar perfectamente. Además, no somos retrasados, si vemos que nos estamos pasando vamos a parar, quiera el otro continuar o no”
“Él no lo hacía con mala intención, lo ha hecho pensando en lo mejor para vosotros”
Mientras hablábamos, &$%”! se acercó a su mesa para coger su mochila, y se la puso en su hombro izquierdo.
“Entiendo que quería ayudar, pero podríamos haberlo resuelto todo nosotros solos. No has visto como estábamos intentando que pararan de pelear?”
Ambos empezamos a salir de clase.
“Y querías salir de ahí con tu nariz sangrando, y con la cara de esos dos con un par de golpes?”
“La enfermera se habría callado. Siento que a veces es demasiado buena, pero nos conviene a todos que no diga nada.”
“Igualmente, no creo que _¨*^?¿ haya hecho nada malo”
“Quieres que le echemos la culpa al director?”
“Pues sinceramente, si. No debería de haberos castigado de ninguna forma, ni a ti a =@º\’”
“Ya le hemos contado toda la situación, pero nos a dicho que da igual, ya que nos hemos ido con ellos al rincón, en vez de buscar a un profesor.
“También podrías decir que yo no he hecho nada, pero he seguido a =@º\’ , y hemos buscado pelea. Ahora que lo escucho por segunda vez, tiene sentido. Aunque me sigue molestando.
“A los únicos que no han dicho nada es a vosotros. _¨*^?¿ trajo al profesor, aunque me sorprende que no haya llegado uno antes, y tú no has hecho nada.”
Que recalcara eso último me hizo sentir un poco culpable de que eso hubiera acabado así, aunque no sea para tanto.
“No creo que mis padres me castiguen sin salir, o sin ir a la convención. Seguramente lo entiendan.”
“Si. Que ganas de que sea sábado.”
“Verdad? Yo me estoy poniendo un poco impaciente de tanto esperar.”
Al estar hablando tanto tiempo, llegamos a la entrada rápidamente. Nos paramos un momento para cambiarnos los zapatos.
“Hoy no tienes que quedarte?”
“No, me han dicho que a partir de mañana.
“Y, volviendo a lo de la convención, al final ibas a disfrazarte de eso?”
“Mhh, todavía no lo tengo claro. Sé que lo he comprado, y sería un desperdicio no usar el cosplay, pero me da mucha vergüenza”
Después de dejar los zapatos escolares en las taquillas, y llevar puestos los nuestros, salimos de la entrada.
“Me haría gracia verte con eso puesto. Aunque sería raro que tú llevaras cosplay y yo no”
“No creo. De todas formas, si lo llevara, el rarito sería yo, no tú”
“Eso espero”
Al cruzar la entrada a la secundaria, nos paramos enfrente de esta.
“Bueno, ya hablaremos más mañana”
“Si. Hasta luego.”
“Hasta mañana.”
Ambos nos despedimos del otro, y empezamos a caminar a nuestras casas.
3.
“Ahhh…”
Suspiré, cansado de hoy, a pesar de que no he hecho nada. No he ayudado en nada.
Solo he marcado mi presencia como alguien y poco más. No he ayudado en nada.
Incluso hasta he aportado solo cosas negativas. Me siento mal, aunque &$%”! haya dicho que he hecho bien en no ir.
Podría haber parado a _¨*^?¿ y dejar que el conflicto se resolviera solo, y por lo menos así no habrían castigado a nadie.
Pero, si no hubieran castigado a nadie, esos 2 imbéciles habrían salido ganando, no?
Quiero creer que he hecho lo correcto, pero, también podría haber hecho algo mejor.
Lo que sí he hecho mal es no haber mostrado interés en la situación en sí.
Eventualmente, alguien habría buscado a un profesor.
Da igual que yo me hubiera levantado primero. Incluso si _¨*^?¿ no se hubiera levantado, alguien lo habría hecho. Al menos, eso quiero creer.
La gente. Acaso era por vergüenza que no me levante?
No, tan solo quería evitar la situación, ya que era una molestia. No quería hacer algo que no necesitaba.
Si está bien no actuar, por qué =@º\’ ha dicho eso? Será que al final si le ha molestado que no fuera a pegarme, o que no parara a _¨*^?¿ ?
Yo espero que sea la segunda opción, ya que deberían de conocerme de sobra para saber que soy alguien temeroso. En primer lugar, no sé que tenemos en común aparte de algunos gustos y un humor roto.
Quiero creer que son mis amigos, pero, cuanto más lo pienso, menos tenemos en común.
Las únicas personas con las que no me pasa son con &$%”! y Amaya. Es eso lo que una persona necesita para ser mi amigo?
Qué será lo que nos ha llevado a ser amigos?…
No lo digo porque me caigan mal, pero más de una vez he pensado qué sería de mi si no los hubiera conocido, o si dejáramos de ser amigos de la nada.
Me arrepiento de no haber hecho nada? No me siento como con Amaya. No me siento mal, o con un peso más encima…
Quizás, podría compensar lo de hoy haciendo algo bueno…
“Mh…”
Si, me he decidido: Hoy quiero ayudar a Amaya de verdad.
No voy a llorar. Incluso si soy un llorón, hoy no lo haré. No pienso desahogarme, ni contarle tonterías de nuevo.
Puede que actúe igual de animada, pero su tono de voz se nota más cansado y débil.
Estaré siendo paranoico. Seguramente sea por los estudios. Por eso me lo preguntó ayer?
Tantas horas de sueño te quitan?
Sea lo que sea, quiero hacerlo. Solo espero que este espíritu aguante hasta llegar a casa.
A veces me sorprende lo fácil que me desmotivo para algunas cosas.
Al llegar a casa, no estaba mi padre, y mi hermana todavía no había llegado.
Supongo que hoy comeré solo. No me quejo, me gusta más así, la verdad.
Después de comer, esperé a que Amaya llegara, se duchara, y descansara un rato.
Tampoco quiero molestar al intentar ayudarla. Es bastante irónico que yo diga eso.
Intenté pasar el tiempo como pude, todo hasta las 6 PM
Creo que es una buena hora para ir a molestarla. Dejé de jugar y salí de mi cuarto, aprovechando también que mi padre todavía no había llegado.
Al final si me voy a meter con ella…
Estaba pensado eso mientras iba a su cuarto. Estaba en el mismo piso que el mio, el primero, solo que al final del pasillo.
Empecé a notar el ambiente un poco apagado, y con apagado me refiero a que no podía oír a Amaya hablar sola, o hacer cualquier otra cosa.
Sé que me estoy preocupando de más. Al final acabo haciéndome daño a mi mismo si pienso así.
Cuando llego a la puerta, la abrí un poco, haciendo el menor ruido posible para que no se diera cuenta, y miré a través del hueco que había.
La única luz era la que venía de la ventana, la cual estaba tapada por una cortina cutre.
“Amaya? Estás despierta?” Pregunté en voz baja
“Si. Dime.” Respondió en voz baja
Ella estaba tumbada en su cama.
Estaba dándome la espalda, con su cara en dirección a la pared. No estaba arropada, pero tenía pinta de que iba a dormirse.
Nunca me esperaba que la palabra ‘Siesta’ y ‘Amaya’ se conocerían eventualmente.
“Estás bien? Te encuentras mal?”
“No, solo tengo un poco de sueño”
Al verla así, decidí entrar sin encender la luz, y sentarme en la cama.
Si quisiera, podría acariciarle la cabeza. No, dejadme en paz, pensamientos intrusivos.
“Has venido a por algo?”
“Solo quería saber que tal estabas”
“…”
“Es tan raro que me preocupe por ti?”
“Lo raro es que luego no hables sobre ti…” lo dijo con un tono molesto…
Voy a dejar las bromas de la regla de lado, no quiero cagarla.
“… Perdón por…”
“No hace falta que pidas perdón, al final me acabas aliviando a mi también”
Qué frase más contradictoria, teniendo en cuenta tu tono hace unos segundos...
“Oh… bueno, igualmente..”
Si sigo así no voy a llegar a ningún la-
“Y, Riku.”
“Si?”
“Qué piensas sobre mí?”
“Eh? Sobre como te veo o como pienso que eres?”
“Si, algo así”
Hubo un breve silencio, en el que pensé que decir. Después de quitarme la vergüenza de encima, y de recordar lo que dije de camino a casa, decidí hablar.
“Bueno, si te digo la verdad, muchas veces pienso que no te merezco de lo buena que eres, eres amable, a veces sabes ponerte en el lugar del otro.
“Siempre haces las todo lo que que se te manda, o lo que te toca hacer, y ayudas a papá con varias cosas de la casa.
“También se te dan bien los estudios, nunca los descuidas. Tienes una buena personalidad, y unos gustos y opiniones respetables. Me gusta mucho que tengamos los mismos gustos, pero, incluso fuera de lo que a mí me gusta, siguen siendo algo muy respetable.
“Tienes una buena mentalidad, aunque a veces seas un poco pesimista. En el fondo, siempre te preocupas de los demás. Siempre quieres que las cosas salgan bien, incluso si no crees que vaya a ser así.
“En general, creo que eres una persona agradable y que merece la pena conocer. En cambio yo-”
Al final acabo cortándome a propósito, para no caer en el mismo hoyo de siempre. Ante el silencio después de mi monólogo, Amaya me hizo una pregunta.
“Crees que soy… eh… agradable a la vista?” Dijo Amaya avergonzada, con un tono de voz un poco más fuerte de lo esperado.
“Acaso crees que no lo eres? Y, tampoco hace falta que digas ‘agradable a la vista’. Tú crees que eres guapa?”
“T-te estoy preguntando a ti! Dios… Entonces, soy guapa o no?!” En cuanto lo preguntó de esa forma, las orejas de Amaya se tornaron de un leve color rojo.
Aún habiendo tocado una fibra sensible, sigue siendo así de buena. Es más mona que… esto… si, es muy mona!!
“Si. No es algo exagerado, pero estás por encima de la media. Aunque eso tampoco es lo más importante”
“De verdad piensas eso?”
“Si.”
Habría preguntado “No lo crees tú?”, pero me detuve.
Me mandaría a la mierda si lo dijera.
“Es raro que me preguntes eso. Ya me has dicho mil veces que te da igual lo que el resto piense de ti, no?”
“...En verdad has venido solo a esto? No vas a llorarme, y dejar que te consuele, para que al final solo puedas disculparte?”
Puede que sea verdad, pero tampoco es como para decirlo en voz alta. Ya lo sé de sobra.
“Quiero dejar de hacer eso…” dije con un tono de arrepentimiento.
“No lo digo por que me moleste, pero siempre que vienes aquí es para hacer el tonto, o para llorarme. Aunque, no quiero que dejes de hacerlo...”
“No te molesta?”
“No. La verdad no me sienta mal. Puede que sea de mal gusto, pero la mayoría de las cosas que sueles decirme se me olvidan a los pocos días, así que no es como si gracias a ti tuviese un peso enorme.”
“Pues lo de ayer tuvo que ser un milagro…”
“El qué?”
“Ves? Un milagro!”
“Ah, ya se que dices!” Amaya había dejado de hablar con ese tono con el que la he escuchado últimamente, y especialmente ahora.
“S-solo para estar segura, era algo sobre tu impresión, no?”
“Pin pon! Respuesta correcta!”
Por mi parte, estaba usando un tono de voz mucho más suave y bajo de lo normal.
Es una pena que me tenga que forzar a hacer esta voz. No puedo hablar así naturalmente?
“Qué tonto” Ella dejó escapar una risita junto con ese comentario.
“Sí, lo soy.”
Después de unos segundos, ella continuó hablando.
“La verdad, sienta bien ser capaz de hacer algo así, y que luego encima funcione. Siempre siento que no hago nada, pero, cuando sales de mi habitación, tan calmado y tan feliz, no puedo no sentirme aliviada y contenta.
“Veo como es que te duele llorar, pero el resto de veces solo veo que necesitas relajarte, y esa es tu manera de hacerlo”
“Relajarme mientras lloro? No tiene sentido alguno”
“No, no en el momento, pero sí después. Nos pasa a todos. No notas siempre que después de llorar te sientes mejor, así como aliviado?”
“Pues, la verdad es que no. Si me siento mejor, es por ti, como mucho.”
“Hoy estás muy meloso, no?!”. Mi hermana se puso roja de nuevo.
“Te molesta?”
“...Me da vergüenza.”
“Si quieres, puedo parar.”
“...Se te da bien dejarme en malas situaciones.” Dijo con un tono un poco molesto, aunque todavía estaba sonrojada.
“Me tomo eso como un ‘sí’?”
“...Sí.”
“…”
“E-en fin, volviendo al tema” Amaya se tomó una breve pausa antes de continuar. Supongo que sería para calmarse.
“Creo que lo que tú buscas al llorar es ese momento en especifico”
“No excuses mi problema para controlar mis emociones como un plan maestro para relajarme”
“No digo que sea el caso, es solo lo que creo. Puede que simplemente seas un bebé y ya, lo cual no es malo si sabes controlarte cuando toca. Creo que eso último es algo que tienes que mejorar, hermanito.”
“No me llames eso!”
“Por qué? No te puedo llamar así?”
“No me gusta…”
“Jiji, ahora tú te estás poniendo rojo”
“Y-y en que momento te has girado?!”
Amaya me estaba mirando un una sonrisa tonta. Parecía que tenía deficiencia neuronal. Y aún así se veía hermosa! Quién me llame siscon es solo un inculto!
“Bueno, de todas formas, puedo dejar de hacerlo si quieres. Por lo menos, yo quiero dejar de hacerlo.”
“No te siento bien hacerlo?”
“...No sabría como explicarlo.”
“Pues lo estás haciendo ahora.”
“Eh?”
“Me estás hablando sobre ti ahora mismo. No sabes por qué no quieres desahogarte conmigo, verdad?”
“No es que no lo sepa, es que…” Es que no quiero decirlo.
Ya sé lo que me va a responder. ‘
Solo te causo problemas’ ‘Me sabe mal recibir pero no dar’. Siempre me va a contestar ‘No pasa nada.’
“Si no sabes como explicarlo, no tienes por qué forzarte. Solo quiero que sepas que podemos hacerlo siempre que quieras, incluso ahora.”
“Pero no tengo protección…”
No parece enfadada, sobre todo por la broma tan mala que le he tirado a la cara. Parece hasta satisfecha. Solo que, no me convence del todo.
“Si estás con el humor de decir eso, y yo estoy lo suficientemente calmada como para decir que prefiero que me violen a hacerlo contigo, creo que ninguno de los dos está mal.”
“No, te equivocas. Los dos estamos muy mal de la cabeza.”
Por un momento, nos miramos fijamente a los ojos, y al poco rato empezamos a reírnos.
Todavía me preocupaba que ella estuviera escondiéndome algo. Probablemente lo estará haciendo, pero quiero dejarla con esta alegría, a ser posible. No quiero arruinar el momento.
“Ha… de verdad, menudas ideas que tienes”
“Lo mismo digo”
Nos tomamos un momento más para respirar.
“Si no te importa, quiero ver una película que tenía pendiente, y quería unas palomitas-”
“Ah, así que cuando he entrado a la habitación no te he pillado viendo porno?”
“Ya has perdido el momento y la gracia. No, eso directamente no es gracioso. Y por qué tiene que ser siempre algo guarro? Qué cerdo.”
“Perdón”
Ella levantó su pulgar, “Perdón aceptado!”
“Y, no, no voy a traerte palomitas. Hazlas tú.”
“Pero no quiero bajaaar. Ya estoy tumbada y a gustito en mi cama.”
“Te vas a tener que levantar para poner la película.”
“Pues pónmela tú.”
“Ok, pero primero, tienes que dejarme acariciar tu cabeza.”
“Muérete. Ya lo hago yo”
Amaya, ante mi completamente inocente y para nada impulsivo comentario, se levantó de la cama.
En el momento en el que lo hizo, me llevé la mano a mi cara. Esta tapaba la mitad de la misma.
Después, empecé a reírme, como si fuera un villano. También puse una voz exageradamente villanesca.
“Haha! Has caído en mi carta trampa!”
“Qué?!” Ella me siguió el juego, con una voz igual de forzada y exagerada.
“Al darte esa condición no buscaba que se me recompensara, si no lo contrario!
“Al contar tu absoluto rechazo, sabía que ibas a rendirte y levantarte por tu cuenta! “
“No es eso literalmente parte del trato?!”
“Veo que eres mucho más ingenua de lo que pensaba. Aunque me hubieras rechazado, yo habría ido a hacerte palomitas, y te habría puesto la película. Pero te has adelantado, y has decidido levantarte por tu cuenta!! Ahora que estás de pie, no tienes la excusa de estar a gusto en tu cama!!”
Amaya, al ver mi argumento, levantó el dedo índice, y empezó a moverlo de lado a lado, chasqueando su lengua al ritmo que movía el dedo. Estaba diciendo que ‘no’, pero, a qué?
Ella levantó su brazo, y me señaló. “Aquí el único iluso eres tú!”
“Cómo?!”
“Sí! Es qué no te das cuenta de la irracionalidad de tu argumento, Riku?”
“Es imposible que mi argumento tenga algún hueco! Es una mentira, una finta!”
“Por qué asumes que voy a ir a hacerme unas palomitas?”
“Eh?”
“Puede que vaya a encender el ordenador, pero en ningún momento he dicho que vaya a bajar!!”
“No puede ser!!”
“Sí! Ahora, al ser tú el que va a salir de mi habitación, estás condenado a traerme una buena bolsa de palomitas!!”
“No, no lo voy a hacer”. Dejé de usar la voz villanesca en el momento que dije eso.
“...Al menos lo he intentado. Ya bajaré yo.”
Amaya estaba por bajar. Antes de que se fuera, me abrí de manos enfrente suya.
“Estás bien? Te pasa algo? No te me vayas a confesar.”
“No. Esto es única y exclusivamente como hermanos.”
Amaya sonrió. Ella dio unos pasos hacia mí para abrazarme. No estuvimos mucho tiempo abrazándonos, y, al dejar de hacerlo, ambos salimos de su habitación.
Yo me fui a mi habitación, y ella bajó a la cocina.
Me alegro de haber ido, no sé si estaba cansada o deprimida, pero espero que pueda sentirse así de alegre por lo menos un rato más.
Al entrar a mi habitación, pensé en qué podría hacer. No se me ocurría nada que tuviera pendiente, a pesar de tener 100 cosas para hacer.
Después de un tiempo, me decidí en la última cosa que pensaría que acabaría haciendo: Cocinar.
No sé hacer muchas cosas. En realidad solo puedo hacer 4 platos, 2 de ellos precocinados.
Por esa razón, opté por la mejor opción, el plato que sé hacer de cero: Arroz con curry.
Lo que más me suele costar es la salsa, que en sí es lo único difícil.
Antes de empezar, me puse a buscar el libro de recetas de mi madre, se lo dejó aquí y nunca vino a por él.
Prefiero pensar en ello de esa forma en vez de un regalo de despedida. No quiero tener ningún regalo suyo.
A pesar de que lo haga con cariño, probablemente me salga más como una broma, ya que la última vez no salió muy bueno.
Aunque con no quemar nada me basta.
No tardé mucho en hacerlo, porque tampoco es algo absurdo. Igualmente, acabé sobre las 7 PM, que es un poco más de lo normal.
Me preocupaba mucho con todo, y estaba todo el rato repasando la receta para ver si había hecho algo mal.
El curry no me salió muy bien, pero agradezco que el arroz no se haya quemado. No sé ni como me apaño para hacerlo.
Mi padre normalmente llega a las 8 PM, y, como teníamos que esperarlo para cenar, tuve tiempo de sobra para hacer otras cosas, como ducharme, o leer un poco.
Debería haber hecho la cena más tarde...
Seguro que cuando cenemos va a estar fría. Intenté que eso no pasara dejando el arroz y el curry tapados, para conservar el calor todo lo que pueda. Aunque quizá ni hace efecto.
Mi padre llegó media hora tarde. Yo estaba con el móvil, esperándole en el salón.
“Hola”
“Ah, hola, Riku”
No tenemos una relación muy cercana, pero tampoco nos odiamos, o al menos yo no le odio a él.
Hace todo lo que puede, e incluso después de todo lo que ha tenido que aguantar, no ha explotado conmigo o con mi hermana.
Cuando yo era más pequeño, solía enfadarse de más, y le costaba un poco controlarse.
Ahora ha mejorado mucho. O, puede que solo se esté conteniendo.
Sea lo que sea que hace, creo que es mucho más maduro que antes.
No tengo el derecho de decir qué es ser maduro, si no lo soy en primer lugar. Solo creo que es un buen padre, aunque trabaja de más.
Espero que lo de mi madre no le haya afectado mucho.
“Qué tal en el trabajo?”
“Bien, pero me he enrollado más de lo que debería, por mi culpa vais a cenar tarde, perdón”
“No, no te preocupes, he hecho la cena”
“De verdad?”. Tampoco deberías sonar tan sorprendido…
“Si, espero que no te moleste. Y, espero haberlo hecho bien, hehe…”. Solté una risita nerviosa mientras me llevé la mano a la nuca.
Mi padre se acerca a mí para apoyar su mano en mi hombro.
“Jeje. No, me has hecho un gran favor, gracias”
No sabría decir si se ríe porque me he hecho la idea equivocada o porque piensa que me preocupo de más.
Empezamos a preparar la mesa. La cena, como me esperaba, estaba fría, así que tuvimos que usar el microondas.
Nuestra casa es prácticamente una casa de occidente. La puerta hacia el salón y la del patio siguen siendo correderas, pero el suelo es una tarima de madera.
“Riku, dile a Ayama que baje a cenar”
“Voy”
Al terminar de poner la mesa, fui a la planta de arriba a por mi hermana.
Gritar su nombre para que bajara no iba a funcionar, ya que su habitación está muy lejos de las escaleras. Añadiendo que ella está bastante sorda, siempre me toca lamarla.
Al subir, me paré en frente de su puerta.
Knock Knock
Hubo un breve silencio antes de que alguien contestara.
“Qué?”
“Está la cena”
“Ahora voy, solo dame un momento”
“No quiero esperar, porque quiero que pruebes la comida que he hecho con mi sudor y lágrimas! ”
Al acabar esa frase, abrí la puerta, para encontrarme a una Amaya sentada en la cama, mirando a su ordenador desde ella.
En su pantalla, se podía ver un anime. Estaban dos hombres abrazándose, y sin camiseta.
Muy varonil, si me preguntas a mí.
Aunque mi opinión no hizo que mi hermana se apiadara de mí.
“Te he dicho que esperaras!!”
Ella gritó, enfadada y sonrojada.
A partir de ese momento, mi vida empezó a correr peligro. Por instinto, cerré la puerta, justo en el momento en el que la bestia empezó a levantarse de la cama.
“Si si, tomate todo el tiempo que necesites!”
Eso fue lo último que dije antes de que ella abriera la puerta, y cogiéndome del cuello de mi camiseta, me metiera en su habitación para hacerme cosas innombrables.
“Alguien me ha pegado una paliza”. Fue lo primero que dije, de una manera dolorida y agotada, antes de sentarme en la mesa.
Solo me ha dado golpes flojos, aunque lo único que me molestó es que me clavó las uñas hasta que me salió un poco de sangre.
Fue a partir de ese punto que dejé de tomármelo a broma, y notar que ella estaba enfadada de verdad. No se porqué, pero eso me puso de mal humor.
La agresora se quedó mirando a su plato, aún avergonzada, aunque la verdad ya no se si es de una cosa o de otra.
“Qué la has hecho?” Mi padre, por su parte, no estaba enfadado con nadie. Tenía un tono calmado, que, en consecuencia, nos calmó a ambos un poco.
Eso, papá. Defiende a tu hijito menor, al cual han abusado brutalmente.
Y en cuanto dejé mis delirios, me dí cuenta de que mi padre me lo estaba preguntando a mi.
“Yo?”
“Si, tú”
“No he hecho na-”
“Ha entrado a mi habitación sin permiso” dijo mi hermana, interrumpiéndome, e incriminándome.
“No es eso lo que hago siempre?”
“Si, pero está vez he dicho que no entraras”
Mi padre suspira al entender lo que ha pasado.
“Y porque le tienes que pegar tú a el?”
“Porque… Quería. Se lo merecía, al menos un poco. Y tampoco le he pegado muy fuerte ”
“Con lo de las uñas te has pasado. No me importa si me pegas fuerte, pero no quiero que me claves las uñas como haces siempre.”
“…” Amaya no contestó.
Fue papá el que respondío por ella.
“Uno no ha hecho caso, y la otra se ha dejado llevar. No os voy a hacer nada, porque es algo que ambos tenéis que resolver.”
Con eso, mi padre no da una mirada a ambos. Ya sabíamos lo que teníamos que hacer, pero no queríamos decirlo por pura vergüenza.
Aunque tampoco tenemos otra opción.
“...Perdón por haberte pegado”
“Perdón por haber entrado sin permiso”
“… Oh, pensé que ibas a decir algo raro.”
“Y que más te voy a decir? No te voy a estar lamiendo el culo por algo así.”
“No, olvidalo, mejor si lo ignoras…”
Al decir eso, me quedé mirándola fijamente.
“Qué me miras ahora?”
“Era yaoi, a que si?”
“Si es que me apetece pegarte otra hostia!”
“Calmaros los dos. Ya sé que os lleváis bien, pero empezad a comer. Se va a enfriar si seguís así”
“...Si.” dijimos los dos a la vez.
El resto de la cena fue más normal. Nadie dijo mucho durante la cena, y no dijeron nada sobre la comida.
No sé si eso es algo malo o bueno. Puede que se callen por no herirme. Debería de preguntar.
“Está bueno?”
“Si” Respondió mi padre.
“Bueno, si, está bien. Porque preguntas?”
“Riku ha hecho la cena hoy”
“En serio ?!” Agradecería que no te sorprendieras tanto.
“S-si…”
No me quedó otra más que admitirlo. No sabía que el hacer la cena era algo por lo que me podría avergonzar. Cada día es una experiencia nueva.
“… Eso no quita que la cena no esté mala” dijo Amaya, de una manera más tímida.
Sé que no lo hace con mala intención, pero que lo diga de esa manera, sobre todo después de decir que está buena, hace que parezca que todo lo que cocino sabe mal.
Tampoco es que haya tenido la oportunidad de probar lo contrario...
Una cena en la que nadie hable sería algo anormal, pero tampoco es bueno hablar mucho. Eso no quita que siga prefiriendo comer solo.
Después de cenar, me puse a hacer los deberes. Gracias a mi impoluta memoria, decidí ver la tele y leer, olvidando así que existían.
Siempre me imagino olvidando la existencia misma. Como se sentiría tener la mente en blanco? Creo que ese día sería el más aburrido, y el más feliz que tendría nunca.
No tener que escucharme a mi mismo tiene que ser la experiencia más gratificante que podría vivir. Por algo me gusta tanto dormir.
Aunque tampoco es como que me odie. Siempre que la he cagado, lo he remediado como he podido. Eso tampoco significa que me considere buena persona.
Al final del día, da igual lo que yo piense de mí, ya que el resto me verá de una forma completamente distinta.
Nadie va a ser capaz de conocerme. Nunca.
Estaba leyendo en mi cama. Había logrado engancharme a una novela ligera, y cuando me apetece hacer algo, normalmente la acabo leyendo.
No me viene mal distraerme. Así la espera hasta el sábado se hace más amena.
Si siguiera así, ir a eso me acabaría decepcionando. Tener expectativas muy altas es malo, ya que normalmente son irracionales, o exageradas. Por eso prefiero calmarme.
De fondo, se escuchó una voz detrás de mi puerta.
“P-puedo entrar?”
Es mi hermana. Estará aquí para que duerma con ella de nuevo.
Me gusta hacerlo, no por que sea una mujer, o por que sea mi hermana, sino que así no me deprimo por la noche. No tengo oportunidad de hacerlo si tengo a mi cabeza ocupada.
“Si, adelante. No estoy viendo nada en mi ordenador” le respondí con un tono burlón.
Ella abrió la puerta y entró antes de contestarme.
“Haces que me arrepienta de haber pedido perdón…” dijo mientras miraba a un lado, con un leve rubor en sus mejillas.
“Bueno, vienes a lo mismo de ayer?”
“No. Me he dado cuenta de que lo que hicimos es muy raro, más teniendo en cuenta nuestra edad. Solo quería darte las buenas noches, como siempre”
“Si no quieres hacerlo porque creas que papá se parecería raro si nos viera así, no te preocupes. Él sabe que no somos ese tipo de personas. No es como si fuese algo desagradable, de todas formas”
“… Y se puede saber porque estás tan a la defensiva? Al final si lo gozaste por la noche o que??”
“Por una vez que me pongo a hablar en serio…”
Al final, ella se decidió en dormir en su cuarto, como la supuesta adulta que es.
Ya te digo yo que esa tía es más infantil que yo. Inmadura no. Admiro lo madura que es cuando toca, y eso que solo tiene 18 años.
Incluso si dijo que no iba a hacer lo mismo otra vez, si se sentó al lado mía, mientras yo estaba arropado y tumbado.
Dejé el libro a un lado, como si fuera a continuar leyéndolo Seguramente me vaya a dormir después de esto.
“Entonces, quieres hablar de algo más?”
“Bueno… esto… quería preguntarte, sobre qué podría verme...
“… Y no me voy a ver Re:Zero otra vez” Creo que mi sonrisa exagerada y mi entusiasmo han delatado que iba a decir esto.
“Ugh…”
“Quería algo para verme ahora antes de dormir”
“Te importa si es una película?” Ya sabía que le iba a decir.
“Nah, adelante”
“Se llama “I Want To Eat Your Pancreas”, es mi película favorita”
“Es de anime? Nunca había oído hablar de ella”
“Si, lo es”
Se ve satisfecha después de haberla contestado.
“Bien, pues voy a verla ahora mismo”
Antes de irse, Amaya se acercó a mí para darme un abrazo. Me da vergüenza tanto pedirlo como darlo, pero el simple hecho de recibirlo me da la vida.
Y no en un sentido guarro. A veces, por alguna razón, siento que me hago distante de ella, por lo que esto es una manera de recordarme que no es así. Solo por una vez, voy a quitarme la vergüenza
“Amaya”
“Si?”
“Te quiero”
Ella sonrío levemente, pero no se sonrojó en lo absoluto.
“Yo también te quiero”
Al final, ambos acabamos sonriéndonos mutuamente. Sinceramente no sé para que quiero tener una novia si aprecio una relación así 100 veces más.
Seguramente sea porque soy un esclavo de la lujuria. Ojalá no pensar tantas veces en cosas así.
No hice nada más cosas esa noche, me fui a dormir como siempre, aunque me costó bastante hacerlo. Si tuviera que adivinar, estuve dos horas para dormirme, lo pasé mal.